Boletín UNAM-DGCS-827
Ciudad Universitaria
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final del boletín
RENDICIÓN DE CUENTAS Y TRANSPARENCIA, REQUISITOS PARA FOMENTAR LA CULTURA FISCAL EN MÉXICO
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Aseveró en la UNAM el especialista Rigoberto
Soria Romo, quien dijo que el peor defecto del actual Sistema Nacional de
Coordinación Fiscal ha sido que estados y municipios ya no intentan recaudar
ingresos
· En el IIEc explicó que existió un actor dominante, la Secretaría de Hacienda, que ahora comienza a ser cuestionada y aún rebasada por la acción de otras fuerzas
Para que los mexicanos tengan
cultura fiscal y paguen impuestos se le debe dar calidad al gasto: establecer
controles, rendición de cuentas, trasparencia y sueldos decorosos, pero no
exagerados, para los funcionarios, afirmó en la UNAM el especialista Rigoberto
Soria Romo.
En el Instituto de
Investigaciones Económicas (IIEc) de la UNAM expuso que el peor defecto del
actual Sistema Nacional de Coordinación Fiscal (SNCF) ha sido que estados y
municipios ya no recaudan ingresos propios, para no desgastarse políticamente.
Para ellos es más fácil
recurrir a la Secretaría de Hacienda para que les asigne más recursos o a la
Cámara de Diputados, a través del Programa de Apoyo a las Entidades
Federativas, que nace en el 2000 en el presupuesto de egresos, y que es la
partida que más ha crecido desde entonces.
Al dictar la conferencia La
coordinación fiscal en México –en donde estuvo acompañado por la investigadora
Irma Manrique– recordó que el SNCF surgió en un contexto de crecimiento
económico de largo plazo. México, en el siglo XX, después de la crisis de 1929,
tuvo tasas de alzas positivas. Por ejemplo, entre 1971 y 1980 fue de 6.71 por
ciento. Es decir, se tuvieron cinco décadas de alto desarrollo.
Quienes diseñaron el sistema actual, dijo
el experto, pensaron que la economía mexicana seguiría esa trayectoria, Pero a
partir de 1982 se han presentado sucesivas crisis, más profundas y de más larga
duración.
Actualmente, recalcó, en el SNCF
intervienen leyes formales –como la de Coordinación Fiscal y sus reglamentos, o
los acuerdos entre Federación y entidades– e informales, y a veces dominan
éstas últimas.
Históricamente existió un actor
dominante, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, que ha impuesto las
reglas del juego, pero ahora comienza a ser cuestionada y aún rebasada por la
acción de otras fuerzas.
Hoy, en el SNCF participan Hacienda y las
secretarias de finanzas o sus equivalentes en las 32 entidades federativas, así
como el Instituto para el Desarrollo Técnico de las Haciendas Públicas.
Las funciones del organismo, abundó el
académico de la Universidad de Occidente, Unidad Culiacán, Sinaloa, Rigoberto
Soria, son crear la política fiscal; la distribución de participaciones, la
colaboración administrativa, los gastos descentralizados y sus modalidades.
Hacienda determina qué impuestos cobrar y
qué tasas aplicar, a pesar de que las políticas que se adoptan afectan a los
recursos de las entidades. Por ello, consideró el economista, ellas deberían
participar en la elaboración de dichas directrices.
Hoy existe una multitud de actores
interesados en el tema, como el Congreso Federal, que toma decisiones
importantes sobre el asunto, o las asociaciones de municipios que presionan por
un cambio en la distribución fiscal, añadió.
Además se suman otros problemas, como la
petrolización de los ingresos públicos de la economía, el rescate bancario y
carretero, la crisis del sistema de pensiones o la deuda externa, lo cual
conforma un contexto que afecta las finanzas públicas y obliga a una modificación
permanente en el rubro, advirtió.
Soria Romo propuso la creación de dos
organismos que sustituyan a los actuales, una especie de consejo mexicano de
relaciones intergubernamentales, donde participe el presidente y los
gobernadores en el proceso de toma de decisiones, pero mediante mecanismos
formales.
Crear un instituto del federalismo, que
sea una instancia autónoma, con personalidad jurídica, presupuesto asignado
directamente por la Cámara de Diputados, una especie de órgano de Estado o de
“IFE fiscal”, sugirió.
Por último, puntualizó que en México, la
Secretaría de Hacienda le ha dejado a estados y municipios impuestos con una
base estrecha y con bajo potencial recaudador, situación que debería
modificarse.
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PIES DE FOTO
FOTO 01
El especialista
Rigoberto Soria Romo expuso en la UNAM que el peor defecto del actual Sistema
Nacional de Coordinación Fiscal ha sido que estados y municipios ya no recaudan
ingresos propios.
FOTO 02.
En el IIEc de la UNAM, el
especialista Rigoberto Soria Romo señaló que pese a que las políticas fiscales
afectan los recursos de las entidades, éstas no participan en su elaboración.
Lo acompaña la universitaria Irma Manrique.