Boletín UNAM-DGCS-627
Ciudad Universitaria
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final del boletín
OTORGA CONGRESO
CHIAPANECO LA MEDALLA “ROSARIO CASTELLANOS” AL POETA RUBÉN BONIFAZ NUÑO
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El investigador emérito de la UNAM se hizo
acreedor a esta distinción por su contribución al enriquecimiento de la cultura
mexicana
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La presea, que se entregará por primera vez, es
la máxima distinción que concede el Congreso de ese Estado
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Quien fuera director general de Publicaciones,
coordinador de Humanidades y fundador del Instituto de Investigaciones
Filológicas de la Universidad, recordó su estrecha amistad con la escritora
chiapaneca
El Congreso del Estado de Chiapas entregará la “Medalla
Rosario Castellanos” al distinguido poeta
e investigador emérito de la UNAM Rubén Bonifaz Nuño, cuya visión universal
ha contribuido al enriquecimiento de la cultura mexicana. En sesión ordinaria y
por unanimidad, los diputados integrantes de la Sexagésima Segunda Legislatura
acordaron otorgarle este reconocimiento.
La presea, que se entregará
por primera vez, es la máxima distinción que concede el Congreso del Estado,
fue instituida para premiar a los hombres y mujeres de nacionalidad mexicana,
por sus aportaciones al desarrollo de la ciencia, arte o virtud en grado eminente,
como servidores del Estado, la patria o la humanidad.
En la oficina del
universitario, ubicada en la planta alta de la Biblioteca Central de la UNAM, los
diputados Roberto Domínguez Castellanos, presidente de la Junta de Coordinación
Política de la LXII Legislatura del H. Congreso del Estado de Chiapas; Flor de
María Coello Trejo, miembro de la Comisión Medalla “Rosario Castellanos”, y Carlos
Raymundo Toledo, presidente de la misma, le entregaron la carta de notificación
del premio.
Raymundo Toledo le expresó que
esta Medalla se le confiere en reconocimiento de su noble y tenaz trabajo
intelectual, que comprende más de una disciplina y ha contribuido al
conocimiento de diversas generaciones de mexicanos.
La aportación del
universitario, abundó, tanto en la creación como en la ciencia, ha permitido
que en quienes acceden a su creación se logre el mayor logro literario:
conmover, deleitar e instruir al ser humano. Su trabajo de traducción ha
permitido el contacto de un inconmensurable número de jóvenes con otras
visiones, formaciones, filosofías y concepciones literarias.
Su condecoración, abundó,
honra de manera ejemplar a la memoria de Rosario Castellanos, una de nuestras
glorias literarias chiapanecas.
Esta Medalla pretende ser el
reconocimiento de todos los chiapanecos hacia el quehacer literario,
científico, cultural de mexicanos que se distingan por su aportación no sólo al
estado, sino a México, o a nivel internacional, agregó.
Para el poeta universitario,
recibir este honor tiene un gran significado, no sólo porque lleva el nombre de
Rosario Castellanos y es la primera ocasión que se concede, sino porque lo
otorga el estado de Chiapas, “lugar de nacimiento de mi padre”.
“Me trae muchos recuerdos, porque
mi infancia transcurrió en una casa que tenía mucho de chiapaneca, por mi
padre, y mi madre que vivió ahí su juventud. En ese lugar se conocieron y se
casaron”, reveló quien fuera director general de Publicaciones, coordinador de
Humanidades y fundador del Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM.
En su oficina, Bonifaz Nuño
habló de la situación de las etnias en el sureste del país: “Mis padres me
enseñaron que éramos indios, de tal manera que el problema indígena en Chiapas
me duele profundamente, porque es uno de los lugares donde somos más
discriminados, más pobres, estamos más aislados y nos quieren mantener en la
ignorancia”.
Enfático, aseguró que la única
solución a esa problemática es la educación, “que los indios aprendamos a leer
y escribir, si se puede en varios idiomas, para que no nos estén diciendo que
necesitamos un traductor en los juzgados, como si fuera un favor que nos
hacen”.
Autor de obras como La muerte del ángel, Los presentes,
Ofrecimiento romántico, Imágenes, Los demonios y los días, y El manto y la
corona, dijo tener recuerdos de todo tipo de Rosario Castellanos, “fuimos
muy amigos”. En una ocasión, “me enseño en manuscrito su poema Lamentación de
Dido, que hizo, en cierta forma, del texto de la Eneida que yo había
traducido”.
También platicó cuando siendo
compañeros de trabajo en la Universidad Nacional, bajo el rectorado de Ignacio
Chávez, ella como directora de Información y Bonifaz Nuño de Publicaciones, la
escritora inventó el lema “todo está bien, menos Rubén”.
La relación entre ambos
escritores fue extensa, como la producción literaria del maestro veracruzano.
Los lazos de amistad comenzaron en 1943 y culminaron poco tiempo antes de que
la autora de Oficio de tinieblas viajara a Israel para ocupar el cargo de
embajadora de México, allá por 1971, del que ya no regresaría.
Ganador de múltiples premios
como el Internacional Alfonso Reyes, Nacional de Letras, Jorge Cuesta y Francisco Javier Clavijero, Rubén
Bonifaz subrayó que le gusta más la Rosario Castellanos poetisa, “es
verdaderamente excepcional, es una escritora de genio”, cuya prosa se destaca,
sobre todo, por su interés en la situación social de México.
Bonifaz Nuño recibirá la Medalla
“Rosario Castellanos” del gobernador de Chiapas, Pablo Salazar Mendiguchía, en
sesión solemne del Congreso del Estado, el próximo 25 de agosto.
La Comisión Medalla “Rosario
Castellanos” en la LXII Legislatura, está compuesta por todos los coordinadores
de los grupos parlamentarios; para ello se asesoró con gente de la intelectualidad
chiapaneca, y del mismo Consejo Nacional para la Cultura y las Artes de
Chiapas.
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El destacado
poeta de la UNAM Rubén Bonifaz Nuño recibirá la Medalla “Rosario Castellanos”,
máxima distinción que otorga el Congreso del Estado de Chiapas.
Diputados del Estado de Chiapas notificaron al poeta universitario
Rubén Bonifaz el otorgamiento de la Medalla “Rosario Castellanos”, por su
contribución al enriquecimiento de la cultura mexicana.