Boletín UNAM-DGCS-387
Ciudad Universitaria
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Pies de foto al final del boletín
ERRÓNEO, QUE LA
ECONOMÍA MEXICANA DEPENDA DEL PETRÓLEO Y LAS REMESAS
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José Antonio Ocampo, de la ONU, dijo en la
UNAM que en AL hay empresas de clase mundial capaces de competir en la
globalización, pero también tenemos más informalidad
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Para el premio Nobel de economía 1980,
Lawrence R. Klein, si México se abriera a la inversión extranjera directa
tendría mayor éxito
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Consideró importante que nuestro país avance
por un sendero de crecimiento sustentable de cinco o seis por ciento
Es erróneo caracterizar a la
economía mexicana como petrolera y dependiente de las remesas; sin embargo, es
necesario diversificarla, reconocieron en la UNAM José Antonio Ocampo,
subsecretario de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU, y el premio Nobel de
economía 1980, Lawrence R. Klein.
En el marco de la Conferencia
Link. Discutiendo el mundo para el futuro, que se realiza en la Facultad de
Economía (FE), José Antonio Ocampo dijo que en América Latina tenemos muchas
empresas de clase mundial, capaces de competir en la globalización, pero al
mismo tiempo existe más informalidad, que es nuestro agobio o realidad.
Agregó que ello refleja que
muchos de los sectores más dinámicos en realidad tienen algunas características
de enclaves; es decir, son más parte de la economía mundial que de las internas
y “esa desarticulación es parte de la tarea que tenemos por delante”.
Explicó que en términos
absolutos las remesas que recibe México son las más grandes de América Latina,
pero en relativos son menos importantes que para El Salvador, por ejemplo,
quien se allega siete veces más como proporción de su economía.
Reconoció que una de las
características de la producción mexicana es el desarrollo de un sector
exportador de manufacturas, con una amplia participación de la inversión
extranjera directa.
Al respecto, el Nobel
estadounidense subrayó que si nuestro país se abriera a la inyección directa de
recursos internacionales tendría mayor éxito. “Es importante que México avance
por un sendero de crecimiento sustentable de cinco o seis por ciento”.
Recalcó que podría lograr un
avance anual de cuatro o cinco por ciento con buenas estrategias, que
favorezcan el progreso. Cuando el Tratado de Libre Comercio de América del
Norte fue aprobado e implementado hubo gran interés en capitales de EU por sus
otros dos socios comerciales.
José Antonio Ocampo comentó
que América Latina debe aspirar a un desarrollo promedio anual de entre cinco y
seis por ciento; no obstante, la mayoría de las predicciones señalan una tasa
de entre tres y 3.5, ritmo que se ha registrado en los últimos años y que
resulta insuficiente.
Indicó que el problema más
importante de la región es la desigualdad, que si bien no se resuelve con
crecimiento, sí contribuye a reducir la pobreza. No obstante, México es una
economía extremadamente abierta en términos exportadores, y exitosa, su tarea
es reconvertir de forma constante esa estructura.
El ex secretario ejecutivo de
la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), refirió que el
reto para nuestro país es cómo construye mayores articulaciones de su aparato
productivo en torno a su sector de ventas al extranjero.
La tendencia actual de América
Latina no es la más prometedora en materia económica y social. Pese al aumento
del gasto público y a los impulsos que van de lo comunitario a lo comercial, no
se ha reflejado en la generación de empleo y de buenos ingresos.
Por ello, propuso una agenda
para América Latina que se articula en torno a aspectos fundamentales como una
macroeconomía que le dé mayor importancia al crecimiento financiero estable; el
retorno a políticas de desarrollo productivo para mercados abiertos como en los
países asiáticos, adaptados a los patrones de cada país.
Asimismo, estrategias para la
creación de nuevas actividades productivas, la articulación de los sectores que
se modernizan con el resto de las economías; y una mayor atención al empleo y
la distribución del ingreso.
Por su parte, Lawrence R.
Klein consideró que lo primero que cualquier sociedad debe hacer es elevar la
parte más baja de la escala de ingresos. Lo más importante para crecer y
avanzar es atender sectores como educación, servicios sociales y salud.
El analista norteamericano
insistió en que una economía amigable hacia las relaciones internacionales y
que puede trabajar con otros países e instituciones, se puede beneficiar de
ello.
Acotó que las reservas petroleras
en México son valiosas, pero con un mayor conocimiento y experiencia sobre
temas como la recuperación del gas natural y la construcción de pozos podría
crecer más al aprovechar todo el potencial de sus recursos.
Dijo que México debería
depender no sólo de la inversión estadounidense e incluso cambiar la proporción
y hacerlo más de naciones como Corea del Sur, que en tecnología es más
avanzada. La otra posibilidad es tener mayores inversiones conjuntas, quizá con
India y Brasil. Eso sería parte de la diversificación y significaría sujetarse
menos al ciclo económico de Estados Unidos.
Consideró que la economía
mundial no es en particular fuerte, pero tampoco débil; hay diversidad de
movimientos en los países. China crece a una tasa 9 por ciento anual, y no por
uno o tres años, sino desde 1978. Su objetivo es mantenerse así al menos hasta
2020.
Concluyó que India le pisa los
talones a China, y avanza a 7 por ciento anual. Otro posible motor es Brasil,
que cómo líder de América Latina, tiene potencial para ser una nación dinámica.
Cambia, produce aviones, computadoras, tecnología baja o media, como calzado,
vestido y manufacturas.
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FOTO 1
José Antonio
Ocampo, de la ONU, dijo en la UNAM que en términos absolutos las remesas que
recibe México son las más grandes de AL. Participó en la Conferencia Link 2005.
FOTO 2
Al participar en
la Conferencia Link 2005, el ex secretario ejecutivo de la CEPAL, José Antonio
Ocampo, afirmó que México es una economía abierta, en términos exportadores, y
exitosa.
FOTO 3
El Nobel de
economía 1980 Lawrence R. Klein, a su llegada a la Facultad de Economía de la
UNAM, donde participó en la Conferencia Link 2005, para hablar de crecimiento
mundial.
FOTO 4
El economista estadounidense Lawrence R. Klein recalcó en la UNAM que México podría lograr un crecimiento anual de cuatro o cinco por ciento con buenas políticas, que favorezcan el desarrollo.