Boletín UNAM-DGCS-463
Ciudad Universitaria
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final del boletín
INDISPENSABLE, LA FÍSICA PARA DIAGNOSTICAR Y COMBATIR EL
CÁNCER
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Reconoció María Ester Brandan, miembro del
Instituto de Física y responsable de las actividades académicas de la Maestría
en Ciencias (Física Médica) de la UNAM
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Esta disciplina permite conocer la anatomía
de los órganos dentro del cuerpo humano, y su función o metabolismo, sin
técnicas invasivas, refirió
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Participó en las celebraciones por el Año
Internacional de la Física 2005, en el Teatro del Museo de las Ciencias
Universum
Los principios de la Física
son útiles para diagnosticar y combatir enfermedades como el cáncer,
padecimiento complejo y multicausal que provoca entre 10 y 15 por ciento de las
muertes en todo el mundo, reconoció María Ester Brandan, miembro del Instituto
de Física (IF) y responsable de las actividades académicas de la Maestría en
Ciencias (Física Médica) de la UNAM.
En el marco de las
celebraciones por el Año Internacional de la Física 2005, en el Teatro del
Museo de las Ciencias Universum, la especialista aseveró que dentro de un
hospital esta disciplina permite no sólo conocer la anatomía de los órganos
dentro del cuerpo humano, sino su función o metabolismo, sin necesidad de
utilizar técnicas invasivas (como las cirugías); es decir, se obtiene
información "sin bisturí, sangre o pinchazos".
Recordó que para curar las
neoplasias existen tres posibles tratamientos: cirugía, con la extracción del
tumor; quimioterapia, con la inyección de drogas que circulan por el cuerpo y
atacan a las células cancerígenas; y radioterapia, mediante radiaciones.
Para esta última se emplean
aceleradores de partículas, con capacidad de girar alrededor del cuerpo del
paciente. Tiene pequeñas compuertas o colimadores, que abren o cierran de
acuerdo con el volumen a irradiar, de forma que los haces recaen exactamente
sobre el tumor, explicó.
Para no dañar tejidos sanos,
la estrategia es simple: en vez de emitir la dosis en un solo sentido, se le
divide, de forma que la parte afectada es erradicada desde distintas
direcciones, añadió.
Asimismo, informó, existe una
técnica conocida como radiocirugía, basada en un instrumento que angosta las
ondas y apunta a la neoplasia en zonas determinadas. Así, el material sano
recibe menos afectación y sobrevive en mejores condiciones.
También es útil el
"cuchillo gamma" para tratar el cáncer en cabeza. Al enfermo se le
coloca un casco con 201 fuentes radioactivas. Los colimadores ajustan con
exactitud el volumen irradiado a la forma de la afectación, dijo.
Los casos más comunes en
México son cervicouterinos. Una mujer muere cada hora por esa causa. Uno de los
tratamientos es la radioterapia con una variante: insertar su fuente al
interior del organismo, de modo que actúa de manera fuerte y el tejido sano se
afecta menos. Se trata de la braquiterapia, también usada para próstata,
especificó.
Sean radiografías o medicina nuclear, la potencia
empleada para obtener imágenes de diagnóstico es en dosis bajas. Por el
contrario, para uso terapéutico, requiere cantidades elevadas, de forma que las
células tumorales mueran. En ambos casos, el tratamiento debe estar justificado
y apegarse a la reglamentación donde el beneficio supera al riesgo, aclaró.
La también investigadora
nacional reiteró que en un centro médico los gráficos se obtienen con base en
métodos físicos. Unos, por ejemplo, se producen cuando se emite sonido de alta
frecuencia desde el exterior del cuerpo. Con ellos se consigue la vista de un
feto sin necesidad de abrir el vientre de la madre, introducir una cámara ni
usar procesos que podrían dañar las células del producto.
El resto, señaló, utilizan
radiaciones llamadas ionizantes. Se hace referencia a energía en movimiento,
que se traslada de un lugar a otro, transportada por ondas. En aplicaciones
medicinales se requiere que tengan suficiente fuerza para penetrar y modificar
al medio pues, por ejemplo, las partículas de la luz visible no tienen
capacidad de invadir más allá de la piel.
De tal suerte, los rayos X y
los haces emitidos por núcleos radioactivos se usan para diagnosticar
enfermedades o tratarlas. Las radiografías, sostuvo María Ester Brandan, son el
uso más generalizado de una técnica originada en un laboratorio de Física.
Son imágenes planas de alguna
parte del organismo, obtenidas cuando se hacen pasar rayos de alta potencia,
que atraviesan el cuerpo y proyectan una sombra sobre una placa, similar a una
película fotográfica, abundó.
Hoy día, además de médicos,
enfermeras y técnicos, se requiere la presencia de los físicos en los hospitales
modernos. De ahí que en la UNAM, desde
1997, exista la Maestría en Física Médica, que especializa a físicos o
ingenieros para dar ese servicio o realizar investigación en el área, la de
mayor crecimiento de la física actual, concluyó.
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FOTO 01.
Dentro de un
hospital la Física permite no sólo conocer la anatomía de los órganos dentro
del cuerpo humano, sino su función o metabolismo, sin necesidad de utilizar
técnicas invasivas, reconocieron especialistas de la UNAM.
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María Ester
Brandan, miembro del Instituto de Física de la UNAM, reconoció que los
principios de la Física son útiles para diagnosticar y combatir enfermedades
como el cáncer.