Boletín
UNAM-DGCS-316
Pie de
fotos al final del boletín
NECESARIO, QUE
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El rector dijo que para eso la institución debe incursionar en una
dinámica científico–financiera que permita la incubación de empresas de base
científica y tecnológica
·
Así, los productos llegarían a sus últimas conclusiones y la Universidad
se transformaría en fuente de ingresos adicionales, señaló
·
Inauguró las nuevas instalaciones de clase mundial del Instituto de
Investigaciones Biomédicas
Al inaugurar las nuevas instalaciones del Instituto de Investigaciones
Biomédicas (IIBm), el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, señaló que la
Universidad debe incursionar en una dinámica científico–financiera que permita
la incubación de empresas de base científica y tecnológica. Así, se convertirá
en una instancia asociada a la industria para que los productos lleguen a sus
últimas conclusiones, al tiempo de transformarse en una fuente de ingresos
adicionales para ella misma.
En estos novedosos laboratorios, de clase mundial, donde se lleva a
cabo investigación básica y aplicada, precisó, se ha creado un buen número de
productos, por lo que acciones de esta índole mostrarán de manera más clara
cómo la investigación apoya al desarrollo del país y permite incursionar en la
nueva economía de la sociedad del conocimiento, donde el sustrato fundamental
proviene de la investigación y de la innovación.
Ahora, puntualizó, se requiere avanzar más para que los trabajos que ya
tienen posibilidades, como son algunas vacunas contra el cisticerco, un
antiepiléptico y desarrollos de biofermentación, puedan convertirse en elementos
de empresa de base tecnológica.
El reto en la sociedad del conocimiento, recalcó, es incorporar a estos
últimos en el aparato productivo. El impacto industrial a mediano y largo
plazos, añadió, puede ser determinante para una serie de empresas que en el
país se necesita mantener y colocar en los mercados mundiales.
De la Fuente realizó un recorrido por las nuevas instalaciones,
integradas por un conjunto de tres edificios: A–2, B–1 y de Apoyo Académico,
acompañado por René Drucker, coordinador de
Ahí, el rector ejemplificó con el proceso de biofermentación, que ayuda
a los industriales del tequila en México para tener productos más puros y
obtener el mayor provecho del agave.
Se trata, dijo, de productos que sólo podrán competir en la medida en
que tengan el agregado científico y tecnológico. Esa es la clave en la economía
del conocimiento, destacó, determinar la forma de agregarle a los productos y
servicios un componente científico y tecnológico para que sean más rentables,
provechosos y que no se limiten a los mercados nacionales, sino que incursionen
en los mundiales con diversos artículos, como el tequila.
En el caso de las vacunas, abundó, hay posibilidades reales en el
mediano plazo de que tanto la inmunización contra el cisticerco como el nuevo
antiepiléptico se ubiquen en los mercados internacionales.
Señaló que hay diversas firmas que contribuyen al financiamiento. El
siguiente paso con los inversionistas mexicanos y algunos extranjeros, detalló,
es crear una nueva asociación, que en realidad se avance en la incubación de
empresas de base tecnológica, no sólo se trata de transferir el desarrollo.
El rector de la UNAM explicó que la institución deberá tener
Por ello, resaltó, laboratorios como los del IIBm son importantes,
porque cumplen con todos los estándares internacionales, que son exigentes,
para que la investigación tenga la clasificación de clase mundial. De lo contrario,
no se puede competir.
Biomédicas muestra que tiene toda la capacidad para cumplir con los
requerimientos internacionales y entrar de lleno en la punta de lanza de la
investigación en las áreas que se puede contender, agregó.
Aunado a ello, De la Fuente consideró fundamental que estas
alternativas permitan contribuir en la recuperación de recursos humanos que se
van del país, sobre todo a Estados Unidos.
El Instituto cuenta
con un conjunto de cinco edificios principales y seis complementarios; además
de diversas obras exteriores.
El
corazón de este conjunto está conformado por cuatro inmuebles destinados a
laboratorios de investigación y otro al apoyo académico.
Las
edificaciones inauguradas en esta ocasión son las correspondientes a las dos
primeras etapas, y queda pendiente una tercera. En la primera fase se construyó
el edificio A-2 de laboratorios, la casa de máquinas que permite su
funcionamiento, la subestación eléctrica principal y una parte importante de
las áreas exteriores.
La
segunda incluyó los edificios de laboratorios B-1 y el de Servicios de apoyo
académico, otra parte de las áreas exteriores y los estacionamientos.
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FOTO 01
Juan Ramón de la
Fuente y Gloria Soberón en los laboratorios de las recién inauguradas
instalaciones del Instituto de Investigaciones Biomédicas, en donde se genera
conocimiento de primer nivel.
FOTO 02.
El Instituto de
Investigaciones Biomédicas de la UNAM puso en marcha sus nuevas instalaciones,
en donde se genera conocimiento de primer mundo.
FOTO 03
El rector Juan
Ramón de la Fuente recorrió los laboratorios de las nuevas instalaciones del Instituto
de Investigaciones Biomédicas de la UNAM.