Boletín
UNAM-DGCS-902
Ciudad Universitaria
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ALUMNO DE FILOSOFÍA Y LETRAS DE LA UNAM GANA EL PREMIO NACIONAL DE
DRAMATURGIA
·
Este galardón forma parte de los Premios
Nacionales de Literatura 2005
·
Luis Santillán Ortega también recibió este año el
Premio de Dramaturgia de la UAM Xochimilco, con su obra “La historia ridícula
del oso polar que se quedó encerrado en el baño del restaurante”
Luis Santillán Ortega,
estudiante de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL) de la UNAM, ganó el
Premio Nacional de Dramaturgia, galardón que forma parte de los Premios
Nacionales de Literatura 2005, por su obra Autopsia a un copo de nieve.
El alumno del Colegio de
Literatura Dramática y Teatro fue merecedor de la distinción que otorga el
Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y 13 estados de la república, en este
caso el Instituto de Cultura de Baja California.
Durante una entrevista, el
premiado expresó su orgullo de pertenecer a la UNAM, su amor por ella y su
deseo por conservar el vínculo con la institución una vez concluida su carrera
de Literatura Dramatúrgica y Teatro, en la FFyL.
“Llevo la camiseta puesta,
hasta en los huesos”, señaló, sobre todo porque pertenece a la institución
desde que ingreso al CCH Sur. Y añadió: “amo a la UNAM, me encanta, la quiero
mucho”. Por ello, una vez terminada la carrera le gustaría seguir vinculado con
esta casa de estudios, pues le apasiona todo lo referente al Colegio de
Literatura.
Aunque el Premio Nacional de
Dramaturgia es la distinción más importante que ha recibido de los diversos
concursos en los que ha participado, este año también fue acreedor al Premio
Dramaturgia Pasión por el Teatro de la UAM Xochimilco, por su obra La historia
ridícula del oso polar que se quedó encerrado en el baño del restaurante, la
cual será puesta en escena y publicada por esa institución educativa.
Sin embargo, esta pieza ya se
exhibe los domingos por la tarde en el Teatro de la Capilla y es escenificada
por un grupo de actores surgidos también de la FFyL, denominado Estrejoica.
Actúan Karla Gutiérrez, Débora Rambal, Teresa García Flores y Luz Adriana
Carrasco.
Cuando en el Colegio de Literatura Dramática y Teatro se
realizó el concurso Palabra de Teatro, de las cuatro emisiones efectuadas, en
tres Santillán Ortega pasó a la etapa final.
Otra de sus obras, Polvo de
Hadas, participó y llegó a la final del certamen del Premio Nacional de
Dramaturgia Gerardo Macedo del Castillo, organizado por el Centro Cultural
Helénico y Tierra de Antro.
Por entrar en el rubro de
propuestas provocativas o arriesgadas su obra El Peso que en México pasó
inadvertida, en Argentina tuvo gran impacto, se dio a conocer en un ciclo de
teatro leído, porque dura 15 minutos. En el caso de Polvo de Hadas, en nuestro
país la gente la ve y no le da importancia, pero en aquella nación está puesta
en escena y en 2006 estará en Rosario.
Santillán Ortega advirtió que
hay textos innovadores, pero no quien los lleve a escena por temor, pues
también para los productores implica un riesgo. El dramaturgo ofrece problemas
al director y actores porque cambia ciertas estructuras. De ahí que este
mercado sea cerrado y sólo admite obras comerciales.
Del teatro, subrayó que el
cambio es por la dramaturgia, porque en la actualidad lo que innova es el
drama, la construcción de estructuras en este campo, la renuncia a la fábula y
a los personajes.
El galardonado concretó que lo
que está en movimiento es la palabra dramática, de manera que resulta
importante que los jóvenes estudien dramaturgia, pues si no es a través de esta
esencia no habrá renovación.
Aun cuando se utilizan
estructuras y métodos de antaño, expuso, hay un movimiento fuerte y apoyo a
esta área, pues hay un Programa Nacional de Estudios de Dramaturgia, organizado
por la Coordinación Nacional de Teatro, con el INBA, la revista Paso de Gato,
Conaculta de Querétaro y la Universidad de Michoacán.
El estudio de esta disciplina,
precisó, propicia que el alumno se percate de que no tiene la pasividad que
aparenta ni es aburrida. “Yo encuentro más interesante escribir que estar en un
escenario como actor”.
Resaltó la importancia del
Premio Nacional de Dramaturgia, por ser una forma de obtener resultados
concretos del trabajo realizado y un aliciente para escribir. Ya sólo faltaría
ver en escena la obra.
El hecho de que especialistas
lean su trabajo y lo consideren el mejor de los que intervinieron en el
certamen este año, refirió, “es bastante gratificante”, pues gente fuera de la
Universidad y de un grupo de conocidos encuentra valor en el texto.
Esto “me hace sentir que vale
la pena seguir escribiendo y trabajando en esta área”.
Consideró que la distinción también es importante porque
es el resultado de una labor realizada no sólo por él sino por otras personas,
como el profesor Fernando Martínez Monroy, quien lo ha ayudado alentándolo a
escribir y a participar en el Taller de Dramaturgia en el Colegio de Literatura
Dramática y Teatro.
Dijo que el premio es
relevante porque fue ganado por un estudiante de la UNAM, pues por lo regular
se habla de una mayor presencia de otras escuelas en esas áreas.
Así, reflexionó, habría que
replantear y repensar que una de las finalidades de este Colegio es generar
dramaturgos. El triunfo es un motor para quienes se dedican a esta disciplina y
una muestra de que se puede llegar a alcanzar un buen nivel en la misma.
Luis Santillán manifestó la necesidad de dar seguimiento
y difusión del trabajo de los egresados del Colegio. Ello, indica, propiciará
la motivación en los estudiantes de esa rama y el interés de los que apenas
ingresarán a una licenciatura.
Autopsia a un copo de nieve,
explicó, se refiere a una familia pequeña compuesta por tres personajes: la
madre Catalina, y dos hijas Natalicova y Nicoleta.
Esta obra habla sobre la
soledad de una niña de 11 años de edad, Nicoleta, el abandono en que se
encuentra y la necesidad de sentirse parte de una familia que no termina de
encontrar aún cuando la tiene.
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FOTO 01.
Luis Santillán
Ortega, estudiante de la FFyL de la UNAM, ganó el Premio Nacional de
Dramaturgia, que forma parte de los Premios Nacionales de Literatura 2005.
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Si no es a través de la esencia de la dramaturgia no habrá renovación, consideró Luis Santillán Ortega, de la FFyL de la UNAM, ganador del Premio Nacional en este campo.