Boletín
UNAM-DGCS-683
Ciudad Universitaria
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GENERAN EN
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Se trata de ModusXXI, herramienta de apoyo
para las clases de adiestramiento auditivo y solfeo, la cual abre paso en
México a la inteligencia musical artificial
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Con ella su autor, Alfonso Meave –profesor
de
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Esta relevante innovación será presentada
en
Académicos de
Esta relevante innovación –que abre paso en
México a la inteligencia musical artificial, al lograr que una computadora
cree, a partir de ahora, material monódico basado en una atonalidad
interválica– será presentada en
Alfonso Meave, profesor de
Con su trabajo, Creación de una aplicación de cómputo
generadora de melodías atonales siguiendo
El universitario aclaró
que ya se realizan los trámites de registro de ModusXXI ante INDAUTOR para editar y distribuir
Al respecto explicó que
una melodía de ese tipo, como lo dice su nombre, no cuenta con un centro tonal.
"Se puede hacer la analogía entre un sistema tonal y uno planetario, donde
En contraste, dijo, en un modelo atonal no existe ese sonido central
específico, con otros relacionados jerárquicamente a él. En la música atonal
las aplicaciones tonales son sustituidas, entre otros recursos, por las
funciones o interrelaciones interválicas.
A su vez, un intervalo hace referencia a la diferencia de
"altura" o frecuencia entre dos sonidos. "Se puede crear música
relacionando este tipo de unidades, la segunda mayor, segunda menor, cuarta
justa, quinta justa, y el resultado estético es distinto al tonal”.
Recordó que la mayoría de lo escuchado, clásico y comercial, está
compuesto dentro del sistema tonal. La atonalidad se creó a principios del
siglo XX y tuvo su auge con compositores como Arnold
Schönberg, Alban Berg y Anton Weber. Este movimiento estético pretendió
acabar con el “reinado” de la tonalidad, buscando que ningún sonido tuviera
jerarquía sobre el resto.
Esto se relacionó con movimientos políticos y sociales. Cuando el
socialismo crecía, también se impulsó la idea de dar un valor igual a todos los
sonidos, una nueva música donde no importa cuál es el sonido principal, sino
las distancias entre ellos. Hoy este tipo de obras están casi en el olvido,
incluso en las escuelas profesionales, agregó.
ModusXXI genera melodías
atonales siguiendo
Así, el programa de cómputo desarrollado en
Tiene un algoritmo que produce aleatóriamente una sucesión de números
correspondientes a valores interválicos y rítmicos; por eso, es capaz de crear
música de modo ilimitado. "Desde el punto de vista didáctico permite al
estudiante hacer tantas melodías como necesite", dijo.
Esta generación se hace de acuerdo con los parámetros determinados por
el usuario y la metodología de Modus
Novus. "Por ejemplo, se establece el compás (unidad de medida) que se
desee (2/4, 4/4 y demás); luego se selecciona un capítulo de ese libro, por
ejemplo el primero, donde se aborda los intervalos segunda menor, la segunda
mayor y la cuarta justa", indicó el maestro en Tecnología Musical.
También se seleccionan algunas figuras rítmicas, como los cuartos y
octavos, y el tempo, es decir,
Alfonso Meave y su tutor, Felipe Ordoña Bustamante, del
Centro de Ciencias Aplicadas y Desarrollo Tecnológico, trabajan en un proyecto
de doctorado para diseñar una aplicación similar, pero ahora polifónica y en
estilos específicos, como el contrapunto del teórico y compositor J. J. Fux
(1660-1741). "Ello requiere un nivel de programación más avanzado. Somos
pioneros en la materia en México", finalizó.
—o0o—
FOTO 01.
Alfonso Meave, profesor
de
FOTO 02
Alfonso Meave es el
primer egresado del Posgrado en Música de