Boletín
UNAM-DGCS-937
Ciudad
Universitaria
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ESTUDIAN EN LA UNAM
CÓMO LOS ESTEROIDES SEXUALES DETERMINAN SUSCEPTIBILIDAD A CIERTAS ENFERMEDADES
·
Informó Jorge Morales-Montor, adscrito al
Instituto de Investigaciones Biomédicas
·
Son estas hormonas las encargadas de determinar
la respuesta inmunológica entre los sexos femenino y masculino, señaló
·
Lupus o artritis reumatoide afectan más a las
mujeres, señaló
Científicos del
Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIB) de la UNAM aportaron nuevo
conocimiento sobre la forma como los esteroides sexuales determinan la susceptibilidad
a ciertas enfermedades entre el sexo femenino y masculino.
Al respecto, Jorge
Morales-Montor, adscrito a esa entidad, expuso que las diferencias básicas
entre un género y otro han llevado a proponer que son estas hormonas las
encargadas de definir a nivel microscópico, celular y molecular, la respuesta
inmunológica de cada uno, y las consecuencias de esta conducta diferencial.
Así, añadió, uno de
los avances alcanzados en el laboratorio que encabeza en el Departamento de
Inmunología, es la demostración de que la interacción entre el sistema inmune y
los esteroides sexuales afecta el desarrollo de infecciones y enfermedades,
principalmente las producidas por parásitos.
Otro logro es el descubrimiento de que
estos organismos utilizan el medio endócrino diferencial de un sexo y otro para
su beneficio, informó el también investigador nacional.
La distinción
principal entre una mujer y un hombre, entre una hembra y un macho, son los
niveles de esteroides sexuales. Las primeras cuentan con cuantioso estradiol,
progesterona y pocos andrógenos, mientras que los segundos producen gran
cantidad de andrógenos, menos estradiol y progesterona, apuntó.
“El estradiol hace
que los linfocitos b, que son células especializadas del sistema inmune en
producir anticuerpos, generen más, mientras que los andrógrenos tienen el
efecto sobre la diferenciación hacia células que pueden comerse a otras o
fagocitar”, indicó.
De esta manera,
precisó, es claro que las mujeres son más susceptibles a enfermedades
autoinmunes porque el estradiol
estimula la producción de anticuerpos inespecíficos, lo que incide
directamente en la patogénesis de padecimientos tales como el lupus o la
artritis reumatoide, entre otras.
Mientras tanto, los
hombres presentan una incidencia menor, debido a que entre otras
características, tienen bajos niveles de dicha hormona, comparados con su
contraparte, detalló.
Por otro lado,
explicó que existe un modelo en laboratorio, que es el de la cisticercosis
murina, con las condiciones controladas para reproducir ratones e infectarlos.
En dicho experimento siempre las hembras tienen más problemas.
“Los estrógenos, en este caso de
infección particular, hacen que crezca más el parásito, el cual los utiliza. Esa
es una de las aportaciones más importantes del grupo, porque no se había
demostrado que directamente pudiera emplear hormonas del hospedero para su
propio crecimiento”, expuso.
Es claro –continuó–
que en una hembra, con abundante estradiol y progesterona, crece más el
oportunista, porque el medio es rico en factores positivos para su desarrollo,
y éste lo manipula, mientras que los andrógenos u hormonas masculinas inhiben
su crecimiento, pues se ha comprobado que es inclusive tóxico para el
cisticerco.
Por otro lado,
Morales-Montor especificó que la infección por el cisticerco en el modelo
experimental induce cambios tan drásticos en un macho que cuando está
crónicamente infectado con este parásito, se feminiza y se comporta como
hembra.
“Conforme pasa el
tiempo, el macho tiene tanto estradiol como la hembra. Deja de tener conducta
sexual normal, sufre atrofia del sistema reproductivo y cambios en las
moléculas que expresa el sistema nervioso central”, concluyó.
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FOTO 01
Los parásitos
utilizan el medio endocrino diferencial de un sexo y otro para su beneficio,
aseveró Jorge Morales-Montor, del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la
UNAM.
FOTO 02.
La interacción entre sistema inmune y esteroides sexuales afecta el desarrollo de infecciones y enfermedades, principalmente las producidas por parásitos, indicó el investigador de la UNAM Jorge Morales-Montor.