Boletín UNAM-DGCS-595
Ciudad Universitaria
Pie de fotos al final
del boletín
PERROS DE RESCATE
DE
El primer grupo de
perros de búsqueda y rescate en México nació en
Así lo explicó
A lo largo de su
historia, los canes han estado presentes en desastres como las explosiones del
sector Reforma, en Guadalajara, y de la central de abasto de Celaya, Guanajuato,
así como en Acapulco, Guerrero, luego del paso del huracán Paulina; el rompimiento de
El Programa, apuntó
Ahora, se ha buscado dar opciones al manejo de los perros, más allá de
las tradicionales búsquedas en zonas inundadas o en estructuras colapsadas. De
ahí, sus nuevas tareas y otras futuras, como podría ser la detección temprana
de enfermedades, dijo el coordinador, a cargo del grupo desde hace seis años.
Olfato prodigioso
Mientras que un ser humano recuerda a las personas mediante imágenes,
los perros lo hacen a través del olfato, el principal sentido, 10 mil veces más
sensible que su gusto.
Los caninos tienen 44 veces más células olfativas; las personas poseen apenas
cinco millones, mientras que ellos pueden tener 220 millones o más. Su área
para percibir olores es de
Si alguien
sin entrenamiento tuviera que estimar cuántos olores diferentes existen, podría
citar algunas decenas, o quizá centenares. Un catador de vinos puede alcanzar
una suma más elevada, en tanto que un perfumista podría distinguir entre 30 mil
matices, pero un perro es capaz de discernir una molécula entre un millón.
De hecho, explicó
“Primero olfatean,
después escuchan y al final desarrollan la vista, a diferencia de nosotros, que
primero vemos, luego escuchamos y al final olemos. Los perros, prácticamente, miran
con la nariz”, expuso el universitario.
Las
partículas odoríferas que detectan son de peso diferente, algunas tienden a
caer al suelo, mientras que otras flotan en el aire; por esta razón, en
ocasiones olfatean a ras de tierra o se orientan siguiendo aromas aéreos con la
cabeza erguida.
Los perros de rescate,
prosiguió Velázquez, ventean, es decir, detectan aromas en el aire, emanados de
un sitio como un edificio derrumbado, por ejemplo.
Preparación
El Programa de
Manejadores de Perros de Búsqueda y Rescate forma parte de
Los especialistas no sólo atienden a la
comunidad universitaria, sino acceder al exterior en casos de sismo, inundación
o incendios; de igual manera, los manejadores de
perros se capacitan con cursos de evacuación y protección civil básicos.
Sobre el mismo asunto,
A su vez, Contreras Campos abundó que el grupo se conforma por 30 participantes y cinco perros operativos, más otros siete en
formación. Se trata de estudiantes de las prepas 5 y
6, de las facultades de Medicina Veterinaria, Filosofía y Letras, Ciencias
Políticas y Odontología, e integrantes de institutos como Química y Ciencias
del Mar y Limnología.
También figuran personas
externas, sin limite de edad –el más joven es un niño
de 13 años, que ya se prepara para participar en los operativos cuando cumpla los
18–, con la única condición de tener buena condición física.
“No es necesario tener
perro, se puede seleccionar uno, pues se mantienen vínculos con criadores;
contamos con un acervo virtual de animales, que pudieran ser aptos para ciertas
personas. De ese modo, se tienen camadas más controladas y los cachorros se
destinan a un entrenamiento temprano”.
Al rescate del lince
En noviembre de 2004,
se inició una nueva faceta para el Programa de Manejadores de Perros de
Búsqueda y Rescate. A partir de esa fecha, comenzó la colaboración con el
biólogo
El científico
necesitaba localizar ejemplares de lince en
Se trata del primer caso en México de un perro especializado en la
tarea de detección de excretas o heces fecales de ese animal, para un estudio
de conservación, sostuvo Julio Velázquez.
El felino tiene un
orden en sus trayectorias de cacería y tránsito, no disemina el excremento, lo
coloca en lugares específicos que el investigador denomina letrinas, localizadas por el perro; ahí se instalan cámaras
fotográficas automáticas para captar al mamífero en su estado silvestre.
Las muestras
–identificadas por número y ubicación con posicionador satelital, fecha y demás
datos–, se recogen para ser analizadas en el
laboratorio y conocer el sexo del animal, si está en celo o gestante o bajo
algún tipo de estrés o alimentación.
Con la ayuda de Max se situó el también llamado gato
montés, en las inmediaciones del DF. "No se pensó encontrarlo en Tres Marías
y otras zonas tan cercanas a la ciudad, incluso pobladas, relató Velázquez.
El perro entrenado
también viajó a Sonora, pero debido a las condiciones climáticas extremas y a la
fauna peligrosa, los resultados no fueron favorables.
"Aprendimos que
debemos trabajar con perros oriundos del lugar, por lo que se piensa entrenar
al perro para una labor no menos importante: discernir qué tipo de excreta se
trata y verificar que sea exactamente la que se rastrea y no de otra especie”,
apuntó.
Otros proyectos
Cuando ocurre un
desastre, se requiere no sólo la búsqueda de personas vivas, pues “las familias
no descansan hasta encontrar, al menos, los restos de su ser querido”; por
ello, se pensó en contar con dos perros que detecten cadáveres, señaló Julio Velázquez.
Para inducir el aroma a los canes, se utiliza cabello humano,
dientes, sangre, uñas, pero también se usan sustitutos, pseudo-aromas que se
consiguen en ampolletas y que vienen etiquetados como cadáver putrefacto,
cadáver reciente, persona viva o persona estresada, por mencionar algunos.
En todos los casos, los
perros de búsqueda son una herramienta; cuando marcan un sitio, los
especialistas localizan y extraen a la persona con ayuda de aparatos de escucha
electrónicos. “Es un proceso complejo, pero no por ello, el grupo se detiene en
su afán de ayudar a la comunidad universitaria y a la sociedad mexicana”,
concluyó.
-o0o-
Foto 01
Foto 02
Max, un golden retriever casero, fue entrenado para localizar
ejemplares de lince, sin invadir el ambiente natural del felino.
Foto 03
Foto 04.
Los perros tienen
44 veces más células olfativas que los humanos y es capaz de discernir una
molécula entre un millón; de ahí su ventaja y aprovechamiento en acciones
de búsqueda y rescate.