06:00 hrs.  13  de Mayo de 2006

 

 

Boletín UNAM-DGCS-359

Ciudad Universitaria

 


Leonardo Alcántara

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INSTALA UNAM 35 NUEVAS ESTACIONES PARA EL REGISTRO DE TEMBLORES INTENSOS

 

·        Informó Leonardo Alcántara, del Instituto de Ingeniería, quien agregó que se suman a otras 65 que el propio Instituto opera en el país

·        Están distribuidas a lo largo de 15 entidades de la República Mexicana, aseveró

·        Consideró que esta red es un gran aporte de la Universidad Nacional para el avance del conocimiento sísmico en nuestro país y en el mundo

·        Van de la mano con los trabajos que realiza el Servicio Sismológico Nacional

 

El Instituto de Ingeniería (II) de la UNAM instaló a lo largo de la zona costera del Océano Pacífico, desde Nayarit hasta Chiapas y en algunas entidades del interior del país, una red de 35 nuevas estaciones acelerográficas para el registro de temblores intensos, que producen daños a la infraestructura, informó Leonardo Alcántara Nolasco, coordinador de Sismología e Instrumentación Sísmica de esa entidad.

 

Mencionó que se suman a otras 65 que el propio Instituto opera en el país desde hace varios años. Estas se distribuyen a lo largo de 15 entidades de la República Mexicana, en las que más se observa el efecto de los movimientos telúricos, sobre todo los de gran magnitud, y que ocasionan graves daños a la población y a su infraestructura.

 

Con ello, abundó, el Instituto opera –a partir de esta semana– la red de registro sísmico más importante y de mejor cobertura en México. Además, estas estaciones van de la mano con los trabajos que realiza el Servicio Sismológico Nacional, porque la información que de ellas se obtiene es utilizada por el propio sistema.

 

Esta red, agregó, es un gran aporte de la Universidad Nacional, por conducto del II, para el avance del conocimiento sísmico en nuestro territorio y en el mundo. De hecho, es uno de los esfuerzos más importantes que se han realizado en la materia después de las acciones que se tomaron tras los terremotos de 1985 y que afectaron severamente a  la Ciudad de México.

 

Preciso que las nuevas estaciones son un complemento a la infraestructura ya existente en el II, lo cual durante prácticamente cuatro décadas le ha permitido a la Universidad realizar un amplio monitoreo de la actividad sísmica.

 

Alcántara Nolasco explicó que esta infraestructura permitirá contar con información en forma inmediata, que coadyuve en las labores de los sistemas de protección civil del país, y además permitirá avanzar en el conocimiento del fenómeno sísmico, cuyo impacto deberá reflejarse en todos aquellos códigos de construcción que será necesario crear, adaptar o modificar.

 

La implantación de esta serie de nuevas estaciones así como de las ya existentes, es un fiel reflejo del esfuerzo que muchos investigadores del Instituto realizan para estudiar esta actividad, mismo que les ha valido un amplio reconocimiento tanto en el ámbito nacional como mundial, por los trabajos que se llevan a cabo en esta entidad universitaria, expresó.

 

Reconoció que el instrumental instalado lo recibió la UNAM, mediante un comodato que el gobierno federal le otorgó y que forma parte de los esfuerzos realizados para integrar la Red Sísmica Mexicana, proyecto en el que participan los centros Nacional de Prevención de Desastres, y de Instrumentación y Registro Sísmico; así como los institutos de Geofísica e Ingeniería de esta casa de estudios.

 

No obstante, a pesar de este apoyo, “hay que reconocer que esta red todavía no es suficiente, se debe mejorar y complementar la cobertura con la instrumentación de estructuras tales como edificios, presas, puentes, entre otros”, apuntó.

 

Se debe aceptar que México es un país de temblores. Por ello, es indispensable que los nuevos códigos permitan construir con mayor seguridad y que tengan un soporte adecuado ante la presencia de estos eventos, señaló.

 

Mencionó que estas estaciones son similares a las que posee el Servicio Sismológico Nacional, pero a diferencia de éstas, cuyo interés radica en conocer la génesis de los temblores, su magnitud y localización epicentral, las nuevas intentan responder a preguntas como: por qué se dañan las estructuras, o por qué se producen deterioros en los suelos en donde están asentadas.

 

Este tipo de red sísmica, que se le llama acelerográfica porque registra la aceleración del terreno, establece un parámetro con el cual los ingenieros sísmicos están relacionados, para determinar el nivel del daño que puede ocasionar un movimiento telúrico a las edificaciones, explicó.

 

Leonardo Alcántara subrayó que las estaciones son autónomas, cuentan con un suministro de energía mediante celdas solares, y cuando el equipo o acelerógrafo detecta un temblor inicia un proceso de registro, y una vez que termina lo guarda y almacena en su memoria.

 

La siguiente etapa de la red es implementar un sistema de adquisición y monitoreo de datos de manera remota; es decir, utilizar los avances tecnológicos como Internet, comunicaciones satelitales o telefonía celular y radio para transmitir la información a un puesto central de registro.

 

Aclaró que las estaciones pueden detectar cualquier movimiento, sin embargo están adaptadas para discriminar si es un evento diferente a un temblor. Son capaces de reconocer desde sismos pequeños hasta otros de mayor escala.

 

Con una red como ésta, y al implementar un sistema mediante el cual se envía la información de manera automática al Centro de Registro en el II, en cuestión de minutos se podrá tener un escenario de las intensidades que se generaron  durante el temblor, añadió.

 

Esta actividad ya se hace para el Valle de México y la intención, agregó el universitario, es que esto se realice en todo el territorio, lo cual permitirá que las autoridades de protección civil puedan contar con herramientas y mayor información, y así canalizar la ayuda hacia donde se requiere.

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FOTO 1

Leonardo Alcántara Nolasco, del Instituto de Ingeniería de la UNAM, señaló que esta entidad opera la red de registro sísmico más importante y de mejor cobertura en México.

 

FOTO 2.

El Instituto de Ingeniería de la UNAM instaló 35 nuevas estaciones acelerográficas para el registro de temblores intensos, que se suman a otras 65 que la propia entidad opera en el país.

 

FOTO 3

Las 35 nuevas estaciones acelerográficas del II de la UNAM van de la mano con los trabajos que realiza el Servicio Sismológico Nacional, afirmó el investigador Leonardo Alcántara Nolasco.