Boletín
UNAM-DGCS-483
Ciudad Universitaria
José Franco |
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final del boletín
CONSTITUYEN
INICIATIVAS INTERNACIONALES MARCO ADECUADO PARA EL DESARROLLO CIENTÍFICO EN EL
MUNDO
Durante la inauguración del Coloquio Origen y
Estructura del Sistema Solar –organizado por los institutos de Astronomía, Geofísica
(IGF) y Geología (IGL) de esta casa de estudios– el funcionario señaló que ante
dicho panorama se espera “que el reconocimiento de los organismos
internacionales a la ciencia se trasmine a los estratos de los gobiernos
Federal y locales”.
Esta actividad, que tendrá lugar hasta el 9
de agosto, forma parte de la celebración del Año Heliofísico Internacional. Con
ello se promueve la comunicación entre los diversos grupos especializados
dedicados al estudio del Sistema Solar y
En el auditorio Paris Pishmish de la propia
entidad, expuso que hay trabajo en diferentes instancias de
Por ello, apuntó, éste debería ser el primero
de muchos encuentros en donde poco a poco se vayan uniendo el resto de los
institutos. Así, el Coloquio, propuso, podría realizarse bianualmente.
Asimismo,
En su oportunidad, Gustavo Tolson, titular
del IGL, resaltó la importancia de la interacción formal entre los grupos que
estudian el Sistema Solar, lo cual realizan gracias a observaciones
astronómicas basadas en mediciones de radiaciones, y geológicas, mediante
texturas en rocas que han caído desde el espacio exterior, con ayuda de
herramientas como la geoquímica isotópica y de observaciones de naturaleza
geológica, como el análisis de cráteres.
Por último,
Su realización significa un avance y así como
ya hay astrónomos que han entrado a la geología y geofísica, se espera que haya
más geólogos y geofísicos interesados en aspectos astronómicos, aclaró.
En
Ahí detalló que sale continuamente de esta
estrella. Se trata de un plasma supersónico formado de protones y neutrones, y
algunos elementos pesados, el cual viaja por el Sistema Solar. Cuando encuentra
planetas, la mayoría con campo magnético –con excepción de Venus y Marte–, se
forma una magnetosfera, cavidad que protege a los “mundos” de la llegada
directa de esas ráfagas.
Al tratar el análisis de la región de
interacción mediante simulaciones híbridas globales, explicó que en tales
modelos los iones se toman como partículas y los electrones como fluido.
En
Entre las preguntas más importantes se
encuentra si su comportamiento es cuasiperiódico o estocástico; de ser este
último no podría predecirse, sostuvo el experto.
Manifestó que se ha establecido de forma
común un ciclo solar de 11 años. Otro indicativo de su actividad son las manchas
solares, observadas desde el año 200 antes de nuestra era, tiempo en el cual se
ha apreciado que la actividad del Sol es estocástica.
Entre 1645 y 1715 no hubo manchas, sobre lo
cual no hay teoría que explique ese fenómeno. Alrededor de 1800 hubo otra
disminución. Al no haber una periodicidad exacta hay un problema para
determinar si es posible vaticinar su actividad o no, concluyó.
A la inauguración del acto asistieron los
organizadores del Coloquio,
—o0o—
FOTO 1
.
Daniel Flores,
Gustavo Tolson, José Luis Valdés,
FOTO 2
Xóchitl Blanco,
del IGF de
FOTO 3
El investigador
de