Boletín
UNAM-DGCS-006
Ciudad
Universitaria
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DESCIFRAN INVESTIGADORES DE LA UNAM INSCRIPCIONES EN PALENQUE, CHIAPAS
·
Guillermo Bernal Romero, del IIFL, realizó un
estudio pionero con el apoyo de otros expertos universitarios, en el tablero
del trono del Templo XXI
· Aporta nueva información histórica de la dinastía palencana, principalmente del gobernante K’inich Ahkal Mo’ Nahb III
Investigadores de
la UNAM realizaron un estudio general y de desciframiento de las inscripciones
del Trono del Templo XXI de Palenque, Chiapas, que aportan nueva información
histórica de la dinastía palencana, principalmente del gobernante K’inich Ahkal
Mo’ Nahb III.
Guillermo Bernal
Romero, del Instituto de Investigaciones Filológicas (IIFL), explicó que la
escasa cantidad de información hacía suponer a algunos autores que durante el
reinado de ese personaje, quien rigió entre 721 y 736 después de Cristo, hubo
un periodo crítico, de debilidad del poder dinástico.
Sin embargo, los
hallazgos que se han hecho a partir de 1998, y sobre todo, el del Templo XXI en
el 2002, han cambiado paulatinamente las interpretaciones acerca de este
tiempo, al descifrarse –después de cuatro años– las inscripciones, a partir de
un estudio pionero realizado por Bernal Romero con el apoyo de otros expertos
universitarios, en el tablero de dicho trono, y cuyos resultados se ofrecen
ahora.
“El escenario que
se puede vislumbrar en la actualidad acerca de esa época es que Palenque se
recuperó de una serie de derrotas militares, de problemas dinásticos internos y
alcanzó con K’inich Ahkal Mo’ Nahb III una nueva época de auge, dijo,
manifestado particularmente en la actividad constructiva intensa y la calidad
de las obras escultóricas”.
Guillermo Bernal apuntó que estas
manifestaciones refieren el pensamiento religioso, implicado con el dominio de
ese tiempo, así como una etapa de fortalecimiento del poderío político y
militar de la ciudad. “En esta época, K’inich Ahkal Mo’ Nahb efectuó una reconformación de la dinastía. Para evitar
el desmembramiento del poder central tuvo que reconocer y compartir el mando
como no se había hecho antes”.
Los gobernantes
subalternos: nobles, sacerdotes, o militares que antes no aparecían en los
monumentos de los palencanos –que solamente
mostraban a los padres del monarca y a éste mismo entronizándose–,
comenzaron a emerger, al igual que señores provinciales, de cabeceras foráneas,
que fueron registrados como pilares importantes de cada linaje local, agregó.
Así, “uno de los
aspectos de los nuevos hallazgos es que hablan de cómo las estirpes también
tenían que modificar sus estrategias de dominación y asimilar a gobernantes
subordinados que ya tenían poder por sí mismos, para evitar la disgregación
definitiva del mando dinástico central”, expuso.
Ello, abundó,
permite reconstruir con fidelidad un periodo fundamental de la historia
mesoamericana, en donde se cimentaron las profundas raíces del país,
particularmente de los sitios mayas de México.
Se piensa que K’inich Ahkal Mo’ Nahb III
hizo también propaganda política, utilizando la imagen del señor U Kokan Kan,
“Serpiente de la espina de mantarraya”, quien fue un gobernante sagrado de
Palenque de gran opulencia, que se remonta al año 252 antes de Cristo. “Retomó
esta figura popular y la incorporó como un emblema de historia dinástica de la
élite”, para acercarse más a la gente común, pues fue seguramente un personaje
legendario que ya era conocido entre la población, detalló.
Éstos son algunos
datos de cómo el estudio de las inscripciones glíficas permite hacer una nueva
caracterización de la cultura del clásico maya y de las historias de prosapia,
refirió.
Así, precisó, el Centro de Estudios Mayas
del IIFL ha tenido una presencia importante en áreas de conocimiento de
vanguardia, como la epigrafía para el desciframiento de la escritura maya, siendo
una de las precursoras la también investigadora de la UNAM, Maricela Ayala.
El investigador del
Centro de Estudios Mayas del IIFL concluyó que Palenque fue la ciudad más
importante del Occidente Maya, por su tamaño, la calidad de sus edificios y la
población que dominó.
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FOTO 01.
El gobernante
K’inich Ahkal Mo’ Nahb III efectuó una reconformación de la dinastía palencana,
aseguró el investigador Guillermo Bernal, del Centro de Estudios Mayas del IIFL
de la UNAM.
FOTO 02
Palenque se recuperó
de una serie de derrotas militares y alcanzó con K’inich Ahkal Mo’ Nahb III una
nueva época de auge, aseveró Guillermo Bernal, del IIFL de la UNAM.
FOTO 03
El desciframiento de las inscripciones del Trono del Templo XXI de Palenque, Chiapas, realizado por expertos de la UNAM, aportan nueva información histórica de la dinastía palencana.