Boletín
UNAM-DGCS-753
Ciudad Universitaria
 María Teresa Uriarte |
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COMIENZA EN LA UNAM
EL XXX COLOQUIO INTERNACIONAL DE HISTORIA DEL ARTE
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Asisten a este encuentro 25 distinguidos ponentes
de Argentina, Brasil, Reino Unido, Estados Unidos, Finlandia y Canadá
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El Coloquio ha alcanzado un alto prestigio en las
instituciones que se dedican a esta disciplina en el orbe, señaló la directora
de la entidad, María Teresa Uriarte
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Estuvo acompañada por el director de la Facultad
de Medicina, José Narro
La UNAM puso en marcha el XXX
Coloquio Internacional de Historia del Arte Estéticas del des(h)echo, a donde
asisten 25 distinguidos ponentes de Argentina, Brasil, Reino Unido, Estados
Unidos, Finlandia y Canadá.
Al inaugurar este encuentro,
la directora del Instituto de Investigaciones Estéticas, María Teresa Uriarte,
señaló que a lo largo de tres décadas,
el Coloquio ha alcanzado un alto prestigio en las instituciones que se dedican
a esta disciplina en el orbe.
Dijo que la participación de
Universidades de renombre como Harvard, Yale, California o Michigan, es un
ejemplo del respeto que el Instituto se ha ganado, pues la entidad goza de
reconocimiento mundial por su quehacer dentro de este ámbito.
Existen, afirmó, pocos foros
que permiten presentar a los investigadores, en un coloquio de pares, sus
trabajos con relación a la historia del arte. Para la UNAM es un orgullo
afianzar una actividad que se ha realizado por 30 años, lo cual demuestra la
continuidad del trabajo universitario.
María Teresa Uriarte precisó
que durante tres décadas ha habido una labor académica rigurosa, de selección a
fondo para invitar a las personalidades más destacadas. Además, los temas se
eligen con dos años de anterioridad; se discuten en el Colegio de
Investigadores y mediante votación de la comunidad.
Por su parte, el director de la Facultad de Medicina (FM), José Narro,
dio la bienvenida a los participantes del Coloquio, realizado en la Antigua
Escuela Medicina, ubicada en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Resaltó que mantener la organización de este foro por 30 años
ha tenido como resultado importantes investigaciones y productos, así como
relaciones de amistad estrecha.
En este marco, Francesco
Pellizzi, del Peabody Museum and Art Museums, de la Harvard University, dictó
la conferencia magistral Des-hecho y factura, donde expuso que se ha creado un
sistema de recepción universal, donde cualquier producción tiene potencialmente
un mercado global; es decir, está hecha para ser recibida en el orbe. Aunque
aún no se sabe qué es la cultura global, pues no tiene carácter todavía,
advirtió.
Consideró que este fenómeno es
irreversible, al precisar que el sistema de producción capitalista se funda
sobre el hecho de que siempre debe haber consumos mayores, por lo que la
obsolescencia está implícita en las formas de difusión y recepción del arte.
Se está ante algo nunca antes
visto en el pasado, pues la aceptación de los artefactos era específica, dentro
de un contexto cultural tradicional y
determinado, refirió.
Por otro lado, explicó que en
nuestra práctica el tiempo se instaura
en nuestro enfoque de la historia, de la vida y la muerte con el
cristianismo. Así, abundó, irrumpe también la visión apocalíptica, es decir, la
de una destrucción final.
De esta manera, se está en un mundo en donde el desastre,
que ya es definitivo, está incorporado a nuestra propia cultura. “Entonces,
todo lo que se hace es también un deshacer; es un hacer que también tiene su propio deshacer dentro
de su propio hacer”, aclaró el editor académico y crítico de arte.
El primer Coloquio surgió en
1975, cuando el investigador Jorge Alberto Manrique –a quien también se le
rinde un homenaje– propuso celebrar el 40 aniversario del Instituto con un acto
estrictamente académico. Desde entonces, se celebra anualmente como un espacio
que reúne a los especialistas
nacionales e internacionales más destacados en historia del arte, en
torno a un tema específico.
En esta trigésima edición se
aborda la estética del des(h)echo, donde se examina la gama de temáticas
localizadas en la intersección de dos conceptos: el de los procesos
relacionados con el verbo “deshacer” y los involucrados en la noción material y
cultural de “desechar”.
Se trata de repensar el arte
desde las formas históricas en que objetos y prácticas han contenido su
eliminación como propósito, la preocupación por el destino de lo obsoleto,
residual o antiguo.
El objetivo es revisar múltiples casos de interpretación
y lectura del arte, no desde su producción, sino de su destrucción.
La creación no es la única modalidad de relación con lo estético, sino que se ha
desarrollado un fuerte aprecio por lo des-hecho: el gusto por las ruinas,
monumentos y restos abandonados de edificios antiguos, pero también por los
fragmentos de obras de arte y culto que revelan aspectos de sus hechuras originarias,
así como las hechuras y deshechuras del tiempo.
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FOTO 01.
Jorge Alberto
Manrique, José Narro y María Teresa Uriarte durante la inauguración en la UNAM del
XXX Coloquio Internacional de Historia del Arte Estéticas del des(h)echo.
FOTO 02
José Narro Robles, director de la FM
de la UNAM, resaltó que mantener la organización del Coloquio Internacional de
Historia del Arte por 30 años ha dado importantes investigaciones y productos.
FOTO 03
María Teresa
Uriarte, directora del Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM,
inauguró el XXX Coloquio Internacional de Historia del Arte Estéticas del
des(h)echo.
FOTO 04
Francesco Pellizzi, del Peabody Museum and Art Museums, de la Harvard University, dictó en la UNAM la conferencia magistral Des-hecho y factura.