06:00 hrs.  19 de Febrero de 2006

 

 

Boletín UNAM-DGCS-125

Ciudad Universitaria

 

Pie de fotos al final del boletín

 

OBLIGADA, UNA MAYOR REFLEXIÓN SOBRE LA VIOLENCIA EN MÉXICO

 

 

·        Señaló en la UNAM Marco Bellingeri, catedrático de la Universidad de Turín, Italia

·        Dijo que en el debate sobre este tema hay un estereotipo que califica a nuestro país como subterráneo y bárbaro, que desde su origen nació en la brutalidad

·        De 1945 a 1999 en el mundo se registraron 127 conflictos que se pueden considerar guerras civiles, de los cuales 15 sucedieron en América Latina, reveló

 

 

Por la emergencia y dimensiones que ha cobrado en los últimos años la violencia en México, tanto en los ámbitos político, social y criminal, es obligada una mayor reflexión sobre este tema, señaló en la UNAM el especialista italiano Marco Bellingeri, catedrático de la Universidad de Turín.

 

Destacó que tocar este rubro motiva a los historiadores a pensar si algunos nuevos acercamientos a la historiografía contemporánea de la nación mexicana –de corte decididamente neohistoricista y fuertemente cargados de optimismo decimonónico, hacia un horizonte de progreso y democracia–, “son de dudoso fundamento”.

 

Al impartir la conferencia “Licitud e ilicitud de la violencia política organizada en el México contemporáneo: el caso de las guerrillas rurales”, organizada por el Instituto de Investigaciones Históricas (IIH), resaltó que en este debate hay un viejo estereotipo que califica a México como un país subterráneo y bárbaro, que desde su origen nace en la brutalidad.

 

En el Salón de Actos del IIH, Marco Bellingeri comentó que es infinita la literatura de alto nivel que retoma este prejuicio. Si bien es un fenómeno que atemoriza a todos y ha llegado a ser de emergencia nacional, en estas fronteras acaba de empezar su análisis, por lo que es necesario desarrollarlo más. “Lo cierto es que las teorías de corte sociológico, que le imputan a las relaciones sociales de pobreza la dimensión violenta, son insuficientes o poco útiles”.

 

Sin embargo, una reflexión que aún no se ha manifestado en toda su magnitud es sobre el uso de la represión política, en muchos casos contemporánea, en gobiernos como Ecuador, Bolivia, Argentina y Colombia, apuntó.

 

Explicó que según los filósofos políticos, la violencia es un trato característico del poder, una atribución que obtiene en su monopolio una legitimidad ineludible: como instrumento de guerra y como facultad continua por parte de los aparatos del Estado. No es propio de cualquier comunidad política, sino de una plenamente desarrollada, en la cual su expresión es restrictiva y se le contrapone la evasiva.

 

Marco Bellingeri informó que de acuerdo con diversos especialistas, se estima que de 1945 a 1999 se registraron en el mundo 127 conflictos que se pueden considerar guerras civiles, de los cuales 15 sucedieron en América Latina, entendiéndose como un asunto que perdura al menos cinco años, con un millar de muertos, y al menos cien al año.

 

Los Estados eficaces en solucionar este escenario, según algunos autores, serían los más democráticos, porque tienen mayor infraestructura y no porque posean una capacidad más amplia para evitar la conflagración. En realidad, dijo, los gobiernos autocráticos con menor nivel de arraigo territorial permiten la insurgencia.

 

 

Insistió que en México se da, como forma institucional, una administración liberal-democrática, y hasta hace poco un gobierno esencialmente autocrático. Es decir, permite en mayor medida la insurrección.

 

Refirió que las guerrillas mexicanas se distinguen por un maximalismo de los medios frente a fines relativamente más moderados. Esa es la característica no sólo de los movimientos en el medio rural, sino de muchos otros de carácter social.

 

El enemigo de muchos de ellos ha sido el gobierno, así fue en los casos de Rubén Jaramillo en el estado de Morelos, los del norte de la República y los del estado de Guerrero, con Genaro Vázquez y Lucio Cabañas a la cabeza, concluyó el especialista italiano.

 

–o0o–


PIES DE FOTO

 

FOTO 01.

 

Marco Bellingeri, catedrático de la Universidad de Turín, Italia, dijo en la UNAM que hay un viejo estereotipo cultural que califica a México como un país subterráneo y bárbaro, que desde su origen nace en la brutalidad.

 

 

FOTO 02

 

El especialista italiano dictó en el IIH de la UNAM la conferencia “Licitud e ilicitud de la violencia política organizada en el México contemporáneo: el caso de las guerrillas rurales”.