06:00 hrs.  8 de Enero de 2006

 

 

Boletín UNAM-DGCS-022

Ciudad Universitaria

 

 

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BUSCAN EN LA UNAM INCENTIVAR EL CONSUMO DE LECHE DE CABRA

 

·        Informó Miguel Ángel Pérez Razo, quien encabeza un grupo de especialistas de la Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán

·        Investigan diversos aspectos sobre la producción, valor nutritivo y subproductos

·        Como parte de la cátedra Leche de cabra, se evaluó durante seis años a las razas más importantes en nuestro país, y a ejemplares criollos de Durango, adelantó el especialista

·        Los caprinos contribuyen a la alimentación nacional con 300 mil toneladas de carne y más de 300 millones de litros de leche, dijo

 

Especialistas de la Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán (FESC) de la UNAM, encabezados por el profesor Miguel Ángel Pérez Razo, investigan diversos aspectos sobre la producción, valor nutritivo y subproductos de la leche de cabra, con el fin de superar los principales problemas de esta industria, mejorar los márgenes de ganancia e incentivar el consumo por parte de la población infantil.

 

Al respecto, Pérez Razo explicó que como parte de la cátedra Leche de cabra, que en la actualidad se desarrolla en esa unidad multidisciplinaria, se evaluó durante seis años a las razas más importantes en nuestro país (Anglo Nubia, Alpina, Saanen y Toggenburg), en conjunto con ejemplares criollos en el Centro de Cría Caprina ubicado en Tlahualilo, Durango.

 

 

De ese modo, se determinó la habilidad de supervivencia en las condiciones de crecimiento y productividad de la hembra, puntualizó. Con ello se aportó información sobre factores que influyen en la recolección de leche, como su manejo, vida productiva, raza y aspectos genéticos, entre otros.

 

En la actualidad, informó, los caprinos constituyen la cuarta especie en explotación en México y se encuentran distribuidos en 60 por ciento del territorio nacional, principalmente en áreas marginales áridas y semiáridas. Su importancia radica en que contribuye a la alimentación nacional con aproximadamente 300 mil toneladas de carne y más de 300 millones de litros de leche.

 

La cabra criolla constituye 90 por ciento del rebaño nacional, la cual se caracteriza por su talla pequeña y baja producción de lácteo. Sin embargo, añadió, la importación no ha satisfecho las expectativas de los criadores, por lo que es necesaria una evaluación para replantear los programas de cruzamiento o selección.

 

Pérez Razo reconoció que en México el consumo de leche de cabra es bajo, no obstante que en el mundo somos el principal importador de este producto. Ello porque se desconocen sus cualidades.

 

“Entre las ventajas que ofrece se encuentran el elevado nivel de calidad de sus nutrientes, en algunas ocasiones superior al de leche de vaca, y su digestibilidad, por lo que es recomendada como parte de los tratamientos médicos contra cálculos biliares y arteriosclerosis, entre otras enfermedades”, afirmó.

 

Expuso que 40 por ciento de los ganaderos en México tienen cabras, pero la leche de esta especie no se vende como tal, sino que se comercializa a través de otros derivados, como cajeta o queso, mientras que en Estados Unidos se vende principalmente para consumo de la población infantil.

 

Recordó que las líneas de investigación de la cátedra contemplan una evaluación de distintos aspectos ambientales y genéticos que influyen en la generación y movilización de reservas corporales, así como de su relación con aspectos productivos y reproductivos de las cabras.

 

Además, agregó, un análisis del vínculo entre agentes virales y bacterianos y su influencia en la calidad y cantidad de leche producida; además de estudios sobre derivados como quesos, yogures y cremas.

 

Respecto a la primera línea, mencionó que como todo producto animal, la calidad del lácteo se basa en la interacción de factores génicos y de hábitat, donde se involucra el manejo al cual está sometido el animal.

 

En ese sentido, concluyó, algunos elementos del entorno que inciden en su obtención son edad de la cabra, tipo, número y época en que se da el parto, peso vivo del animal, cría de cabritos y destete, entre otros. Por ello, se investiga sobre ellos, así como las diferencias entre razas.

 

 

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En la Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán de la UNAM se investigan diversos aspectos sobre la producción, valor nutritivo y subproductos de la leche de cabra.