Boletín
UNAM-DGCS-290
Ciudad Universitaria
Pie de fotos al
final del boletín
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El tutor de la maestría en Ciencias Médicas de
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De acuerdo con datos de
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Es más complicado prevenir y controlar este padecimiento
en las poblaciones más jóvenes, aseguró el investigador de
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Propicia el desarrollo, entre otras, de
ateroesclerosis, insuficiencias cardiaca y renal, alteraciones en la visión y
accidentes vascular-cerebrales o infartos cardiacos
Se estima que el uno por ciento de los niños mexicanos en
edad escolar padece hipertensión arterial, afirmó el tutor de la maestría en
Ciencias Médicas de
Es un problema serio y costoso en materia de salud. En Estados Unidos,
se calcula que 61 millones de personas sufren en alguna forma de una enfermedad
cardiovascular, y de ese total, 50 millones tienen presión arterial elevada. En
México, de acuerdo con datos de
Este trastorno, explicó
Alva, es la elevación de la presión por arriba de lo normal. En los menores
debe remitirse a tablas establecidas de valores; entre más pequeños es más
baja. Por ejemplo, en los adultos el estándar es 120-80, mientras en un recién
nacido es de 65-50.
No obstante, agregó, las
cifras normales no son absolutas ni constantes; son más bajas al amanecer y más
altas luego del desayuno, cuando se está listo para trabajar, en el caso de los
mayores. El sistema cardiovascular, como todos los biológicos, es cambiante.
En caso de duda,
sostuvo, puede realizarse un monitoreo, a través de un dispositivo que registra
la presión arterial durante todo el día. Una vez analizados los datos en la
computadora, se sabe con mayor certidumbre si el individuo tiene registros
anormales.
La primera causa de ese problema de salud en los menores es
renal: por parénquima, glomerulonefritis, tumores o quistes, entre otros, y
representan el 50 por ciento de los casos. La otra mitad se presenta
fundamentalmente por coartación de la aorta, o por origen metabólico, cerebral
e inmunológico, como el lupus, y renovascular, que es
No es frecuente encontrar este padecimiento en infantes, en
comparación con los adultos: afecta de
Este padecimiento se
clasifica en dos grandes grupos, dijo. El primero es aquel sobre el que no se
sabe la causa, siendo más frecuente en adultos. Aparece mayormente en la
adolescencia, sobre todo en los obesos, y tiene un ingrediente familiar, esto
es, participa
Sobre las
complicaciones, sostuvo que la hipertensión arterial, sea un infante o un adulto,
debe tratarse enérgicamente, porque padecerla favorece el desarrollo, entre
otras, de ateroesclerosis, insuficiencias cardiaca y renal, alteraciones en la
visión –porque se daña la retina–, y accidentes vascular-cerebrales o infartos cardiacos.
Respecto a los síntomas,
destacó que en los niños son difíciles de detectar, pero cuando se presenta una
infección urinaria o alteraciones en la orina es conveniente medir
El niño obeso y con
antecedentes de ese mal que entra a la adolescencia es candidato a sufrir
hipertensión toda
La obesidad en
Por tanto, consideró, la
prevención es importante. Hay que tratar a todo enfermo, sobre todo si es
joven, sin olvidar que hay que estudiarlo para ver si la hipertensión no es
secundaria. Si un niño hipertenso es atendido a tiempo y adecuadamente, se
evitan las consecuencias.
Al respecto, el
especialista de
Entre los resultados,
informó que se encontró que en un segmento que se suponía saludable, entre 20 y
42 por ciento tiene hipertensión o prehipertensión. En estos últimos no hay
presión elevada, pero por el estilo de vida que llevan –sedentarismo,
alimentación con elevados carbohidratos y sales, y niveles de estrés
inadecuadamente manejados–, es probable que presenten ese mal.
Pero no aparece de
repente, pues tiene una evolución de cuatro a cinco años. Por ello, la mayoría
de los jóvenes analizados han tardado o tardarán entre 10 y 15 años para exteriorizar
molestias físicas.
Por eso, comentó, se han
enfocado también al diseño de un programa adecuado para quienes no se sienten
enfermos ni lo están todavía, basado en la modificación de los factores
psicológicos que contribuyen a que una persona pase de un cuadro asintomático
de hipertensión a uno sintomático. El propósito es que modifiquen el manejo de
estrés y no lleguen al cardiólogo.
En los 60, en
Los psicólogos, expresó
Domínguez, producen tranquilidad en el cerebro mediante sencillas técnicas de
relajación. Todas tienen en común usar pensamientos emocionales positivos, como
el recuerdo de una relación amorosa, una fiesta agradable o unas vacaciones
descansadas, por ejemplo. Al ser evocados, se producen cambios en el ritmo
respiratorio, disminuye el tono muscular y la frecuencia cardiaca; también hay
cambios, ahora se sabe, en el sistema inmunológico, porque si se está tranquilo
hay mayor capacidad para defenderse.
Otro hallazgo del
especialista
Como psicólogos,
enfatizó Domínguez, lo que se hace “es contribuir primero a la medición cada
vez más rápida y exacta de los cambios periféricos y fisiológicos que indican
la regulación emocional”. En un minuto, se sabe si una persona tiene esa
posibilidad. Esto se analiza con pacientes del Hospital General de México.
Una vez conocido, y si
además esa persona tiene hipertensión, se le informa que la condición
cardiovascular está en riesgo, que tiene la obligación de dominar su estrés y
que si no lo hace tendrá serias consecuencias.
Los niños y jóvenes, resaltó, plantean un manejo donde intervienen los
cardiólogos y los psicólogos. A los adolescentes, en particular, es difícil
convencerlos, porque no se sienten mal; menos si son niños. No hay conciencia
de
Con la estrategia respectiva, indicó, esperan lograr que al menos la
mitad de los que aprendieron a controlar su estrés no lleguen a la etapa
sintomática, que observarán hasta dentro de tres o cuatro años
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FOTO 01
La primera causa de la hipertensión
en infantes es renal, y representa el 50 por ciento de los casos, dijo el
especialista de
FOTO 02
La presión arterial elevada
disminuye cuando los pacientes aprendían a bajar el nivel de estrés, gracias a
técnicas psicológicas, afirmó el especialista de
FOTO 03.
En México, de acuerdo con datos de