Boletín UNAM-DGCS-010
Ciudad Universitaria
Pies de fotos al final del boletín
DESARROLLAN EN LA
UNAM TÉCNICAS PARA REPARAR SUELOS CONTAMINADOS POR HIDROCARBUROS
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Creadas por integrantes del Instituto de
Ingeniería, se aplican con éxito en diferentes zonas del país, informó Rosario
Iturbe Argüelles
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La afectación por esa causa va más allá de
las zonas petroleras debido, principalmente, a las tomas clandestinas en los
ductos de diesel y gasolina, que provocan derrames
Integrantes del grupo de
Saneamiento de Suelos y Acuíferos del Instituto de Ingeniería (II) de la UNAM
desarrollan técnicas y métodos para evaluar y remediar suelos contaminados por
hidrocarburos, que ya se aplican con éxito en diferentes zonas del país,
informó Rosario Iturbe Argüelles.
La académica refirió que este grupo
de investigación, como parte de los procedimientos de caracterización de los
sitios afectados y de su comparación con parámetros establecidos por la
normatividad mexicana, también hace evaluaciones de riesgos a la salud por
posible contacto dérmico o ingestión de esos agentes tóxicos.
De ese modo, añadió, no sólo
realizan la evaluación de los lugares, sino que proponen su limpieza eficiente
para la degradación de compuestos; y mejoran las tecnologías existentes o
desarrollan otras para ese propósito, pero con un costo menor (alrededor de 50
por ciento menos; por ejemplo, de mil 300 a 700 pesos por metro cúbico de suelo
afectado).
El daño por esa causa, dijo la
universitaria, se extiende en todo el territorio nacional más allá de las zonas
petroleras, debido a las tomas clandestinas en los ductos, que provocan
derrames, sobre todo los que llevan diesel y gasolina. "Lejos de
disminuir, es mayor; a diario recibimos informes de nuevos sitios
contaminados". Mientras se localizan y reparan dichas fracturas, en
ocasiones ubicadas en zonas de difícil acceso, causan perjuicios a regiones
agrícolas, advirtió.
La experta reconoció que
dentro de las industrias, los vertidos accidentales o por mala operación han
disminuido gracias a la mejora en procedimientos, aplicación de normas,
realización de auditorías y, en general, por concientización del sector.
Empero, durante más de 50 años
ese control no existió, por lo que todavía hay remanentes en las cercanías a
refinerías, sitios de almacenamiento de petróleo o donde hay válvulas. Ahí hay
dificultades, no por derrames, sino por los llamados "pasivos
ambientales", suelos afectados desde hace tiempo, explicó.
La científica agregó que los
hidrocarburos se forman de compuestos químicos, algunos de ellos tóxicos; por
ejemplo, la gasolina tiene benceno; el diesel, poliaromáticos que producen
afectaciones a la flora y fauna e, incluso, a los humanos que entren en
contacto directo con ellos.
Así, abundó Rosario Iturbe, el
principal problema a causa de ese tipo de polución es la pérdida de escenarios
naturales, como pantanos y ríos, y productivos, como los campos de cultivo.
Frente a ese panorama, los
universitarios han implementado diferentes técnicas de recuperación de suelos,
tanto biológicas como fisicoquímicas. Una de ellas es el lavado con un
tensoactivo de las sustancias adheridas al suelo. "Hemos estudiado una
gran cantidad de detergentes, cuya principal característica es ser degradables
para que no permanezcan en el sitio de tratamiento".
La adsorción, abundó, es un
fenómeno que permite a las partículas contaminantes fijarse a las superficies.
Al agregar una solución de agua con limpiador sobre el terreno, éste último
separa ambos tipos de partículas, de modo que es posible recuperarlo
posteriormente junto con los hidrocarburos.
Su aplicación puede realizarse
con ayuda de pozos, donde son "inyectados" para el posterior rescate
de aguas abajo de la dirección de flujo, las cuales reciben un tratamiento
especial. Este método tiene la ventaja de que no es necesario extraer el suelo
afectado.
Existen otras técnicas donde
esto último sí se requiere. Consisten en formar pilas de tierra en donde se
colocan drenes que llevan líquido con tensoactivo. La mezcla limpia para,
finalmente, volver a poner el polvo en su sitio.
En el laboratorio del II se
han estudiado diversos detergentes a diferentes concentraciones. "Hemos
analizado por lo menos 20, sus proporciones y combinaciones con tipos de
superficie, para determinar cuáles pueden dar mejores resultados", reconoció.
También han puesto en marcha
un proceso biológico llamado biopilas, consistente en hacer una pirámide con el
volumen contaminado e introducir drenes para airearlo y permitir la entrada de
oxígeno. Además, se agregan nutrimentos, principalmente nitrógeno y fósforo,
para estimular la actividad microbiana y que, de esa manera, aseguró, los
microorganismos aumenten su capacidad de degradación o consumo del
hidrocarburo.
Al cabo de dos o tres meses el
suelo queda dentro de las normas. De hecho, se ha registrado buena eficiencia
en una refinería de Ciudad Madero, Tamaulipas, y en la ex terminal de
almacenamiento y distribución de diesel y gasolina de la ciudad de Zacatecas,
donde hubo que limpiar para que se pudiera disponer de un terreno para un nuevo
uso. Ahí, también se realizó un lavado, informó.
Entre las técnicas físicas
estudiadas se encuentra el encapsulamiento, consistente en agregar compuestos a
la zona dañada para cambiar por completo su textura y estructura, por lo que
puede servir como material de relleno, por ejemplo, en taludes. Es recomendable
en afectaciones severas, aclaró Iturbe Argüelles.
Este procedimiento,
desarrollado en el Instituto, ya ha sido aprobado para su utilización por la
Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, adelantó. Por el momento se
aplica en áreas pantanosas del estado de Veracruz con serios prejuicios por
hidrocarburos.
Al referirse a la evaluación
de riesgos a la salud, la investigadora afirmó que se lleva cabo considerando
las características físicas del entorno: clima, temperatura, área expuesta,
distribución de la población, características del suelo, densidad, materia
orgánica y profundidad del nivel freático, entre otros.
Tales particularidades se
suman a las concentraciones de compuestos, a los diferentes tipos de bencenos y
poliaromáticos. Luego, con ayuda de modelos matemáticos se obtienen números
sobre su nivel de permisibilidad. Cuando hay riesgos para la salud se sugiere
un tratamiento lo antes posible, enfatizó.
Los resultados de las
investigaciones de Rosario Iturbe son apoyados por Petróleos Mexicanos y han
sido publicados en revistas internacionales, como el Journal of Soils and
Sediments, Remediation y Enviromental Monitoring and Assesment.
Por último, la experta resaltó
la importancia de trabajar de manera interdisciplinaria, como ocurre en este
equipo y, en especial, de formar recursos humanos en los niveles de
licenciatura y posgrado capaces de dar solución a los problemas que enfrenta el
país.
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FOTO 1
La contaminación de suelos por hidrocarburos está
extendida en el territorio nacional por las tomas clandestinas en los ductos,
que provocan derrames, expuso Rosario Iturbe Argüelles, del II de la UNAM.
FOTO 2
Rosario Iturbe
Argüelles, del grupo de Saneamiento de Suelos y Acuíferos del Instituto de
Ingeniería de la UNAM, informó que desarrollan técnicas para remediar suelos
contaminados por hidrocarburos.