Boletín UNAM-DGCS-419
Ciudad Universitaria
Pies de foto al final del boletín
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El rector de la UNAM dijo que en la
enseñanza no deben haber barreras ideológicas, étnicas, religiosas o
económicas; las únicas aceptadas son las académicas
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Santiago Creel, secretario de Gobernación,
afirmó que la UNAM es la principal institución de educación superior del país y
gran impulsora del cambio democrático en México
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En el XX aniversario de la creación de la
Defensoría de los Derechos Universitarios, el presidente de la CDHDF, Emilio
Álvarez Icaza calificó a la Universidad Nacional como la columna vertebral del
progreso nacional
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Leoncio Lara Sáenz, titular de la Defensoría
de los Derechos Universitarios resaltó el impulso el papel de esta área precursora
de la figura del ombusdman en México
En la conmemoración del XX
aniversario de la creación de la Defensoría de los Derechos Universitarios
(DDU), el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, refrendó el compromiso de
la institución con el derecho a la educación de todos los jóvenes del país, sin
que para ello haya barreras ideológicas, étnicas, religiosas o económicas. Las
únicas aceptadas, subrayó, son las académicas, para fortalecer la calidad
necesaria en el proceso enseñanza–aprendizaje.
Reafirmó el compromiso de la
Universidad Nacional con los derechos humanos y con el Estado democrático, así
como con la libertad de cátedra e investigación, como sustento fundamental de
la autonomía, y para seguir sirviendo a la sociedad mexicana.
Ante el secretario de
Gobernación, Santiago Creel Miranda, y el presidente de la Comisión de Derechos
Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Emilio Álvarez Icaza, el rector destacó
que si hace 20 años los universitarios “hicimos nuestros los derechos humanos y
nos comprometimos con ellos”, hoy los refrendó con el reconocimiento del avance
logrado. Pero, también aceptó los retos que esta tarea impone en el futuro
inmediato a mediano y largo plazos.
Durante el acto, al que
asistieron defensores de derechos humanos, ex titulares de la DDU, académicos y
funcionarios de la Segob, Santiago Creel afirmó que la UNAM es la principal
institución de educación superior del país y gran impulsora del cambio
democrático que ha tenido la nación.
Por ello, sostuvo, México
tiene en la Universidad Nacional uno de sus más valiosos activos. Con la
celebración del XX aniversario de la creación de la DDU, recalcó, se conmemora
un hecho relevante en la creación de una cultura de los derechos humanos entre
los mexicanos.
En estas décadas, afirmó, el
trabajo de la Defensoría ha tenido consecuencias benéficas para la UNAM y para
la nación, porque fortaleció el cumplimiento del orden jurídico a su interior,
con respeto a su autonomía universitaria, y ha contribuido de manera decisiva a
formar un ambiente de observancia de la ley, además de tutelar y promover el
respeto de los derechos de los estudiantes y el personal académico.
Esto, puntualizó, es garantía
de la libertad de cátedra, pensamiento e investigación, además de factor de
equilibrio y certidumbre que permite la mejor convivencia entre los
universitarios.
La DDU, precisó, cumple un
papel precursor en el país por ser institución pionera y uno de los primeros
organismos dedicados a hacer valer las garantías de las personas ante errores o
excesos de las autoridades.
Así, las comisiones Nacional y
estatales de derechos humanos abrevan de la experiencia fundacional de la
Defensoría. Otra de las acciones de vanguardia que el país debe agradecerle a
la UNAM.
Creel Miranda argumentó que
otro efecto fundamental para el desarrollo cabal de la democracia en el país es
la promoción, entre los universitarios y más allá del campus, de una cultura de
reconocimiento, defensa y respeto de los derechos fundamentales. Mencionó los
cursos, asignaturas en licenciaturas y posgrado y las diversas actividades que
sobre el tema lleva a cabo la UNAM en forma permanente.
Al presentar un análisis del
Informe de la Defensoría, el presidente de la CDHDF, Emilio Álvarez Icaza,
señaló que la Universidad es la columna vertebral del progreso nacional.
Manifestó que no se trata sólo
de un Informe de la DDU, pues logró mover a diez instituciones de la UNAM. Así
se conoce el trabajo de otras entidades como la Oficina del Abogado General,
las coordinaciones de Humanidades y de Difusión Cultural, la Dirección General
de Bibliotecas y el Instituto de Investigaciones Jurídicas, entre otras.
Esto, reflexionó, refleja una
visión de integralidad en la labor y promoción de los derechos humanos en la
UNAM, lo que muestra el trabajo institucional del aporte sustantivo de la
institución en distintos temas y con diferentes actores. Dijo que la mancuerna
democracia–derechos humanos es un eje que cruza todo el trabajo.
Por su parte, el ombudsman universitario Leoncio Lara Sáenz,
informó que en dos décadas, la Defensoría ha prestado 12 mil 709 asesorías, ha
resuelto mil 634 quejas y emitido 207 recomendaciones sobre diversas
violaciones a derechos de estudiantes y miembros del personal académico en
temas relativos al derecho de petición, de audiencia, a la integridad, la
observancia de la legalidad, medidas disciplinarias y derechos académicos y
escolares, entre otros.
A 20 años de su fundación,
abundó, la DDU ha contribuido con tareas de difusión y divulgación y con la
ayuda de los integrantes de la comunidad interna, ha ayudado en la formación y
consolidación cotidiana de la cultura de la observancia de la ley en la UNAM.
La institución, agregó, se ha
constituido en un mecanismo universitario participativo y democrático, que
impulsa la convivencia pacífica sin descuidar la atención individual de su
comunidad, en el disfrute de sus derechos y en el cumplimiento de sus
obligaciones.
Lara Sáenz planteó que la UNAM
continúa su labor de consolidación de la defensa de los derechos de los
universitarios. Da ejemplo a la sociedad mexicana de que la observancia de las
leyes y el respeto a los derechos humanos de todos, constituye el instrumento
más valioso para combatir la corrupción y reencontrar los valores cívicos y morales
de la sociedad y contribuye a perfeccionar la base de la convivencia, de la
democracia y, en consecuencia, el buen desarrollo social de los mexicanos.
Luego, dijo que la Defensoría
no cree que la sola vigencia de la ley tenga la capacidad mágica de transformar
la realidad del país. Se trata, resaltó, de una pauta de conducta, de un
imperativo categórico del deber ser y cómo actuar en sociedad, pero no opera
sobre la realidad. Por ello, concluyó, en la DDU están convencidos de que el
debido acatamiento de la legalidad y las acciones positivas derivadas, no
contribuyen a consolidar el Estado de derecho, sino que lo engrandece y lo
afirma.
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FOTO 1
Leoncio Lara, Santiago Creel, Juan
Ramón de la Fuente y Emilio Álvarez, durante la conmemoración del XX
aniversario de la creación de la Defensoría de los Derechos Universitarios.
FOTO 2.
Durante la celebración del XX
aniversario de la creación de la Defensoría de los Derechos Universitarios,
participaron su titular Leoncio Lara; el secretario de Gobernación, Santiago
Creel; el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, y el ombudsman
capitalino, Emilio Álvarez.
FOTO 3
Al conmemorarse el XX aniversario de
la creación de la Defensoría de los Derechos Universitarios, el ombudsman
universitario Leoncio Lara Sáenz rindió un informe sobre la entidad y dijo que
se prestaron 12 mil 709 asesorías, mil 634 quejas y 207 recomendaciones.