12:00 hrs. 8 de Julio de 2007

  

Boletín UNAM-DGCS-418

Ciudad Universitaria

 

 


Alejandro Pisanty

 Pie de fotos al final del boletín

 

DESIGNAN A LA UNAM COMO LA SEGUNDA ORGANIZACIÓN MÁS INNOVADORA DEL SECTOR PÚBLICO EN MÉXICO

 

·       La revista InformationWeek México, una de las más reconocidas en el desarrollo de las tecnologías de la información, dio a conocer esta clasificación

·       Se le distinguió por el proyecto de implementación de la firma electrónica avanzada

·       El trabajo hecho en la Universidad Nacional es competitivo y comparable con el del resto de la industria, destacó Alejandro Pisanty Baruch, titular de la DGSCA

·       Juan Votssás, de la misma entidad, explicó que se trata de un certificado o archivo digital, cifrado, portátil y tiene algoritmos matemáticos complejos

 

La UNAM –a través de la Dirección General de Servicios de Cómputo Académico (DGSCA), y con el apoyo de diversas entidades universitarias– fue considerada por la revista InformationWeek México como la segunda organización mexicana más innovadora en tecnologías de la información del sector público, por el proyecto de implementación de firma electrónica en las actas de calificaciones.

 

Dicha distinción fue dada a conocer por la publicación junto con la clasificación que emite desde hace siete años, sobre las 50 empresas más destacadas en este campo.

 

En esta edición decidió hacer –por primera vez– un listado con las 15 instancias del sector público más sobresalientes por el uso de la tecnología de la información, y la Universidad Nacional “fue distinguida como la segunda, lo cual es algo gratificante porque habla de que el nivel de actualidad, relevancia, alcance y solidez del trabajo hecho es totalmente competitivo y comparable con el del resto de la industria”, destacó Alejandro Pisanty Baruch, titular de la DGSCA.

 

Asimismo, acotó, es una muestra de que se sirve a esta casa de estudios y a la comunidad universitaria con tecnología de punta, y le  dice a la sociedad que parte del presupuesto asignado se emplea en la modernización de la UNAM.

 

También reconoce la labor de jóvenes universitarios, muchos de ellos en proceso de formación, pero que tienen la oportunidad de intervenir en proyectos de punta, lo cual, en un futuro, adelantó, les permitirá incorporarse con éxito al mercado laboral.

 

Indicó que de acuerdo con esa revista el único sector arriba de DGSCA es un proyecto de recuperación de cartera vencida del INFONAVIT, “que involucra el patrimonio de miles de familias”.

 

InformationWeek, puntualizó, es una de las publicaciones más reconocidas en México acerca de la industria y el desarrollo de las tecnologías de la información, orientada al sector privado principalmente, que observa los proyectos del sector público en términos de adquisiciones, de su alcance o cuando tienen aspectos realmente destacados.

 

En relación con la lista que aparece, precisó que la edición no emite su juicio por sí misma, sino que encarga este trabajo a la empresa de consultoría Ernst & Young y, basándose en sus investigaciones, se toma  la decisión de otorgar dicho reconocimiento.

 

Mencionó que el proyecto de la firma electrónica no hubiera sido posible sin la colaboración de otras dependencias universitarias.

 

Si bien ya se trabajaba en este sentido desde 2004, fue en noviembre de 2005 cuando se emitieron las primeras actas con el uso de dicha tecnología. Hoy casi la totalidad de los asientos de calificaciones anuales, semestrales o de exámenes ordinarios y extraordinarios, de bachillerato, licenciatura y posgrado son susceptibles de llevar esta rúbrica, aseveró.

 

Ello, subrayó, también cubre las sedes foráneas, porque los profesores pueden evaluar e ingresar sus notas en cualquier momento, independientemente del lugar en donde estén.

 

Al respecto, Juan Votssás, director de Sistemas de la DGSCA, explicó que la firma no sólo consiste en un login y un password. Se trata de un certificado o archivo digital, el cual está cifrado, es portátil y tiene una serie de algoritmos matemáticos complejos para que no pueda ser fácilmente deducido, interceptado, alterado, sustituido o suplantado.

 

Éste es individual y se le da a cada profesor, quien para calificar debe ingresar a un programa desde cualquier computadora y, al final incorporar su certificado con una contraseña. En ese momento, las evaluaciones quedan integradas con una numeración digital, la cual es única por cada profesor y evento, aclaró.

 

Con esto, no sólo se modificó el proceso, sino que con la Dirección General de Administración Escolar se modeló todo el procedimiento desde que el profesor llena el acta hasta cuando las calificaciones quedan archivadas de manera definitiva para el alumno, enfatizó Alejandro Pisanty.

 

Por este medio, señaló, no sólo los profesores se ven beneficiados sino también los estudiantes, pues ellos también acceden a sus registros vía Internet, casi inmediatamente después de que sus maestros las anotan.

 

Otra ventaja es la cantidad de papel que se puede ahorrar, pues se han dejado de imprimir miles de folios, con sus respectivas copias, y es también un beneficio ecológico, sentenció.

 

Esta tecnología, aseveró, fue diseñada con base en estándares internacionales. De hecho, hay un consenso mundial en reconocer que implantar un proyecto de firma electrónica avanzada es un desafío mayor, aseveró.

 

Gracias a este proyecto, se logró articular diversas áreas de la DGSCA tanto en su interior como con otras instancias universitarias; asimismo, se contó con el apoyo de expertos externos, concluyó.

 

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FOTO 01

 

Alejandro Pisanty, titular de la DGSCA, dijo que la clasificación de la UNAM dentro del ranking de la revista InformationWeek México, habla de la calidad del trabajo realizado en la Universidad

 

 

FOTO 02.

 

Alejandro Pisanty y Juan Votssás hablaron sobre la posición de la UNAM como la segunda organización mexicana más innovadora en tecnologías de la información del sector público.

 

 

FOTO 03

 

Juan Votssás, de la DGSCA de la UNAM, se refirió al proyecto de implementación de firma electrónica en las actas de calificaciones, que mereció la distinción de la revista InformationWeek México.