06:00 hrs.  22 de Septiembre de 2005

 

 

Boletín UNAM-DGCS-731

Ciudad Universitaria 

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PRIORITARIOS,  LOS SEGMENTOS EXPORTADORES VINCULADOS A TRANSNACIONALES

 

·        En detrimento del campo mexicano, reveló el secretario técnico del Consejo de Planeación de la UNAM, Armando Labra

·        El Instituto de Investigaciones Económicas y la Facultad de Economía organizaron actividades en homenaje al maestro José Luis Ceceña

·        En ella participaron también el ex rector Pablo González Casanova; Jorge Basave Kunhardt, director del IIEc;  Rolando Cordera, de la FE y miembro de la Junta de Gobierno; y Ana Esther Ceceña, entre otros

 

El campo mexicano no ha sido una prioridad, sino los segmentos exportadores vinculados a las empresas transnacionales agropecuarias; el resto, la mayoría de los productores, son apreciados como un componente marginal que debe someterse a los avatares del libre mercado, consideró Armando Labra Manjarrez, secretario técnico del Consejo de Planeación de la UNAM.

 

El funcionario participó en uno de los homenajes a José Luis Ceceña, organizado por el Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc) y la Facultad de Economía (FE), junto con el ex rector Pablo González Casanova, quien indicó que este personaje siempre tuvo y tiene una actitud crítica, reflexiva y abierta al pensamiento de los demás.

 

 

“No recuerdo que haya enjuiciado de una manera agresiva, dogmática, ortodoxa, cualquier afirmación. La amistad con él era compartida por una gran cantidad de discípulos y condiscípulos, y representa toda una historia de una vida intelectual y universitaria”, recalcó González Casanova.

 

Expuso que José Luis Ceceña desempeñaba un importante papel de liderazgo en la FE. Desde entonces, la relación intelectual fue uno de los puntos clave para hacer rico y placentero el tiempo que pasó en ella. Era una época distinta a la actual desde el punto de vista ideológico, en la que el pensamiento marxista se exponía a veces de manera rígida, incluso como si fuera el de una secta. “Nuestra forma de dialogar, hablar y legitimar lo que estábamos diciendo solía caer en graves actitudes dogmáticas”, agregó.

 

Al retomar su exposición en la Mesa 2005: México en la órbita imperial en homenaje al maestro José Luis Ceceña, Armando Labra advirtió que las políticas macroeconómicas de ajuste y estabilización, combinadas con las reformas neoliberales impulsadas en México en las últimas tres décadas, tuvieron consecuencias devastadoras para este ramo.

 

Informó que entre 1982 y 2004 el Producto Interno Bruto (PIB) del sector agropecuario creció 38 por ciento y la población nacional en 50. Mientras la economía avanzó a una tasa anual media de 2.4, el producto en este campo lo hizo a razón de 1.5 por ciento, por lo que su participación en el PIB del país se redujo de 6.3 a 5.3 por ciento.

 

En el auditorio “Maestro Ricardo Torres Gaitán” comentó que el saldo de su balanza pasó de un superávit de 131 mil millones de dólares en 1982 a un déficit de 980 millones en 2004.

 

Al referirse al homenajeado, Armando Labra refirió que desde hace casi medio siglo el maestro José Luis Ceceña ha sido no sólo enfático sino insistente en sus diversos trabajos, sobre los grandes riesgos de insistir en políticas que subordinan el crecimiento económico nacional a las decisiones tomadas en la cúpula de las empresas transnacionales y de los gobiernos imperialistas.

 

Sus argumentos, como los de muchos otros mexicanos lúcidos y visionarios, fueron y son desoídos por quienes tienen la obligación de atenderlos. “Hoy las consecuencias de este pernicioso autismo están a la vista: México se encuentra subordinado no a la economía global”, sino a la hegemonía de Estados Unidos, recalcó.

 

Las reformas impulsadas en el sector agropecuario a partir de los 80 han sido eficaces en el propósito de construir una senda de dependencia exacerbada, aparentemente irreversible. Según la CEPAL, reveló, 51 por ciento de los mexicanos que radica en localidades rurales vive por debajo de la línea de pobreza, y 21 subsiste bajo indigencia o pobreza extrema.

 

Por su parte, Jorge Basave Kunhardt, director del IIEc, destacó que la mejor forma de hacer presente la obra del maestro José Luis Ceceña es mediante la discusión sobre los temas de actualidad que en su momento él inició.

 

Recordó en esta mesa, donde también intervinieron Raúl Ornelas, Jaime Estay, Carlos Morera e Irma Manrique, que colaboró en un texto sobre los aportes de este economista, en un ejercicio por relacionar los estudios del universitario con lo que sucede en la actualidad.

 

Al participar en la mesa redonda Regla monetaria, inflación y crecimiento en México en la FE, Rolando Cordera, miembro de la Junta de Gobierno, señaló que la economía no es una ciencia exacta; está cruzada, entre otros, por factores de poder, que tiene que ver con las ambiciones y voluntades de los hombres, que suelen alterar cualquier pretensión de establecer relaciones lineales de causalidad entre una vertiente y otra del quehacer financiero.

 

Abundó –acompañado por el director de esa entidad, Roberto I. Escalante Semerena– que de la globalización emana un postulado fundamental que es la convergencia inevitable de políticas y estructuras. Incluso en materia de directrices monetarias se pone en cuestión esta tesis que hasta hace poco era vista como “ley de hierro”.

 

 

 

En México se podrían discutir esos paradigmas, que para muchos se convirtieron en “credo” y que han llevado a un crecimiento lento. Lo anterior a pesar de mejores condiciones para aprovechar la globalización y entrar en una nueva senda de desarrollo. Así, dijo, las disposiciones pueden utilizarse para discutir la aseveración anterior.

 

A la luz de lo ocurrido y de las claras disonancias entre los conductores de la ruta económica, es decir, de la política monetaria y fiscal, se abre una posibilidad de reflexión crítica y política en torno al tema. De ahí que deba insistirse en que este rubro vuelva a convertirse en un tema políticamente central, explicó.

 

En su oportunidad, Ana Esther Ceceña, del mismo Instituto e hija del homenajeado, advirtió que se vive en un momento de gran despliegue y redefinición de las líneas fundamentales de ordenamiento y funcionamiento de esta sociedad global.

 

No es sólo el mundo occidental, sino que se ha incorporado el planeta entero a estas políticas y estrategias que se diseñan en Estados Unidos, para garantizar que esa nación cumpla su misión y su ejército sea capaz de imponer las razones de su democracia, sentenció.

 

En el marco de estas celebraciones, María Eugenia Romero, de la FE, detalló que no hay nada más pertinente y actual que los aportes de José Luis Ceceña. Su obra y reflexiones se inscriben “en el pensamiento marxista que surgió en la década de los años treinta, y que dejó sentir su influencia en los sesenta y setenta del siglo XX”.

 

Para el homenajeado, añadió, el problema histórico de México ha sido su dependencia respecto a las grandes potencias capitalistas, que han determinado el grado de desarrollo alcanzado y sus modalidades.

 

Los factores internos han jugado su papel, pero en términos generales han sido incapaces de contrarrestar la acción de las influencias externas, aunque en la mayoría de los casos los elementos internos representados por las fuerzas dominantes nacionales, han propiciado la acción de los poderes imperiales, por así convenir a los intereses de ciertos grupos de la oligarquía, expresó.

 

Por último, Ignacio Perrotini, de la FE, rememoró que en México entre 1987 y 1994 se siguió una regla monetaria de tipo de cambio fijo. Después ocurrió la crisis de 1994 y un año después se abandonó ese régimen; hubo una transición al flexible. Desde el 2001 prevalece una regla monetaria de inflación objetivo.

 

Finalizó que la política financiera del Banco de México mira hacia delante. Así, la flotación absorbe choques exógenos. Hay un debate al respecto, pero gana popularidad en América Latina la hipótesis de que el régimen flexible es la panacea para la estabilidad en la balanza de pagos, aunque debe ponerse en duda esa aseveración, concluyó.

 

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FOTO 01.

 

Pablo González Casanova, Jorge Basave y José Luis Ceceña durante uno de los homenajes que el Instituto de Investigaciones Económicas  y la Facultad de Economía de la UNAM le rindieron a este último.

 

 

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Pablo González Casanova y José Luis Ceceña, previo a su participación en la Mesa 2005: México en la órbita imperial en homenaje al maestro José Luis Ceceña, en la UNAM.

 

 

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Pablo González Casanova, Armando Labra y Esther Ceceña, durante uno de los homenajes que el IIEc y la FE de la UNAM le rindieron al profesor José Luis Ceceña.

 

 

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José Luis Ceceña, Rolando Cordera y Roberto Escalante previo a su participación en la mesa redonda Regla monetaria, inflación y crecimiento en México en la Facultad de Economía de la UNAM.

 

 

FOTO 05

 

María Eugenia Romero, José Luis Ceceña, Roberto Escalante, Rolando Cordera e Ignacio Perrotini, durante uno de los homenajes al segundo, organizado por entidades de la UNAM.