12:30 hrs. 5 de Abril de 2008

  

Boletín UNAM-DGCS-214

Ciudad Universitaria

 

 Carlos Arteaga

 

Pies de foto al final del boletín

 

 

LA PROFUNDIZACIÓN DE LA DESIGUALDAD SOCIAL, EFECTO DE LA GLOBALIZACIÓN EN MÉXICO

 

 

Las políticas de ajuste aplicadas en México por la globalización han profundizado la desigualdad social, han generado la pérdida progresiva de credibilidad en los partidos políticos y han multiplicado la pobreza, señaló el director de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) de la UNAM, Carlos Arteaga Basurto.

 

Se ha presentado, además, la pérdida de la universalidad de la estrategia social, la disminución de gastos en este rubro en los presupuestos estatales y la disparidad tecnológica, indicó el funcionario universitario al intervenir en el Primer Coloquio Interinstitucional Educación, Administración y Trabajo Social: las Interrelaciones Disciplinares, organizado por la ENTS y el Colegio de Estudios de Posgrado de la Ciudad de México.

 

En el ámbito humano, también ha habido repercusiones que han llevado a interrogarse si será posible hacer realidad la tolerancia, también garantizar los derechos humanos y la seguridad social, y si es posible también que convivan diferentes culturas.

 

Un dato en el ámbito mundial, comentó el director de la ENTS, destaca que los ingresos de los 358 multimillonarios globales, como se les ha llamado, equivalen al de dos mil 300 millones de personas más pobres, es decir, 45 por ciento de la población mundial.

 

Ante los desajustes del modelo global, Arteaga Basurto propuso como alternativas emergentes la búsqueda de un equilibro  e  integración  de la política económica y social; la actuación de un Estado promotor del interés y del bien común, sin caer en el exceso de las intervenciones estatales.

 

También, el reforzamiento  de  los  gobiernos  locales  y de  sus instituciones políticas, el fortalecimiento de la identidad cultural, a fin de estimular el sentido de pertenencia, así como la promoción de la participación social, como protagonista trascendente en la constitución de una vida civil democrática

.

 

Sucede, explicó, que dentro de la globalización el orden de la economía mundial ha creado dependencia entre las naciones, un mercado dominado por grandes consorcios y cadenas de producción, distribución y vinculación asimétrica, lo que se observa claramente en América Latina.

 

Esta última región, precisó,

es la más desigual del mundo: el estrato social más rico capta más del 35 por ciento del ingreso total en la mayoría de los países y, en general, lo que percibe es 20 veces superior a lo que recibe el 40 por ciento más pobre.

 

De este modo, puntualizó, persiste un contexto latinoamericano a partir del modelo neoliberal de acumulación privada del capital para sectores minoritarios de la población, una ruptura de la estructura agraria, con violentos procesos de migración rural y una tendencia a la monopolización de la economía local por el capital extranjero.

 

Adicionalmente, la privatización de los activos públicos, la aplicación de programas de ajuste y de estabilización macroeconómicos, el desequilibrio entre los sectores productivos, el inicio de la exclusión de grandes masas del mercado de trabajo directo y formal y la decreciente intervención del Estado en el proceso de desarrollo urbano-rural, agregó.

Pero también los nuevos criterios en política social se basan en la privatización, el individualismo, la compensación, el clientelismo y el combate a la pobreza extrema. La atención a lo social se reduce básicamente a erradicar esta última a partir de un esquema compensatorio.

 

Ante ese panorama, las salidas para América Latina tendrían que ser: recuperar el crecimiento económico y mejorar la condición de vida, dijo el titular de la ENTS en la conferencia El Trabajo Social en el contexto de la globalización, dictada en el auditorio Manuel Sánchez Rosado de esta entidad universitaria.

 

Sobre los retos para el Trabajo Social dentro de la globalización se identifica una reflexión en este campo, que implica el ejercicio de rupturas con viejas formas y acercamientos a novedosas alternativas, acordes la realidad, y la reorientación de los procesos formativos de los futuros trabajadores sociales, en la línea de potenciar la práctica profesional.

 

Asimismo, el diseño de estrategias que formulen respuestas articuladas en nuevos paradigmas, que den pautas para generar procesos de carácter incluyente y de participación, tal y como la gerencia y la gestión social; es la exigencia de penetrar en el mundo de la transdisciplinariedad.

 

 

En síntesis, tendría que consensuar rupturas con viejas formas de comprender e intervenir, fortalecer la práctica como fuente de conocimiento, proponer planos analíticos sobre lo social y reflexionar, redefinir y construir marcos teóricos y metodológicos, concluyó al participar en la Mesa Uno Educación, globalización y justicia social.

 

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FOTO 01

El director de la ENTS de la UNAM, Carlos Arteaga Basurto, intervino en el Primer Coloquio Interinstitucional Educación, Administración y Trabajo Social: las Interrelaciones Disciplinares.

 

FOTO 02.

Asistentes al Primer Coloquio Interinstitucional Educación, Administración y Trabajo Social, organizado por la ENTS de la UNAM y el Colegio de Estudios de Posgrado de la Ciudad de México.