18:00 hrs.  11 de Noviembre de 2005

 

 

Boletín UNAM-DGCS-906

Ciudad Universitaria

 

 

EXPULSA LA UNAM A 12 PORROS MÁS; SON YA 351 DURANTE LA ACTUAL ADMINISTRACIÓN

 

 

La Universidad Nacional Autónoma de México informa de la expulsión de 12 seudoestudiantes del bachillerato que en días pasados incurrieron en actividades porriles.

 

Con estas sanciones, son ya 76 los porros expulsados en lo que va del año y 351 durante la presente administración. Todos ellos por llevar a cabo acciones ilícitas que buscan vulnerar la buena convivencia y el respeto entre universitarios.

 

Los expulsados son: Adán Jonathan Rojas Ruiz, de la Preparatoria número 6, quien fue detenido y conducido por la policía ante el Ministerio Público, luego de participar en la agresión a un grupo de alumnos en las afueras del mencionado plantel.

 

Además, José Guadalupe Sánchez San Pedro, Cristian Terán Viveros, Cecilio Arturo Montiel Toledo, Jesús Martín Torres Daniel, Guillermo López Díaz, Fabián Pérez Serrano, Gerardo Guerra Jacobo, Mauricio Israel García Gómez, Isaac Joel Bonilla Navarrete, Efraín Medrano López y César Daniel Ponce Sánchez, todos ellos expulsados del Colegio de Ciencias y Humanidades, plantel Azcapotzalco, por estar en posesión de armas de fuego y petardos.

 

La Universidad Nacional denuncia que en días recientes se ha registrado un nuevo embate de grupos porriles, orquestado en contra de las comunidades de diversos planteles del bachillerato.

 

Llama la atención que, en estos momentos de definiciones político-electorales, reaparezcan en las inmediaciones de los planteles grupos de jóvenes --en su mayoría ajenos a la Universidad o ya expulsados de ésta--, quienes sin razón alguna amedrentan y provocan a los universitarios.

 

Las autoridades universitarias han mantenido la comunicación con las autoridades de seguridad pública del Distrito Federal y del Estado de México, a fin de prevenir y evitar, en lo posible, los ataques de estos grupos vandálicos.

 

La UNAM no tolera el porrismo y reitera su determinación de continuar el combate frontal a este fenómeno tan nocivo, que atemoriza a los miembros de la comunidad universitaria y busca desestabilizar el trabajo académico de la Universidad.

 

 

 

 

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