06:00 hrs.  26 de Julio de 2005

 

 

Boletín UNAM-DGCS-568

Ciudad Universitaria

 

Pies de foto al final del boletín

 

SE REQUIERE TENER EL REGISTRO ACTUALIZADO DEL TRANSPORTE DE CARGA METROPOLITANO

 

·        Angélica Lozano, académica del Instituto de Ingeniería de la UNAM, indicó que personal de la institución elaboró el proyecto Estudio Integral Metropolitano de Transporte de Carga y Medio Ambiente para el Valle de México

·        Servirá para proponer estrategias que contribuyan a la disminución del impacto sobre el entorno de este sistema de transportación, informó

 

 

 

Ante la necesidad de contar con el registro de vehículos de carga de la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM), profesores y estudiantes del Instituto de Ingeniería (II) de la UNAM elaboraron el proyecto Estudio Integral Metropolitano de Transporte de Carga y Medio Ambiente para el Valle de México (EIMTCA-MAVM).

 

El objetivo principal es contar con un banco de información sistematizado sobre la movilidad e infraestructura del equipamiento, oferta y demanda en la zona de este tipo de transporte, el mapa de circulación y tipo de artículos que transportan, señaló Angélica Lozano, académica del II de la UNAM.

 

Ello servirá de base para proponer estrategias que contribuyan a la disminución del impacto sobre el entorno de este sistema de transportación, para hacerlo más competitivo en términos de circulación, explicó.

 

Según datos de la Secretaría de Transportes y Vialidad del Gobierno del DF, hasta 2003 en un día promedio transitaban alrededor de 3 millones 200 mil automotores en la Ciudad de México; de éstos, un millón 900 mil eran particulares; con los de carga, pasajeros y servicios, sumaron 2.4 millones, y el resto entraban y salían de los municipios conurbados.

 

La movilización de más de 390 millones de toneladas anuales de insumos y productos, fue trasladada por un parque cercano a los 436 mil vehículos, de los cuales 80 por ciento correspondió a unidades de transporte urbano de carga mercantil, 15 por ciento al servicio federal –público y privado–, y el resto a unidades registradas en el transporte público urbano de carga.

 

En cuanto a los orígenes-destino de las mercancías, se estimó que de poco más de 44 mil establecimientos industriales ubicados en la zona metropolitana, 63 por ciento se concentró en el Distrito Federal –en especial en las delegaciones Iztapalapa, Cuauhtémoc, Gustavo A. Madero y Azcapotzalco– y el resto en los municipios conurbados del Estado de México –como Ecatepec, Nezahualcóyotl, Naucalpan y Tlalnepantla–.

 

La investigadora del Laboratorio de Transporte y Sistemas Territoriales del II informó que este trabajo es necesario por dos razones. La primera es que la circulación inadecuada de vehículos pesados en áreas urbanas contribuye a agravar problemas de congestionamiento, contaminación del aire y ruido, y a elevar los costos logísticos y, por ende, los precios de los productos. Además, se incrementa el riesgo de accidentes. La segunda es que su planificación se enfrenta a la falta de información necesaria para elaborar instrumentos adecuados.

 

A decir de la responsable del proyecto, “se invierte mucho dinero en estructuras para el transporte de carga, principalmente en soportes logísticos de plataforma”. Por lo general se colocan en lugares en un principio deshabitados, pero en un plazo corto, un gran número de personas se instala en los alrededores, sin dejar reservas de espacio.

 

 

 

A esto se suma que cuando los camiones intentan salir de esas zonas, se encuentran con calles cerradas, topes, mercados ambulantes y diferentes obstáculos. Además, los vecinos se quejan de que los camiones hacen mucho ruido y contaminan.

 

La académica destacó que el proyecto fue desarrollado ante las actuales problemáticas de este sistema, pues no se conoce su distribución espacial ni las características de los vehículos utilizados, ni la carga que transportan o la infraestructura utilizada. Sin tal información pueden hacerse planes a corto plazo, pero no es posible hacer una planificación seria a mediano y largo plazos.

 

Así, los resultados de este estudio independiente realizado para la Comisión Ambiental Metropolitana (CAM), permitirán generar un panorama reciente y confiable sobre el transporte de carga y sus servicios. Además de establecer un conjunto de estrategias y acciones que contribuyan a minimizar sus costos ambientales, económicos y sociales, puntualizó.

 

Dichos planteamientos se orientarán a la gestión del flujo vehicular y de la demanda misma, de tal manera que contribuyan a la minimización de daños al entorno, impulsar el desarrollo económico de esta región (haciéndola más competitiva en términos logísticos y de ordenamiento territorial), y a su propia eficiencia, apuntó.

 

La información generada, además de ser esencial para la planeación, infraestructura y medio natural en la ZMVM (que incluye las 16 Delegaciones del Distrito Federal y 34 municipios del Estado de México, además de dependencias del gobierno federal), será de gran utilidad para la determinación de emisiones producidas por vehículos de carga, dijo.

 

Por último, recordó que el EIMTCA-MAVM –iniciado en 2003– está integrado por subproyectos en las siguientes áreas: Identificación de la Oferta y la Demanda del Transporte de Carga en la ZMVM; Estudio Matriz Origen‑Destino para el Transporte de Carga; Corredores Metropolitanos de Transporte de Carga; Desarrollo de Soportes Logísticos de Plataforma; y Sistema de Información Geográfica para el Transporte de Carga.

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FOTO 01.

Es necesario sistematizar y analizar la información sobre la oferta y demanda del transporte de carga en la zona metropolitana, señaló Angélica Lozano, del Instituto de Ingeniería de la UNAM.

 

FOTO 02

La investigadora Angélica Lozano apuntó que la circulación inadecuada de vehículos de carga en la urbe, contribuye a agravar problemas de congestionamiento, contaminación del aire y ruido.