Boletín
UNAM-DGCS-208
Ciudad Universitaria
Pies de foto al final del boletín
IMPULSA UNAM EL PROGRAMA
ADOPTE UN TALENTO ENTRE ALUMNOS DE
EDUCACIÓN BÁSICA
Con el fin de detectar talentos y fomentar el desarrollo de habilidades
y aptitudes, relacionadas con el quehacer científico entre niños y adolescentes
de educación básica, investigadores de la UNAM y otras instituciones pusieron
en marcha el Programa Adopte un Talento
(PAUTA), patrocinado por
En teoría, todos los niños y adolescentes mexicanos que hoy están en
primaria podrán cursar estudios superiores dentro de algunos años. Sin embargo,
en la práctica, un buen porcentaje de ellos verá cancelada, por muchos motivos,
la oportunidad de conocer y desarrollar sus capacidades.
Datos de la Secretaría de Educación Pública, contenidos en la Estadística básica del sistema educativo
nacional, fin de cursos 2005-2006, señalan que en el ámbito nacional se
inscribieron en educación básica en ese periodo 25 millones 791 mil 101
estudiantes, de los cuales un millón 183 mil 347 desertaron.
Ante esta inequidad, el Programa aspira a abrir una ventana de oportunidades
para la niñez y la juventud mexicanas.
Desde septiembre pasado, PAUTA empezó a laborar en varias escuelas
primarias públicas de la Ciudad de México con 60 maestros y mil 500 niños.
En este año, PAUTA comenzará a trabajar directamente con menores en el
salón Huevo del dinosaurio, ubicado
en la explanada de Universum. Un año
es el tiempo calculado para identificar a niños y adolescentes, de escuelas
públicas y privadas, con aptitudes para el trabajo científico.
“PAUTA pretende fomentar el desarrollo del talento científico en niños
y adolescentes de educación básica, y brindarles apoyo y seguimiento académico
y logístico a lo largo de su vida escolar, desde la primaria hasta la
universidad”, señaló el doctor Alejandro Frank, director del Instituto de
Ciencias Nucleares, quien –junto con Jorge G. Hirsch y Julia Tagüeña–, encabezan
el programa.
Estrategia de identificación
Además de propiciar condiciones favorables para el desarrollo de
habilidades y actitudes relacionadas con el quehacer científico, PAUTA ofrece
la motivación, las herramientas y los apoyos necesarios.
La estrategia de identificación de talento es mediante talleres de
matemáticas y ciencias, sustentados en métodos de aprendizaje como el
planteamiento de retos y problemas, y el desarrollo de proyectos y experimentos
científicos.
“No se trata de exámenes para detectar ‘genios’, sino de cursos de uno
o más años, en los que maestros y un equipo de pedagogos identificarán a
quienes tengan talento para las ciencias”, aclaró Frank.
Se busca que sean talleres de reflexión y creatividad en los que se
fomente el desarrollo de habilidades y se promuevan actividades relacionadas
con el quehacer científico, con ejercicios prácticos y discusión en grupo, como
si fueran un pequeño congreso, con una metodología horizontal para que, por
medio de modernas técnicas educativas, los participantes descubran lo divertido
e interesante que es la ciencia.
Con metodologías diversas
PAUTA pretende ser un programa con metodologías diversas, pues toma en
cuenta que un niño de la ciudad no es igual al que vive en una zona rural. Además,
existen diferencias de género e incluso lingüísticas, como en el caso de las
múltiples comunidades indígenas.
De ahí que un equipo de pedagogos, en colaboración con maestros de
primaria, elabore y ponga a prueba distintas herramientas de enseñanza y de
evaluación.
“También se trabaja en el sustento teórico y pedagógico –indicó el
investigador–, con base en el análisis de las cualidades que habrán de
identificarse en los niños y adolescentes talentosos.”
Clubes de ciencia
En Michoacán y Chiapas hay sendos grupos que desde hace 10 años manejan
conceptos científicos con niños de zonas indígenas y que hoy se han incorporado
a este Programa, enriqueciendo sus métodos de enseñanza.
Hasta ahora son cerca de tres mil los menores que participan en
talleres de ciencia abiertos en escuelas chiapanecas, michoacanas y capitalinas.
“Una manera de expandir la acción de este PAUTA es que, además de
trabajar con maestros y alumnos en clase, se creen clubes de ciencia en
espacios públicos que permitirían ponernos en contacto directo con niños y
jóvenes interesados”, comentó Frank.
Responsabilidad social
El objetivo final del Programa Adopte un Talento es que niños y
adolescentes mexicanos con talento científico puedan alcanzar, vía información,
tutorías o becas, los estudios universitarios y, posteriormente, hacer
aportaciones a la cultura del país.
Una vez identificados estos menores, PAUTA los “adoptará”, o mejor
dicho, convocará a la sociedad a “adoptarlos”.
“Tenemos el propósito de organizarnos –explicó Frank– para que
ciudadanos y fundaciones filantrópicas, con el apoyo de universidades e
instituciones tales como los consejos de Ciencia y Tecnología de los estados,
aporten los recursos necesarios para lograr dicho objetivo”.
Por lo que se refiere al área de la investigación en México, el Conacyt
pone a concurso fondos del Estado entre los investigadores. PAUTA busca
profesionalizar la procuración de recursos, invitando a ciudadanos y
fundaciones a adoptar talentos que habrán de rendir frutos en el futuro.
“Debe propiciarse en el país una cultura de responsabilidad social que
induzca a retribuir a la sociedad parte de lo que ésta da. Se podrían
establecer esquemas, por ejemplo, para facilitar que las aportaciones fueran deducibles
de impuestos”, apuntó el investigador.
Soporte educativo
La labor de PAUTA se concibe como un soporte educativo, un aporte
social y, también, como una campaña para sentar las bases de una cultura
científica desde la educación básica, en pro del desarrollo de México.
“Un modelo como éste –sostuvo Frank–
contribuye también a caminar hacia la democracia, ya que es imprescindible dar
oportunidad a los jóvenes que hoy no
-oOo-
Alejandro Frank,
director del Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM, encabeza el Programa
Adopte un Talento, destinado a detectar talentos entre niños y adolescentes de
educación básica.
FOTO 2.
El programa
PAUTA, con la participación de la UNAM, aspira a abrir una ventana de
oportunidades para la niñez y la juventud mexicanas, con el fin de que se
involucren en la ciencia.
FOTO 3
El programa
PAUTA, diseñado por investigadores de la UNAM, fomenta el desarrollo de
habilidades y aptitudes, relacionadas con el quehacer científico entre niños y
adolescentes de educación básica.