Boletín
UNAM-DGCS-073
Ciudad Universitaria
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VULNERABLE, EL
NOPAL MEXICANO ANTE
El nopal, uno de los
principales alimentos en el país por su importancia nutricional y utilización
como materia prima para obtener diferentes productos, podría estar en serio
peligro ante la diseminación de la palomilla o Cactoblastis cactorum en tierras continentales mexicanas.
María del Carmen Mandujano Sánchez, del Instituto de Ecología de la UNAM,
explicó que en el corto plazo si esta plaga se propaga en el territorio –ya se
tiene registro de su presencia en Quintana Roo– y “no
se aplican buenas medidas de control y prevención, puede ocasionar una
catástrofe económica y biológica”.
Ante ese posible
escenario, subrayó, las poblaciones de esta cactácea podrían reducirse, lo que
generaría impactos en los ecosistemas mexicanos, además de incuantificables
pérdidas para los grandes y pequeños productores, que dependen de esta especie.
Cuando Cactoblastis cactorum
llega a la planta, explicó Mandujano, consume todos
sus tallos nuevos, sigue con los viejos, las frutas e inhibe
La palomilla del nopal,
que apareció a finales de los años 80, es un importante depredador, utilizado
como control de las plagas en Australia y África; pero por diversas razones
llegó a las islas del Caribe y de ahí a La Florida, dijo, aunque no se sabe con
certeza si por dispersión natural a través de huracanes o por tráfico y venta
de especies.
Ante esta situación, se
informó de su posible llegada al territorio, que sería gravísimo. Se logró que
la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación
(SAGARPA) apoyara una campaña de difusión. Pero ha sido difícil, sostuvo,
porque la investigación agroforestal destina recursos contra plagas conocidas.
Además, “no hay una
cultura de prevención y el Cactoblastis cactorum está ya en México. Afortunadamente
todavía no se tiene un brote en tierras continentales nacionales, porque la
plaga sólo se ha registrado en las islas Mujeres y Contoy,
Quintana Roo. Pero en cualquier momento podría extenderse al país”, alertó.
En ese sentido, la
responsable de la Cátedra de Ciencia y Tecnología de Alimentos de la Facultad
de Estudios Superiores (FES) Cuautitlán,
Durante 2006, México
registró una producción de 546 mil 476 toneladas de nopales comestibles, 117
mil 812 de nopal forrajero y 366 mil 527 de tunas, y se contabilizó una
superficie sembrada de ocho mil
Figueroa destacó que es
tal la importancia de esta planta, que de acuerdo con diversos investigadores,
existen alrededor de 377 especies en el planeta y, de ellas, 104 se localizan en
el territorio mexicano.
Además, detalló, en los
últimos años a esta cactácea se le han encontrado aplicaciones en diversos
sectores, como en la medicina naturista, el sector forrajero y las industrias cosmética y alimentaria.
Su fibra puede ser un auxiliar contra los trastornos digestivos porque baja
los niveles de lipoproteínas de baja densidad.
Tiene amplias
posibilidades de uso, pero se deteriora de manera rápida. Por ello, en
Una fruta o verdura
disminuye en calidad cuando pierde 10 por ciento de su peso, porque ya no es costeable la venta, indicó. Así, sin envasar y a
temperatura ambiente, el nopal desperdicia una décima parte de su peso, aún con
sus espinas, en un máximo de 24 horas.
De esa forma, subrayó que
gracias a la aplicación de una capa de polietileno se han obtenido excelentes
resultados, pues se han logrado preservar el producto de uno hasta seis días y
hasta los 22 en refrigeración.
Sin embargo, abundó, faltan concluir los estudios con otras especies para ver más
opciones. “La idea es tener el control de una unidad para extrapolar y
envasarla en mayor cantidad para determinar su comportamiento”.
Una de las principales
causas de que disminuya la calidad es el desespinado.
Por ello, en esa entidad se estudian alternativas para retirarle las espinas, a
fin de aumentar la duración y envasarlo,
comentó. Es necesario probar el uso de antioxidantes, porque esta práctica
causa daños a la epidermis.
Se pretende aprovechar
íntegramente la planta, tanto el nopal como los frutos. Se desarrollan
alternativas con tunas, pues México es el productor número uno en el mundo,
aunque no el principal exportador. A pesar de que países como Italia, Chile y
Sudáfrica generan menos toneladas y no tienen la variedad del territorio,
venden más, advirtió.
En el 2000, el país
concentró 80 por ciento de la producción mundial de tuna; mientras Italia tenía
12 por ciento, Sudáfrica, 3.6 y Chile, 2 por ciento. Sin embargo, ese mismo año
México vendió al exterior sólo 2 mil 100 toneladas, por 15 mil de Italia, 250
de Sudáfrica, 100 de EU, y 40 de Chile.
El
Sistema de Información Comercial Mexicano de la Secretaría de Economía resalta
que entre enero-junio de 1998 y 2001 los mexicanos exportaron tres mil 374 toneladas
de tuna, siendo el principal mercado Estados Unidos (39.5 por ciento), seguido
de Bélgica (26.9), España (8.6), Alemania (7.8) y Holanda (5.3 por ciento),
entre otros.
Por su fácil adaptación, cada día son más las naciones que la cultivan,
y sobresalen, además de México: Chile, Argentina, Bolivia, Perú, Colombia,
Estados Unidos, Sudáfrica, Marruecos, Argelia, Túnez, Egipto, Jordania,
Pakistán, Israel, Grecia, Italia, España y Portugal. Sin embargo, sólo unos
cuantos: México, Italia, Sudáfrica, Chile, Israel y
Por otro lado, especificó
Figueroa, se ha desarrollado la extracción pectina de la cáscara para hacer un
aprovechamiento integral, así como del xoconoztle, el
fruto ácido del nopal, con posibilidades de utilizarlo en el área medicinal.
De acuerdo con el
Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera de la SAGARPA, en 2006 el
Distrito Federal fue el principal productor de nopales, con 283 mil 881
toneladas; seguido por Morelos (237 mil 531), Puebla (siete mil 565), San Luis
Potosí (mil 102), Hidalgo (326) y Michoacán (290), entre otros.
Ante este panorama, la
producción de nopal en el territorio tiene amplias perspectivas de crecimiento,
reconoció. Si se le da un fuerte apoyo sería una de las fuentes de importante
ingreso económico, generadora de fuentes de trabajo; además de sus cualidades
medicinales, farmacéuticas, forrajeras y demás.
Al respecto, Mandujano recalcó que es uno de los recursos más
importantes del país, pero es necesario valorarlo y apreciarlo. De hecho, es
indispensable un programa nacional para protegerlo e investigar más sus diferentes
aspectos.
De concretarse podría
impulsarse los estudios de preservación del nopal silvestre y mejorar los
cultivados, para crear una plataforma de exportación, tanto en fruta como en
conserva. Con ello, México contaría con una excelente fuente de ingresos para
los productores, concluyó.
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FOTO 01
La investigadora de la UNAM, María del Carmen Mandujano advirtió que las poblaciones de nopal
podrían reducirse y generar impactos en los ecosistemas si se extiende en
México la palomilla de esa cactácea.
Durante 2006, México registró una
producción de 546 mil 476 toneladas de nopales comestibles, 117 mil 812 de
nopal forrajero y 366 mil 527 de tunas, informaron especialistas de la UNAM.
FOTO 03
El nopal podría estar en serio
peligro ante la diseminación de la palomilla o Cactoblastis
cactorum en tierras continentales mexicanas,
advirtieron investigadores de la UNAM.
FOTO 04
María del Carmen Mandujano Sánchez, del
Instituto de Ecología de la UNAM,
señaló que cuando el Cactoblastis cactorum
llega al nopal, consume los tallos, las frutas e inhibe su producción.