14:00  hrs. 10 de Enero de 2008

  

Boletín UNAM-DGCS-019

Ciudad Universitaria

 


Gerardo Ceballos

Pie de foto al final del boletín

 

PREMIAN A CIENTÍFICO DE LA UNAM POR SU LABOR EN LA CONSERVACIÓN DE ESPECIES Y ECOSISTEMAS

 

·        Gerardo Ceballos, del Instituto de Ecología, ganó el Premio a la Investigación Científica en Conservación Biológica

·        Una de sus principales líneas ha sido el estudio y la generación de propuestas para preservar al bisonte, puerco espín y jaguar

·        Es el galardón más importante que una empresa privada concede a la comunidad científica en México

 

Gerardo Ceballos, del Instituto de Ecología de la UNAM, ganó el Premio a la Investigación Científica en Conservación Biológica que otorga el Programa Volkswagen Por amor al planeta, por la relevancia de su trabajo para la conservación de especies y ecosistemas.

 

El galardón se entrega por segunda ocasión y consta de un estímulo económico y es el más importante que una empresa privada concede a la comunidad científica en México.

 

Ceballos se ha caracterizado por aplicar la ciencia básica en diferentes áreas ecológicas. Una de sus principales líneas ha sido el estudio y la generación de propuestas para preservar las especies en riesgo de extinción como el bisonte, el puerco espín y el jaguar.

 

El investigador ha instrumentado un programa piloto para el aprovechamiento sustentable del borrego cimarrón a cargo de los indios seris que habitan en el norte de la República. Al iniciarlo había menos de mil 100 de esos animales; ahora hay más de 11 mil que generan una gran derrama económica para el país.

 

Su labor ha servido también para que se elaborara la primera Norma Oficial Mexicana de especies en peligro de extinción. Hasta hoy se tienen más de 4 mil catalogadas, que cuentan con la protección necesaria.

 

Además, ha incursionado en el diseño de áreas naturales protegidas, para evaluar qué tan bien están representadas las variedades de mamíferos en ellas. A raíz de ello, propuso en 1989 crear la reserva de la biosfera Chamela-Cuixmala, la cual fue decretada como tal en 1993.

 

Ese sitio, explicó, es uno de los de mayor concentración de especies endémicas del mundo; de vertebrados, por ejemplo, hay más de 45 linajes, como el monstruo de gila, el zorrillo pigmeo y el perico guayabero, entre otras.

 

También Ceballos propuso que declarasen las Ciénegas de Lerma, Estado de México, como zona de protección de fauna y flora, porque ahí también hay variedades únicas en riesgo, como las aves mascarita transvolcánica y la polla amarilla, así como el ajolote, por mencionar algunas.

 

En la actualidad afina la iniciativa para crear la reserva de la biosfera de Janos, Chihuahua, con la que se salvaguardarán medio millón de hectáreas de importancia extrema, pues cuenta con osos negros, la única población de bisonte silvestre de la nación, y las colonias más grandes del mundo de perros de las praderas, entre muchos otros especímenes.

 

Ha analizado la compatibilidad de usos de suelo con la conservación para entender cuáles son los efectos negativos de la agricultura y de la ganadería, a fin de revertir los daños al medio ambiente. Se ha encontrado que pueden usarse cultivos intensivos que produzcan recursos a las comunidades locales para restaurar el hábitat.

Otro aspecto de la investigación está enfocado a los proyectos turísticos de las zonas costeras de Jalisco, para tratar de minimizar impactos ecológicos en esas áreas. “Los dueños de la tierra –consideró– tienen derecho a desarrollarla pero también deben cumplir con ciertas obligaciones”.

 

La mejor contribución ha sido tratar de determinar científicamente cuánto se puede construir sin destruir el medio ambiente, precisó.

 

Una línea de investigación más ha sido formar una base de datos de la distribución de todos los mamíferos del mundo, para saber qué porcentaje de tierra habría que conservar para mantener a todos los ejemplares. Es un trabajo pionero. “Hay cinco mil especies y –dijo– se encontró que se requiere el 11 por ciento de la superficie terrestre para preservarlas”.

 

Con las áreas fuera de reserva, detalló, debieron administrarse de mejor manera para que puedan ser útiles y cuidar la biodiversidad existente.

 

La labor de Ceballos, además, ha incluido más de 200 artículos y 25 libros, muchos de ellos referidos a la conservación: Los animales de México en peligro de extinción, Las aves de México en peligro de extinción, o Los mamíferos silvestres de México, en donde compila la biología de las 530 especies del país; éste, aseguró, es el primer texto de esta naturaleza en el país.

 

Acerca del Premio, destacó que es un reconocimiento a su trabajo y a su grupo respecto al esfuerzo realizado en los últimos 15 años, para salvar a los animales en peligro de extinción; también honra a la Universidad Nacional y a la educación pública, y recalca que los temas ambientales son relevantes a nivel nacional e internacional.

 

Empero, no hay manera de resolver los graves problemas ambientales, sociales, políticos y económicos si no es con una ciencia sólida de grandes inversiones en este ámbito y en el de la tecnología, concluyó.

 

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FOTO 1.

La labor del investigador de la UNAM Gerardo Ceballos ha servido para elaborar la primera Norma Oficial Mexicana de especies en peligro de extinción. Hoy se tienen más de cuatro mil catalogadas.