16:00 hrs.  8 de Abril  de 2005

 

Boletín UNAM-DGCS-277

Universidad de Berkeley, California

 

Pies de foto al final del boletín

 

REPENSAR AL ESTADO PARA QUE SEA MÁS VIGOROSO Y FUERTE: DE LA FUENTE

 

·        El rector de la UNAM subrayó que el Estado debe ser capaz de mantener la soberanía y hacer funcional la división de poderes

·        Resaltó que el Estado debe regular en su capacidad a las múltiples fuerzas de los mercados

·        Participó en el panel sobre “Poder” del Simposio “Pensar México”, que se realizó en la Universidad de Berkeley, California, y fue organizado por una televisora mexicana

·        Además, en la mesa moderada por Esteban Moctezuma, intervinieron Diego Valadés, Porfirio Muñoz Ledo, Enrique Cabrero y Laura Nader

 

El rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, Juan Ramón de la Fuente, se pronunció por repensar al Estado para que –en términos generales y en nuestro país en particular–, sea más vigoroso y fuerte, no obeso; que sea capaz de mantener la soberanía y hacer funcional la división de poderes.

 

Afirmó que, en buena medida, el Estado debe regular en su capacidad a las múltiples fuerzas de los mercados que no necesariamente tienen sensibilidad social ni se preocupan ni ocupan de los aspectos básicos de las poblaciones.

 

Al participar en el panel sobre Poder, del Simposio Pensar México, que se realizó en la Universidad de Berkeley, California, De la Fuente remarcó que los mercados son necesarios para crear riqueza, pero el Estado se requiere para redistribuirla, porque si se crece sólo en términos de los indicadores macroeconómicos no siempre hay desarrollo.

 

En muchos países y México no es la excepción, precisó, se confunden los fines con los medios, por lo que es indispensable tener indicadores macroeconómicos sanos. Además, el Estado ha dejado de estar presente donde debe hacerlo, pese a que sigue siendo fundamental para proveer a la población de servicios básicos.

 

En la mesa, transmitida de manera simultanea al auditorio Héctor Fix Zamudio del IIJ, en Ciudad Universitaria, y a otras instituciones de educación superior del país, el rector de la UNAM reconoció que en la redistribución del poder en México ha habido un avance. Pero, para fortalecer la democracia se requieren cauces más efectivos a fin de que la sociedad civil participe de manera más incluyente en la toma de las decisiones.

 

En el acto, organizado por Televisión Azteca y moderado por Esteban Moctezuma Barragán, De la Fuente detalló que la redistribución del poder que viven los mexicanos es evidente y puso dos ejemplos: el primero,  la marcada división de los tres poderes del Estado, siendo el Ejecutivo más independiente del Legislativo y del Judicial.

 

Sin embargo, consideró como serio problema el que la mayor independencia de los poderes públicos no necesariamente se ha traducido en mejor funcionalidad. Advirtió que se vive “una relación disfuncional” entre ellos.

 

El segundo, argumentó, es la perspectiva federalista, donde en diversos programas, sobre todo de carácter social, se avanza –aunque no de manera suficiente– en los procesos de descentralización como fue el caso de la educación y la salud, rubro en los cuales los estados y municipios tienen mayor control.

 

 

De la Fuente alertó sobre las asignaturas pendientes, toda vez que el federalismo no ha sido perfeccionado lo suficiente. En otra dimensión del poder, destacó, la sociedad civil está mejor organizada y participa en diversas acciones de variada naturaleza. 

 

Luego, dijo que la gran palanca para el desarrollo de los países es la educación, sobre todo la superior. Se necesita, abundó, un balance e integrar las áreas de las ciencias básicas o duras con las de humanidades, artes y ciencias sociales, las cuales se complementan.

En su participación, el director del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ), Diego Valadés, puntualizó que el concepto de soberanía es básico para dar a cada Estado la capacidad de decisión. Por ello, debe evitarse la confusión de que este precepto aísla a los estados que la ejercen.

 

Por el contrario, aclaró, la integración e interacción profunda de las entidades, a través de múltiples formas, con otras consiste en la aplicación de una decisión soberana. Pero, no es posible pensar en la matización del concepto, derivado de una relación internacional intensa y comprometida con causas comunes, porque tendría efecto o impacto negativo en el ámbito interno. Es el eje de las facultades que conciernen a los gobernados para elegir y controlar a los gobernantes.

 

La rectora de Antropología de la Universidad de Berkeley, Laura Nader, señaló que han sido devastadas las zonas rurales de México que conocía desde 1957. La verdadera democracia de esos pueblos, agregó, ha cambiado en forma significativa, en parte porque muchas personas están ausentes.

 

La democracia en México, indicó, se ha visto afectada en los tres niveles de gobierno, los cuales han resultado afectados por las multinacionales y los acuerdos del Tratado de Libre Comercio (TLC), y son, enfatizó, una de las causas del daño al sistema político mexicano.

 

A su vez, el director general del Centro de Investigación y Docencia  Económicas (CIDE), Enrique Cabrero, expuso que el reto es construir una nueva forma de tomar decisiones. Antes, la agenda de las políticas públicas la definía el gobierno, hoy buena parte está en interacción con los acuerdos de libre comercio y con otros de índole distinta.

 

Los procesos decisorios, sostuvo, dejan de ser vistos como el espacio de control soberano de unos cuantos actores para llevarlo a un poder de determinación cuyo eje no es el control sino la articulación de voluntades. Empero, esa parte proactiva del gobierno mexicano no se ha desarrollado lo suficiente y no hay demasiadas redes de política pública para la toma de decisiones, de manera que el país sigue entrampado en la visión de que el ejercicio del poder es el control de los recursos.

 

En su intervención, el ex embajador de México ante la Unión Europea, Porfirio Muñoz Ledo, manifestó que en nuestro país y en América Latina el poder público está gravemente disminuido por el abuso de la experimentación, la amputación del Estado y la globalización. De ahí, resaltó, la necesidad de reestructurar, democratizar y articular al Estado con la soberanía nacional.

 

El hecho fundamental, recalcó, es que el poder ya no está en el Estado, porque hay actores legales, ilegales, nacionales, trasnacionales, crimen organizado, pérdida de jurisdicción territorial y en el trasfondo una inmensa desigualdad. Así, México está a punto de pasar a ser un Estado fallido, según la clasificación internacional, es decir, no le encuentra solución a los problemas de la población.

 

 

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PIES DE FOTO

 

FOTO 01

 

Juan Ramón de la Fuente, rector de la UNAM, se pronunció por repensar al Estado para que sea más vigoroso y fuerte. Participó en el panel sobre Poder, en el Simposio Pensar México que se llevó a cabo en la Universidad de Berkeley, California.

 

FOTO 02

 

Porfirio Muñoz Ledo, Juan Ramón de la Fuente y Diego Valadés, durante el desarrollo del panel sobre Poder, del Simposio Pensar México realizado en la Universidad de Berkeley, California.

 

 

FOTO 03

Durante el panel sobre Poder del Simposio Pensar México que se realizó en la Universidad de Berkeley, California, participaron Porfirio Muñoz Ledo, Juan Ramón de la Fuente, Diego Valadés y Laura Nader. Moderó la mesa Esteban Moctezuma Barragán.

 

 

FOTO 04

Esteban Moctezuma Barragán, moderó el panel sobre Poder del Simposio Pensar México que se efectuó en la Universidad de Berkeley, California. Dialoga con el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente y la especialista Laura Nader.