Boletín
UNAM-DGCS-301
Ciudad Universitaria
Pie
de fotos al final del boletín
DESARROLLAN EN
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Se trata de un socket
ajustable, donde se introduce el muñón para sujetar la prótesis y así estar en
condiciones de una adecuada utilización
·
El desarrollo, encabezado por el jefe del
Departamento de Ingeniería Mecatrónica de
·
Posteriormente, se buscará que sea autoajustable, es decir, que se acople a las variaciones
del volumen de la parte afectada
·
El Instituto de Rehabilitación de Chicago,
Estados Unidos, mostró interés por conocer los resultados de las pruebas con
este modelo
Ante la necesidad de
contar con un mecanismo que se adapte a los requerimientos de las personas que
sufrieron alguna amputación de brazo o de pierna, integrantes de
El equipo de trabajo, encabezado por el jefe del Departamento de
Ingeniería Mecatrónica de
Con esta innovación, se
logran aportaciones a los dispositivos similares del mercado, pues ya no se
tendrán que hacer a la medida de la persona, sino que es posible ajustarlos a
las variaciones del muñón; los componentes se pueden fabricar fácilmente sin
necesidad de obtener un molde.
En México, destacó, no
hay suficiente información sobre el número de individuos amputados. No
obstante, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e
Informática, en 2000 había en el país un millón 800 mil personas con alguna
discapacidad, en donde el 45 por ciento (813 mil) era motriz, sin especificar
el tipo: personas amputadas, biamputadas,
paralíticas, semipléjicas y cuadrapléjicas,
entre otras.
El sector salud tampoco
tiene estadísticas del número de población con algún tipo de pérdida, pero sí
hay muchas por la diabetes, los accidentes y el cáncer. El socket
no sólo se utilizaría en el país, sino podría exportarse.
Por otro lado, mencionó
que con el modelo ajustable se hizo una visita al Instituto de Rehabilitación
de Chicago, Estados Unidos, donde se mostraron interesados en conocer los
resultados. En cuanto se tengan, se les enviarán para que realicen algunos
experimentos. “Se quiere establecer una colaboración interinstitucional para
hacer más pruebas, porque allá, desafortunadamente, hay muchos pacientes y
además recursos; así se podría validar el diseño en el ámbito internacional”.
Con este proyecto se busca obtener el prototipo en varias medidas. Por
el momento, sólo se delineó una talla intermedia, pero el propósito es que se
pueda ajustar a las dimensiones del miembro afectado, explicó Dorador.
Además, el diseño ya está en proceso de ser patentado; se acudió al
Instituto Mexicano de
Se han superado los primeros exámenes. Es un procedimiento largo y, por
el momento, se considera en trámite mientras el IMPI concluye los estudios. No
obstante, como ya está protegido bajo esa figura, es posible empezar a divulgar
acerca de las ventajas del socket, añadió.
El académico
universitario señaló que desde hace años trabajan en el esbozo de prótesis,
sobre todo con las de un miembro superior, puesto que se fabrican menos que de
pierna. “Es importante enseñarle a los alumnos el diseño mecatrónico,
con la elaboración de dispositivos útiles para las personas que sufrieron
alguna amputación”.
También, se encontró que los aparatos para las extremidades tienen
problemas importantes en la interfase entre el muñón y el reemplazo. El socket fija a ambos para un correcto
funcionamiento y sirve para brazo y pierna, detalló.
En el caso de los que se utilizan para pierna, cuando la persona está
recién amputada los músculos comienzan a adelgazar, se empiezan a hacer más
pequeños y llegan a estabilizarse en cierta dimensión después de un año del
corte; es en ese momento cuando se hace la prótesis definitiva, comentó.
Sin embargo, si no se ejercita ni se acude a rehabilitación, continúa
el adelgazamiento y contracción, y llega un momento en que la prótesis no se
ajusta, expuso.
Por ello, abundó
Dorador, se presentan varios problemas: si el instrumento no está a la medida
del muñón tiene un caminar inseguro, la prótesis se vuelve incómoda y puede
tener roces indebidos, sobre todo si la pérdida fue por diabetes, una de las
causas más comunes.
Hoy, estos aditamentos se deben fabricar a la medida del muñón, es
decir, es un proceso totalmente artesanal, donde las piezas se hacen para cada
persona, lo que implica costos altos y mayor tiempo de elaboración. Empero, es
posible realizar un socket que se puede ir
ajustando a las variaciones del miembro afectado.
Si una persona atlética
acude a rehabilitación y hace ejercicio, los músculos del muñón se conservan en
sus medidas, refirió. Sin embargo, si se descuida, si sube o baja de peso, la
prótesis ya no le funciona.
Por ello, en
En la actualidad, un
alumno de maestría de
La próxima etapa es
hacerlo autoajustable, es decir, que sólo se acople a
las variaciones diarias del volumen del muñón, porque en el día también cambia
sus dimensiones, adelantó.
A finales de este año,
se deben tener los resultados de las primeras pruebas con personas amputadas
para ver el funcionamiento de las bolsas del sistema de ajuste. Para finales
del 2009 y principios del 2010 debe estar listo uno autoajustable.
“Una vez que se tengan las primeras pruebas, se empezaría a hacer el licenciamiento
de la tecnología por parte de
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FOTO 01
Un equipo encabezado por el
investigador de
FOTO 02.
Integrantes de