Boletín UNAM-DGCS-564
Ciudad Universitaria
Pies de foto al
final del boletín
POBREZA Y DISCRIMINACIÓN AFECTAN A TRABAJADORES MEXICANOS QUE VIVEN EN NAPA Y SONOMA, CALIFORNIA
·
Cubren largas jornadas de trabajo, con tensión y estrés por conservar la
fuente laboral, revela Martha Judith Sánchez Gómez, del Instituto de
Investigaciones Sociales de la UNAM
·
El mayor problema es la discriminación, pero también dificultades para
conseguir vivienda, están expuestos por no contar con documentación legal, y
tienen barreras de comunicación y alta competencia, señaló
Los mexicanos que trabajan en
las faenas agrícolas de los condados de Napa y Sonoma, California, Estados
Unidos, padecen severas condiciones de pobreza, discriminación y vulnerabilidad
social, afirmó la académica del Instituto de Investigaciones Sociales (IIS) de
la UNAM, Martha Judith Sánchez Gómez.
A pesar de obtener los mejores
ingresos que ofrece dicha actividad en ese estado de la Unión Americana, las
familias migrantes de la zona viven por debajo de la línea de la pobreza
establecidas en esa nación. Mientras los padres realizan largas jornadas de
trabajo con fuerte presión y estrés por tratar de conservar su empleo y se suma
la falta de prestaciones, añadió.
El mayor problema que
enfrentan los connacionales, explicó, es la discriminación, pero también
reportan dificultades para conseguir vivienda, están expuestos por no contar
con documentación legal para su estancia, tienen barreras de comunicación por
el idioma y alta competencia, aspectos comunes de los connacionales que habitan
en esa región, famosa por su producción de vinos.
Sánchez Gómez abundó que si un
jornalero opta por trasladar a su esposa e hijos de México hacia esta zona de
agroturismo, no tiene capacidad de ahorro, ante las altas erogaciones por
concepto de renta y manutención diaria, así como los que puede implicar la
enfermedad de uno de sus miembros.
Sin embargo, aclaró que su
situación tiene “claroscuros”; es decir, aspectos tanto negativos como
positivos. Por ejemplo, si estos grupos se integrasen a una red de apoyo,
lograrían economizar aún con sus empleos precarios; otra ventaja es que pueden
residir en barrios poco conflictivos, sin problemas de inseguridad ni
drogadicción. Si bien son pobres, logran dar a sus hijos una alimentación que
incluye leche, carne y huevos, cuando en México no tenían acceso a ello.
La mayoría de los agricultores son hombres jóvenes con bajos niveles
de escolaridad, mientras que tan sólo diez por ciento son mujeres, debido a que
ellas prefieren contratarse como recamareras en los hoteles, trabajadoras
domésticas, o para realizar labores de limpieza en restaurantes cercanos,
indicó.
Un 3.2 por ciento no cuenta
con escolaridad; 66.6 por ciento tiene como máximo seis años de estudios, pero
en algunas cuadrillas de injertadores de uva hay profesionistas que trabajan en
la zona de uno a tres meses del año y el resto ejercen su profesión en México,
reveló.
De acuerdo con la especialista
en temas migratorios, los trabajadores provienen de 20 estados de la república
mexicana y dos de la Unión Americana, estos últimos son hijos de mexicanos que
nacieron en ese suelo, debido al traslado de sus padres. Principalmente,
figuran los estados de Michoacán, con 47.2 por ciento; Jalisco, 15.1; Oaxaca,
11.9; Guanajuato, 7.5; y Zacatecas, 5.6 por ciento.
Hay tres tipos de flujos en la
zona: los ya establecidos con su grupo nuclear, denominados permanentes, y que
constituyen 61.6 por ciento. Por otro lado, hay agricultores que concurren a
estos condados durante algunos meses
del año, principalmente para la cosecha y la poda. Estos son pendulares y
representan 29.8 por ciento, abundó.
Otro grupo acude sólo en la época pico de empleo, sólo en
siega, y representa 8.5 por ciento. Son quienes participan en los flujos
migratorios circulantes, agregó. Estos últimos son los más vulnerables, con
menores posibilidades de acceso a redes de apoyo. Conlleva riesgos en cuanto a
posibilidad de conseguir vivienda, por lo que pueden verse en la necesidad de
pernoctar debajo de puentes, cerca de ríos o en parques.
Un dato relevante es que
provienen de los tres estados tradicionales de expulsión: Jalisco, Michoacán y
Zacatecas, lo que indica que los pueblos y localidades tienen distintas
experiencias de traslado y son los municipios que se incorporan más tardíamente
a los componentes de este sector, señaló Sánchez Gómez.
Los que tienen mayor
conocimiento y contactos en la zona participan en un flujo pendular y viajan de
forma constante de México a Estados Unidos durante un cierto número de meses al
año. No obstante, concluyó que 47.7 por ciento pensó en iniciar un negocio
propio o comprar tierras en nuestro país. No obstante, la mayoría vislumbra
soluciones en Norteamérica y pocos en su país de origen.
-o0o-
FOTO F06 portal
A pesar de
obtener los mejores ingresos que ofrece la agricultura de California, los
migrantes de los condados de Napa y Sonoma viven por debajo de la línea de la
pobreza, aseguró la académica de la UNAM Martha Judith Sánchez Gómez.
FOTO F08
El mayor problema
que enfrentan los connacionales en los condados de Napa y Sonoma, California,
Estados Unidos, es la discriminación, aseveró la académica de la UNAM, Martha
Judith Sánchez Gómez.