Boletín
UNAM-DGCS-572
Ciudad
Universitaria
|
|
|
|
Pie de fotos al
final del boletín
SE ESTABLECEN NORMAS MÁS RIGUROSAS PARA
- Afirmó Jorge Ernesto Alonso, profesor de la Facultad de
Arquitectura de la UNAM
- Los peritos son los responsables de obra y están obligados a
incrementar los coeficientes de seguridad; se ha redefinido la
zonificación del suelo del Valle de México, dijo
- Informó que con el Reglamento de Protección Civil se transforman
elementos de habitabilidad y funcionamiento, así como de garantía en las
construcciones
Debido a las graves repercusiones por eventos inesperados, como los
sismos de gran magnitud, en el Reglamento de Protección Civil se han
establecido normas más rigurosas para la operación y mantenimiento de las
construcciones, aseguró Jorge Ernesto Alonso, profesor de la Facultad de
Arquitectura (FA) de la UNAM.
El profesor de la FA indicó en entrevista que los antes llamados
peritos ahora son los responsables de obra y están obligados a incrementar los
coeficientes de seguridad. Además, se ha definido de mejor manera la
zonificación del suelo del Valle de México con estudios más profundos.
La nueva disposición estipula “que debe haber una distancia máxima de
Con ello se transforman una serie de elementos que dan habitabilidad y funcionamiento, pero sobre todo la garantía debida a las construcciones. Así, detalló, para que una obra funcione debe existir un dictamen vinculado con este Reglamento, que han denominado como el “visto bueno de seguridad y operación”.
Ello tiene que ser elaborado por un profesional con conocimientos
acerca de los riesgos que se pueden presentar, además de los espacios de
iluminación y ventilación, entre otros, apuntó.
Es indispensable, insistió, que en cuanto la estructura entre en
operación y tenga vida activa, posea las condiciones suficientes de seguridad,
lo que implica el trabajo y mantenimiento de Protección Civil.
Con respecto a los simulacros señaló la necesidad de llevarlos a cabo,
pues es una forma de prepararse ante acontecimientos de emergencia, en donde se
pone a prueba el entrenamiento previo; de no realizarlos, la sociedad civil no
sabría cómo reaccionar.
Explicó que existen lineamientos llamados Manuales Internos de
Protección Civil, los cuales definen qué hacer en caso de un fenómeno
meteorológico, un incendio o sismo, e información acerca de cómo desalojar los
edificios y en dónde establecer las zonas de seguridad, es decir, se hace un
estudio completo de la construcción a fin de garantizar la vida de los usuarios
y la salvaguarda de sus bienes.
Por otra parte, mencionó que la Ingeniería en México y que repercute en
la Arquitectura, es de las mejores del mundo; tan es así que la Ingeniería de
suelos llega a competir con países de primer mundo. En este sentido, existe la
capacidad de elaborar todo tipo de estructuras siempre y cuando el proyecto se
apegue a las normas establecidas en el Reglamento de Protección Civil.
Por otra parte, aseguró que aún con la existencia de esta disposición, hay quienes no lo acatan. Ante ello, el director responsable de obra es quien se compromete a que la construcción sea óptima, por ello se han modificado los códigos Civil y Penal, que establecen que durante diez años a partir de concluida la edificación, este personaje se hace garante de la estructura.
Concluyó
que la Comisión encargada de regular las construcciones y que modificó esta
normatividad, está conformada por profesionales de la Ingeniería y de la
Arquitectura, y por funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Urbano y
Vivienda y la Secretaría de Obras del Gobierno del Distrito Federal.
—o0o—
FOTO 01.
Jorge Ernesto
Alonso, profesor de la FA de la UNAM, dijo que en el Reglamento de Protección
Civil se han establecido normas más rigurosas para la operación y mantenimiento
de las construcciones.
FOTO 02
Es necesario
llevar a cabo simulacros, pues es una forma de prepararse ante acontecimientos
de emergencia, afirmó el profesor de