13:00  hrs. 24 de Junio de 2008

  

Boletín UNAM-DGCS-401

Centro Cultural Universitario Tlatelolco

 

 

Roberto Escalante

 

Pie de foto al final del boletín

 

 

REQUIERE MÉXICO DE UNA POLÍTICA ENERGÉTICA DE MEDIANO Y LARGO PLAZOS

 

 

  • Reconocieron los participantes en el segundo día del Debate Universitario sobre la Reforma Energética, en la UNAM
  • Para el director de la FE, Roberto Escalante, mientras Pemex sea parte del presupuesto no contribuirá al desarrollo nacional
  • Se debe penalizar con mayor severidad los usos ilícitos de la energía eléctrica, propuso el académico de la Facultad de Ingeniería, Eduardo Arriola Valdés
  • El integrante de la FI, Jacinto Viqueira, dijo que la principal preocupación debe ser el calentamiento global y el cuidado del medio ambiente
  • Mariano Bauer Ephrussi, del Instituto de Física, subrayó que las posibilidades de proponer una política de transición energética están supeditadas a factores como accesibilidad, disponibilidad y aceptabilidad de la misma

 

Ante la caída de las reservas probadas, el incremento de la deuda de Petróleos Mexicanos (Pemex) y la situación general de la industria petrolera nacional, México requiere una política energética de mediano y largo plazos, que impulse proyectos de refinación y de petroquímica, reconocieron los participantes en el segundo día del Debate Universitario sobre la Reforma Energética.

 

En la mesa Política Energética de México. Diagnóstico, posibilidades y necesidad II, el director de la Facultad de Economía, Roberto Escalante Semerena, consideró que mientras Pemex siga siendo parte del presupuesto no podrá contribuir al desarrollo nacional, con generación de fuentes alternativas de energía.

 

Además, la paraestatal requiere autonomía de gestión, con una reforma que transparente las operaciones financieras y ataque la corrupción de la que ha sido objeto, así como una transformación sindical que no cancele los derechos legítimos de los trabajadores.

 

Al exponer cifras sobre la situación de la empresa, Escalante Semerena informó que entre 1999 y 2007, la importación de gasolina en el país pasó de 103 mil barriles diarios a 300 mil; mientras de 2004 a 2006 pasó del tercero al sexto lugar mundial en producción petrolera.

 

En esta mesa fungió como moderador Gustavo Parés, de la Facultad de Odontología, y como relator, el titular del Instituto de Geofísica, Francisco Valdés Galicia.

 

 

Por su parte, el académico de la Facultad de Ingeniería (FI), Eduardo Arriola Valdés, dijo que se deben penalizar con mayor severidad los usos ilícitos de la energía eléctrica, pues además de constituir un robo a la nación, quienes lo hacen consumen de manera dispendiosa, sobrecargan las instalaciones y ocasionan fallas que afectan el suministro a los usuarios.

 

También es necesario diversificar el portafolio de energéticos primarios para generar energía eléctrica, incorporando “agresivamente” fuentes renovables como la eólica, la solar, la geotérmica y la hidroeléctrica, tecnologías probadas como la nuclear y la gasificación de carbono integrada a ciclos combinados, para reducir la elevada dependencia de los hidrocarburos.

 

Asimismo, subrayó que es indispensable impulsar los proyectos de cogeneración de vapor y energía eléctrica, las iniciativas para reducir las emisiones de gases contaminantes y de efecto invernadero a la atmósfera.

 

A su vez, el investigador del Instituto de Física, Mariano Bauer Ephrussi, subrayó que las posibilidades de proponer una política de transición energética están supeditadas a factores como accesibilidad, disponibilidad y aceptabilidad de la misma, que hasta ahora no se han contemplado ni tampoco se ha presentado una contrapropuesta.

 

 

Los parámetros del Consejo Mundial de Energía como necesarios para un desarrollo energético sustentable se refieren a que la población debe acceder a energías comerciales; en México, 40 por ciento de la población se encuentra en situación de pobreza y gran parte de ella en condición extrema, mencionó.

 

La disponibilidad contempla que una vez que se tenga la accesibilidad, se debe ofrecer una estructura que garantice la fluidez sin interrupción, y la aceptabilidad se refiere a que dicha propuesta no dañe al medio ambiente, especificó.

 

Además, agregó, para alcanzar la transición es necesaria una reforma fiscal integral, una autonomía de gestión a los empresarios, que se refiere a la liberación del blindaje sindical, y una reforma laboral que permita que la empresa progrese, indicó.

 

El también académico de la FI, Jacinto Viqueira Landa, destacó que la principal preocupación en la política energética debe ser el calentamiento global y el cuidado del medio ambiente, pues citando al Premio Nobel, Mario Molina, no se puede  acabar la atmósfera antes que el petróleo. Este planteamiento consiste en abandonar gradualmente los combustibles fósiles y remplazarlos por energías sin carbón.

 

La energía solar es la más abundante en el país, es un recurso inagotable y al planeta cada 30 minutos llega una cantidad comparable a la demanda anual mundial de energía primaria, especificó.

 

Sin embargo, el problema radica en cómo emplearla; el tiempo de insolación utilizable a plena carga es de mil horas al año, en promedio, en zonas templadas de la Tierra y dos mil horas en las más soleadas de los trópicos, como en el caso de México, concluyó.

 

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FOTO 01.

 

Aspecto de la mesa Política Energética de México. Diagnóstico, posibilidades y necesidad II, dentro del Debate Universitario sobre la Reforma Energética, en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco.