06:00  hrs. 06 de Octubre de 2006

 

 

Boletín UNAM-DGCS-742

Ciudad Universitaria

 


Lucio Oliver

 

Pies de foto al final del boletín

INFLUYEN ACUSACIONES DE CORRUPCIÓN EN BRASIL, EN LA REELECCIÓN DEL PRESIDENTE LULA DA SILVA

 

 

Las acusaciones de corrupción fueron una de las principales causas que impidieron la reelección del presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, y lo llevaron a enfrentar una segunda vuelta para alcanzar de nuevo la primera magistratura, aseguró Lucio Oliver, investigador del Centro de Estudios sobre Latinoamérica (CELA) de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM.

 

El académico explicó que antes de llevarse a cabo los comicios, las encuestas favorecían con un 51 por ciento al candidato del Partido de los Trabajadores (PT), pero el dossier-gate –documentos que evidenciaban los actos de deshonestidad entre los miembros de su gabinete–, ventilado por los medios de comunicación, contribuyó a generar un ambiente de desconfianza entre los ciudadanos.

 

El resultado final le dio sólo el 49 por ciento de la votación en todo el país, mientras que el segundo contendiente, Geraldo Alckmin, del Partido Socialdemócrata Brasileño (PSDB), consiguió el 41, cuando las encuestas previas le otorgaban el 31 por ciento; es decir, advirtió,  tuvo un ascenso considerable durante esta jornada.

El investigador resaltó la sorpresa de haber quedado por debajo del porcentaje esperado, aún cuando existía plena confianza de que avasallaría por mucho a su más cercano adversario, pues hoy por hoy, las políticas de gobierno adoptadas lo han mantenido en las preferencias, según los estudios de opinión de aquella nación.

 

Destacó en entrevista que una alternativa para el presidente habría sido el deslindarse de toda responsabilidad, así como de escándalos similares que se habían dado con anterioridad y que finalmente, lo afectaron.

 

Según el investigador, entre otros elementos que lo llevaron a perder las elecciones, está la política de apoyo al sector financiero, así como permitir y coparticipar en la mercantilización de la política.

 

En este sentido, la guerra mediática entre los candidatos con más alto porcentaje de votos, Luiz Inacio Lula da Silva y Geraldo Alckmin, jugó un papel fundamental en ese país, ya que la mayor parte de los medios de comunicación se caracterizan por ser conservadores y en este momento están en contra del mandatario, aún cuando permitió la continuidad de los capitales, tanto internos como externos, y apoyó las exportaciones, reveló.

 

De este modo, subrayó que si logra convencer con argumentos de que se pondrá fin a la corrupción, es un hecho que ganará la segunda vuelta; de lo contrario, no tiene esperanzas de mantenerse en el poder.

 

Manifestó que un aspecto positivo de la derrota del actual presidente brasileño, es que la población ha mostrado que reacciona contra la comercialización de las prácticas políticas, pero lo negativo es que esa conciencia no le permite contemplar que el otro candidato también tiene una larga historia de acciones corruptas.

 

Durante el gobierno de Lula da Silva hubo logros en las políticas exterior, social, cultural y universitaria, que gobiernos anteriores no habían contemplado. En el rubro social, ejemplificó, instaló el programa Bolsa Familiar, del cual se derivan otros tres: Vale Gas, Bolsa Escuela y Apoyo Hambre Cero.

 

Con respecto a la política exterior, dio auge y revitalización al MERCOSUR, y la lucha de esa parte del continente con el fin de concretar negociaciones de exportación e importación más dignas y autónomas, afirmó.

 

Todos estos beneficios se verán amenazados si resulta ganador Geraldo Alckmin, quien ha adquirido compromisos con el sector empresarial neoliberal que no le permitirá ejecutar acciones en este sentido, alertó.

 

No obstante, Luiz Inacio Lula da Silva todavía tiene posibilidades de obtener el triunfo el próximo 29 de octubre, aun cuando se alejó de su partido, el PT, a consecuencias de los grandes escándalos generados en 2005, adelantó.

 

Así pues, el futuro político para Brasil no puede vislumbrase aún, habrá que esperar a los resultados de la segunda vuelta electoral. Una de las consignas existentes en aquella nación es: malo con Lula da Silva, peor sin él, lo que significa que la mayoría del país continúa apoyando al todavía presidente.

 

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FOTO 1.

Lucio Oliver, investigador de la FCPyS de la UNAM, dijo que si el presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, logra convencer de acabar con la corrupción, podría ganar las segunda vuelta.

 

FOTO 2

Durante el gobierno de Lula da Silva hubo logros en las políticas exterior, social, cultural y universitaria, dijo el especialista de la UNAM Lucio Oliver.