Boletín
UNAM-DGCS-241
Ciudad Universitaria
Pies de foto al final del
boletín
HABRÁ
REPERCUSIONES EN
·
Aseguró Ana
·
Se incrementarán las enfermedades
diarreicas, cardiorrespiratorias y las
provocadas por las ondas de calor, dijo
·
En los siguientes años la desnutrición
aumentará en el planeta, con mayores problemas en el desarrollo y crecimiento
infantil, añadió
El cambio climático es irreversible y en los próximos años tendrá
repercusiones en la salud de la población en el mundo, como incremento en la
desnutrición y en la proliferación de enfermedades diarreicas,
cardiorrespiratorias y las provocadas por las ondas de calor, alertó Ana
Al dictar
Aseguró que de acuerdo con los estudios realizados por el Panel
Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) en su
último informe, las modificaciones en la temperatura tendrán un mayor efecto en
las personas que tienen baja capacidad adaptativa.
Explicó que los trabajos revelan que en los siguientes años la
desnutrición se incrementará en el planeta, con problemas subsecuentes en el
desarrollo y crecimiento infantil; así como aumento de las enfermedades,
muertes y lesiones debido a ondas de calor, inundaciones, tormentas, incendios
y sequías.
Presentada por
También se prevé un
incremento en la carga de diversos padecimientos; es decir, una mayor cantidad
de personas sufrirá trastornos diarreicos y cardiorrespiratorios, debido a
mayores concentraciones de ozono atmosférico, relacionado con el cambio
climático y alteraciones parciales.
La también consultora de
Respecto a América Latina, Ana
Además, dijo, en Bolivia se dice que habrá una intensificación en la
condición de la malaria y la leishmaniasis, principalmente en grupos
indígenas; mientras que en Panamá se incrementarán los padecimientos
transmitidos por vectores, sobre todo los infecciosos, problemas de salud
debido al ozono y aumentos en la desnutrición.
No obstante, la especialista aclaró que los impactos en la salud tanto
positivos como negativos variarán de una localidad a otra. Por ello, “es
importante trabajar en los ámbitos regional y local en torno a lo que se puede
esperar y lo que seguirá cambiando a lo largo del tiempo, a medida que la
temperatura aumente”.
Reconoció que en la actualidad es de todos sabido que es más barato
prevenir que curar. Sin embargo, la mayoría de quienes toman las decisiones en
el sector salud quieren conocer los beneficios económicos de cualquier
intervención. “Necesitamos hacer estudios que permitan ponerle pesos y centavos
a estos impactos”.
Desafortunadamente, recalcó, se han llevado a cabo pocos análisis que
permitan estimar los beneficios socioeconómicos. Hasta el momento sólo se ha
realizado un estudio en Kenya, para determinar cuánto beneficiaría al Producto
Interno Bruto de ese país el control de la malaria, relacionada con cuestiones
de cambio climático.
Los datos duros señalan que el uso de indicadores climáticos en las
intervenciones en salud puede conducir a ahorros sustantivos. De esa forma, si
se fortalecen tales servicios, así como estas aplicaciones a diferentes
niveles, podremos ahorrar mucho más recursos de los que en la actualidad se
destinan a estas medidas, refirió.
La académica universitaria comentó que es imprescindible robustecer la
infraestructura de salud pública, fortalecer los recursos humanos y financieros
para ese sector, y contar con más programas de formación.
“Hay que abrir nuevos
conocimientos, éste es un campo de investigación de frontera y hay mucha gente
que se necesita educar en estos ámbitos para apoyar esta situación que ya no
tiene regreso”, sugirió.
Asimismo, debe apoyarse la investigación en el desarrollo e
instrumentación de sistemas de respuesta y vigilancia que sean más efectivos, y
diseñar programas permanentes de prevención y control, concluyó.
– o0o –
FOTO 01.
Ana
FOTO 02
Ana