06:00 hrs.  20 de Septiembre de 2005

 

 

Boletín UNAM-DGCS-726

Ciudad Universitaria 

Pie de fotos al final del boletín

 

 

CONTRIBUYE LA UNAM EN EL AVANCE DE UN PAÍS CON EQUIDAD E IGUALDAD ENTRE HOMBRES Y MUJERES

 

·        Rosaura Ruiz, secretaria de Desarrollo Institucional, dijo que ello es parte integral de la reforma universitaria en todos sus niveles

·        Marcela Lagarde, académica universitaria y diputada, planteó la necesidad de crear mecanismos para el cumplimiento de lo que se propone en los ordenamientos

·        Se inauguró el Segundo Foro Qué país queremos las académicas feministas: perspectivas y propuestas

 

La Universidad Nacional contribuye en el avance de un México con equidad e igualdad de prerrogativas entre hombres y mujeres, porque es parte integral de la reforma universitaria en todos sus niveles, reconoció Rosaura Ruiz Gutiérrez, secretaria de Desarrollo Institucional.

 

Aseguró que con pasos como la modificación de sus relaciones y estructuras con perspectiva de género la Universidad se fortalece. “Sólo este ejercicio y su práctica eficaz permitirán cimentar, desde la academia, el país que las feministas imaginamos. No olvidemos que la UNAM ha jugado un papel protagónico en momentos decisivos para la definición del rumbo nacional”.

 

Al inaugurar el Segundo Foro Qué país queremos las académicas feministas: perspectivas y propuestas, organizado por el Colegio de Académicas Universitarias (CAU), dijo que el trabajo intelectual, analítico, creativo e innovador constituye el ámbito desde el cual se propician las transformaciones decisivas de la sociedad.

 

Pero los cambios que se precisan no se limitan al saber que los fundamenta, deben extenderse también a las relaciones, normas y estructuras en función de las cuales se crea y transmite el conocimiento. “Nuestra Universidad contribuye a hacer realidad tan indispensables cambios”.

 

En el auditorio “Mario de la Cueva”, Ruiz Gutiérrez recordó que el Consejo Universitario aprobó, por unanimidad en abril de este año, la reforma al Estatuto General con la adición de un párrafo al artículo segundo, que establece, de manera explícita, que en todos los casos las mujeres y los hombres en la UNAM gozarán de los mismos derechos, obligaciones y prerrogativas reconocidas y garantizadas por las normas y disposiciones que integran la legislación universitaria.

 

Para tal efecto, el Consejo admitió la creación de una comisión de seguimiento a las reformas de equidad de género de nuestra casa de estudios. Desde entonces, este órgano, coordinado por la directora del Programa Universitario de Estudios de Género, Marisa Belausteguigoitia, ha dado pasos significativos en este sentido, agregó.

 

Entre otras actividades, dijo que la Comisión se ha concentrado en la revisión de los diversos estatutos y reglamentos generales de la UNAM, velando porque sus reformas sean realizadas con perspectiva de género.

 

Entre las observaciones de la Comisión a las reformas al Reglamento General de Estudios de Posgrado, se sugiere que éste garantice en todas sus normas que no se produzca discriminación alguna por razón de sexo, nacionalidad, raza, religión, opinión o cualquier otra circunstancias personal o social, y propone que en éste, como en otros reglamentos, se emplee un lenguaje incluyente que haga visibles a hombres y mujeres, expresó.

 

También plantea que los planes de estudio incluyan los mecanismos que aseguren la participación equitativa de ambos sexos en todos ellos, y observa la necesidad de que tanto los tiempos curriculares como los procedimientos para la obtención de becas y estímulos contemplen, asimismo, puntualizó, la especificidad de género.

 

En ese sentido, la académica universitaria y diputada de la actual legislatura, Marcela Lagarde y de los Ríos, sostuvo que además de incorporar en las normas este tipo de propuestas, “tenemos que crear mecanismos para el cumplimiento de lo que proponemos en dichos ordenamientos”.

 

Por ello, arguyó, es necesario que los derechos plasmados en las leyes y las disposiciones sean exigibles por los sujetos, las ciudadanas y los ciudadanos, en la Universidad; es decir, hacer exigible el derecho a la equidad y la igualdad que proclama el Estatuto.

 

Hay que impulsar una reforma académica para lograr que las licenciaturas en la Universidad contengan, como estructura o columna vertebral, una visión científica sobre el mundo desde la perspectiva de género, resaltó.

 

La también secretaria de Organización del CAU señaló que ante la coyuntura que vive el país, sería importante que “las feministas estuviéramos presentes en el debate nacional que está iniciando y que tiene las pautas sobre lo que quieren decir, desde los partidos políticos, los distintos candidatos que representan intereses particulares, definidos, ideológicos y políticos”.

 

Es urgente para este grupo, “proponernos un camino de intervención e interlocución política con todos y todas como polo discursivo distinto, como fuente que nutra las opciones que tienen nuestras compañeras dentro de sus partidos políticos y que haya un intercambio en ese sentido”, aseveró.

 

Insistió en que las feministas en México han contribuido a la transformación del país, y eso es uno de sus rasgos de identidad. Las académicas de la UNAM deben proponerse la divulgación y formación en derechos humanos de todas las universitarias.

 

En su oportunidad, Olga Bustos, presidenta del CAU y académica de la Facultad de Psicología, recordó que el Colegio se fundó para formalizar la vinculación de todas las académicas comprometidas con la incorporación del enfoque de equidad de género dentro de la UNAM.

 

Lo conforman profesoras, investigadoras, técnicas académicas y ayudantes de investigación que integran la comunidad de la UNAM y que pertenecen a las diferentes áreas del conocimiento. Se aspira a una plena democratización de la institución y de la sociedad, mediante la creación de espacios de organización académica, para fomentar la investigación, docencia, difusión del saber y cultura desde una perspectiva feminista, expuso.

 

Además, se busca diseñar estrategias que logren transformar a la sociedad, sobre la base de la equidad de género en cada espacio académico laboral, partiendo del reconocimiento y ejercicio de los derechos humanos de las mujeres, así como la vigencia efectiva de todas las libertades previstas en la Constitución y los demás ordenamientos jurídicos que de ella emanan, concluyó.

 

 

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Foto 01.

Norma Blázquez, Rosaura Ruiz, Olga Bustos y Marcela Lagarde, en la inauguración del Foro “Qué país queremos las académicas feministas: perspectivas y propuestas”.

 

Foto 02

La reforma al Estatuto General de la UNAM establece que los hombres y las mujeres de esta institución gozarán de los mismos derechos y obligaciones establecidas en la legislación universitaria.