Boletín
UNAM-DGCS-313
Ciudad
Universitaria
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final del boletín
Científicos y alumnos de la
UNAM hicieron un valioso aporte a la genómica mundial al descubrir que el ADN
no es estático y se transforma permanentemente desde el embrión, hallazgo que
podría vincularse al conocimiento del origen del envejecimiento y de males como
el cáncer.
Miembros del Centro de
Ciencias Genómicas (CCG), encabezados por el investigador emérito
Resalta en este trabajo la
participación de 12 estudiantes de la licenciatura en Ciencias Genómicas, que
se imparte en el CCG. Se trata de nueve mujeres y tres hombres, quienes hicieron
el análisis bioinformático de todo el genoma humano para encontrar las
secuencias repetidas y seleccionar las que pudieran tener rearreglos viables de
ser abordados por sus propios métodos; proceso que tomó cerca de dos años.
Los resultados aparecen en el
trabajo Recurrent DNA Inversions in the Human Genome, en la prestigiada
revista Proceedings of the National Academy of Sciences. Se trata del
artículo inaugural que
Fue una simbiosis fructífera
entre la experiencia del doctor Palacios y la maestra en ciencias
El universitario recordó que
la información genética de cualquier organismo está cifrada en el ADN. Está
contenida en un código de tipo lineal. No obstante, en ocasiones puede sufrir
rearreglos de distintos tipos. Por ejemplo, es factible que una región de la
cadena se salga, a lo cual se le llama deleción; o un fragmento de la misma
puede duplicarse y amplificarse; o bien, invertirse o ir a otro lugar del
genoma, detalló.
Se sabe que los genomas no son
estructuras estáticas; por un lado, mutan, es decir, se presentan
transformaciones en las bases que los conforman, y por el otro pueden presentar
rearreglos, hechos relacionados con la evolución de los organismos, dijo.
Gracias a la acción de ciertas
enzimas, la doble hélice del ADN se replica en algún momento para dar lugar a
células hijas con la misma información genética. No obstante, a veces la
maquinaria presenta errores, aclaró.
Las enzimas que de forma
natural reparan estos fragmentos encuentran porciones genéticas iguales unas a
otras, y las juntan, pero lo hacen en el sitio incorrecto. Se trata de la
llamada “recombinación homóloga no alélica”, especificó.
“Hemos trabajado sobre todo
con las secuencias repetidas y producción de rearreglos en bacterias, y
establecido técnicas novedosas para identificar dichos rearreglos
genómicos”. Estas técnicas se basan en
identificar las huellas que quedan en el ADN como consecuencia de la generación
de un rearreglo, agregó.
El utilizar los conocimientos
adquiridos en bacterias para estudiar rearreglos en el genoma humano, requirió
de un complejo análisis bioinformático de la totalidad de las secuencias
repetidas con 100 por ciento de identidad en el genoma humano. Posteriormente fue necesario estudiar todas
las regiones repetidas, para seleccionar algunas que pudieran ser estudiadas
por el enfoque experimental desarrollado previamente por el grupo de
investigación del Centro de Ciencias Genómicas.
El concepto clásico que
existía es que el ADN de las diversas células humanas, con excepción de algunas
que participan en la respuesta inmune y que presentan rearreglos programados,
es idéntico. Empero, puntualizó, “encontramos que hay rearreglos que se repiten
en distintas personas”.
Los experimentos se hicieron
en células de la sangre y se vio que entre los leucocitos algunos los
presentan. Eso indica que el ADN no es idéntico en todas las células, sino que
en algunas varía por la presencia de tales “modificaciones” genómicas, explicó.
Además, abundó, se encontró
que su proporción es significativamente mayor en adultos que en recién nacidos
(una entre mil y una en 100 mil, respectivamente, para algunas de las regiones
del genoma estudiadas). La propuesta de
La mayor parte de los
rearreglos, refirió el emérito, no debieran tener consecuencias directas en
Lo peor que puede ocurrir es
que adquiera una ventaja de crecimiento, que de no ser detenida podría producir
una neoplasia. De ahí que uno de los propósitos de este grupo sea determinar su
frecuencia cuando se presenta ese padecimiento.
Asimismo, pronto se comenzará
a estudiar si esas modificaciones en el genoma existen en espermatozoides, es
decir, si ocurren en la línea germinal. En el mediano plazo se trabajará en
células en cultivo para ver si se pueden “aislar poblaciones celulares que
presenten rearreglos específicos”, entre otras líneas que se abren a partir del
descubrimiento, expuso.
Reconoció que esta labor –cuya
publicación está dedicada a
“Este trabajo no compete sólo
a este laboratorio sino al CCG. Aquí se secuenció el primer genoma en México (Rhizobium etli) y nos comprometimos a
abrir nuevas avenidas de conocimiento; estamos cumpliendo y para nosotros es un
gusto trabajar a nivel básico con el genoma, ya no sólo de bacterias o plantas,
sino también humano”, concluyó.
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FOTO 1.
Científicos y alumnos de la UNAM, encabezados por el emérito Rafael Palacios, hicieron un valioso aporte a la genómica mundial al descubrir que el ADN no es estático y se transforma desde el embrión.
FOTO 2
Doce estudiantes de la licenciatura en Ciencias Genómicas de la UNAM participaron en la detección de los rearreglos del genoma humano, bajo la dirección del emérito Rafael Palacios.