Boletín
UNAM-DGCS-296
Ciudad Universitaria
Pies de foto al final del boletín
DAÑA
·
Señaló
Anastazia Banaszak, investigadora del Instituto de Ciencias del Mar y
Limnología de
·
Intervino
en el marco de la reunión académica organizada con motivo del XXV aniversario
de esa entidad
·
La
científica refirió que se incrementa la mortalidad en los corales arrecifales
debido al efecto nocivo de la radiación ultravioleta
La radiación ultravioleta (RUV) aumenta la mortalidad
de los corales en sus etapas de larva y juveniles, y reduce la reproducción en
los adultos, señaló Anastazia Banaszak, de
Por
otro lado, se incrementa la mortalidad debido al efecto nocivo de
Al
ahondar en el mayor efecto de
Los corales, recordó la experta, ayudan a la biodiversidad de los
mares. Al construir estructuras geológicas crean nichos para una gran diversidad de organismos
asociados a arrecifes coralinos. Se encuentran en aguas tropicales costeras en
el Golfo de México, el Caribe mexicano y el Pacífico, sitios que reciben altas
dosis de RUV.
La universitaria, quien realiza su investigación en el Caribe mexicano,
principalmente cerca de Puerto Morelos, además trabajó con
Favia fragum, especie fácil de
manejar en laboratorio o en acuarios, produce larvas de uno o dos milímetros,
las cuales se “asientan” formando juveniles y a partir de éstos se transforman
en adultos. “Si se exponen colonias adultas por tres semanas a la luz solar sin
RUV antes de su desove, la cantidad de larvas generadas aumenta nueve veces en
comparación a colonias expuestas a luz solar con RUV”.
Eso significa que los recursos que normalmente se usan para
reproducción tienen que ser reasignados para reparar el daño causado por la
radiación ultravioleta o bien para protegerse, apuntó.
Además,
agregó Anastazia Banaszak, en ausencia
de RUV disminuye el tiempo en que se asientan las larvas, de siete a dos días;
ello significa que las no expuestas inician antes su etapa juvenil. Para el
grupo de esos organismos en etapa juvenil se halló que al estar ante
Otro
objetivo del grupo de trabajo es cuantificar de forma más precisa el daño, por
lo que se inició un proyecto financiado por el DGAPA-PAPIIT para determinar la
afectación al ADN de corales, en particular, en
“La
buena noticia es que es posible identificar tal daño, tanto en las algas como
en el hospedero en condiciones naturales”, subrayó. Por ello la cuantificación
del daño del ADN representaría una técnica útil para comparar los efectos
negativos entre especies y bajo diferentes condiciones lumínicas.
Recordó
que los corales tienen habilidades de autoprotección, que incluyen factores
físicos, por ejemplo, moco para absorber o reflejar la radiación y proteger los
componentes sensibles de la célula.
Pero
también hay barreras químicas, como micosporinas parecidas a aminoácidos. Son
20 diferentes compuestos, eficientes en absorber RUV y presentes en muchos
organismos acuáticos. Otros “escudos” pueden ser los “cromóforos todo
proteína”, explicó.
Anastazia
Banaszak dijo que no se sabe mucho de la reparación del daño en los corales. Hay
muchas preguntas y es poco lo que se conoce de la fotobiología en áreas de alta
RUV, porque se ha hecho más investigación en
Consideró
importante seguir con el estudio y ver su impacto en especies con ciclos de
vida más complicados, como los corales con desove masivo; el efecto de otros
contaminantes sobre corales y organismos arrecifales; el daño al ADN en
relación con el ciclo diurno, cambios estacionales y de profundidad, y
describir mecanismos de protección.
En su oportunidad, el investigador
P. argus vive de manera solitaria en las macroalgas y por eso se le
conoce como juvenil algal. Conforme crece se encuentra en refugios
estructurados, en bases de esponjas, corales, hendiduras del sustrato calcáreo
y en el arrecife. Es una langosta que se traslada desde la plataforma arenosa y
hasta 60 u
Mientras, P. guattus está solo en el arrecife, al cual usa no sólo de
refugio, sino de sustrato alimenticio; ahí lleva a cabo toda su actividad
biológica. No hay defensa grupal ante el peligro; su principal estrategia es
retraerse. En tanto, P. argus se defiende en grupo dentro y fuera del refugio.
A los depredadores los ataca de manera coordinada.
La abundancia de la langosta pinta es influida por la de depredadores;
no ocurre así para
—o0o—
FOTO 1.
La radiación
ultravioleta aumenta la mortalidad de los corales en sus etapas de larva y
juveniles, y reduce la reproducción en los adultos, señaló Anastazia Banaszak,
del ICMyL de
FOTO 2
El investigador