Boletín UNAM-DGCS-804
Ciudad Universitaria
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final del boletín
IMPONE FACULTAD
DE DERECHO LA MEDALLA “ISIDRO FABELA” A FREDRICH KATZ
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Con ella se reconocen los esfuerzos
extraordinarios por la paz, la conquista de la libertad y la justicia, y el
respeto a los derechos humanos
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Fernando Serrano Migallón, director de la
FD, afirmó que la historia escrita de este autor “nos abre a la interacción con
otros pueblos y culturas”
· La obra del investigador de origen austriaco es un llamado al análisis sereno y riguroso de temas profundamente enraizados en los mexicanos, señaló
El Consejo Técnico de la Facultad de Derecho de la UNAM
decidió otorgar al doctor Fredrich Katz la Medalla “Isidro Fabela”, que
reconoce esfuerzos extraordinarios para el mantenimiento de la paz, la
conquista de la libertad y la justicia, y el respeto a los derechos humanos.
En la ceremonia, efectuada en
el aula magna Jacinto Pallares de la dependencia, el director Fernando Serrano
Migallón afirmó que la historia escrita de este autor “nos abre a la
interacción con otros pueblos y culturas, y nos pone en comunicación con lo más
profundo de nosotros mismos. Sólo en tales circunstancias una sociedad puede
aspirar a la libertad y concordia. Tal es el principio orientador de nuestra
Universidad: el diálogo y el respeto”.
Dijo que en los tiempos
actuales, de fundamentalismos, fanatismos, intolerancia ideológica, étnica o
religiosa, debemos fortalecer nuestra capacidad para hablar, cerrar la puerta
al pensamiento único y aumentar nuestra disposición para escuchar a los demás.
La obra del investigador de origen austriaco, abundó, es
un llamado al análisis sereno y riguroso de temas enraizados en los mexicanos.
“Ha confirmado nuestra identidad y nos ha recordado la lucha de la población
por la sobrevivencia y el respeto a su soberanía”.
Por su parte, Fredrich Katz consideró un “honor especial
recibir la medalla. No sólo me siento honrado de que me la otorgue la FD sino
la UNAM, con la cual me siento profundamente identificado”.
En 1968, mencionó, fui profesor visitante de la
Universidad Nacional y pude presenciar la dignidad, valor y perseverancia con
las cuales, profesores, estudiantes y el rector confrontaron la crisis más
seria de esta casa de estudios.
Además, se dijo ilusionado porque el nombre de Isidro
Fabela “tiene profundo significado para mí y mi patria, Austria”. En ese
personaje se unieron dos características esenciales de la política exterior de
México: el nacionalismo revolucionario y el antifascismo.
En marzo de 1938, cuando Austria fue invadida por el
ejército nazi, recordó, se desató el terror sangriento contra sus oponentes:
socialistas, comunistas, demócratas y judíos. Ante ese hecho nadie levantó la
voz, sólo México, el gobierno de Lázaro Cárdenas a través de Isidro Fabela.
Entonces, el gobierno mexicano abrió sus puertas y
concedió asilo a muchos refugiados que escaparon del horror germano, “incluso a mis padres y a mí, los que
debemos nuestra vida a México, una deuda que nunca podré pagar”, consideró.
Fernando Serrano mencionó que
sus obras, como La guerra secreta de México, Ensayos mexicanos y Pancho Villa,
su vida y sus tiempos, nos han ayudado a robustecer la memoria colectiva, a
comprender los mitos sobre los que hemos fundado la patria y nos ha dado un
rigor histórico en los momentos cruciales de nuestro pasado.
Comentó que la ceremonia de entrega de la Medalla, que se
otorga anualmente, “nos congrega en torno a nuestros ideales, a los principios
que animan la vocación universitaria que se identifica con la libertad,
justicia y valores más altos de nuestra cultura”.
Al recordar a Isidro Fabela, y unirlo a la obra y persona
de Fredrich Katz, confirmamos la vigencia de la lucha del primero por la
igualdad de los Estados, la resolución pacífica de las controversias y el
derecho inalienable de las naciones a su existencia y desarrollo.
La presencia del homenajeado, quien ha dedicado su
esfuerzo a mantener viva la memoria de México y convertirla en experiencia útil
para la construcción de su futuro, permite rememorar el momento en la sinrazón
quiso extinguir a Austria, que no estuvo sola porque un mexicano, a nombre de
su pueblo, supo alzar la voz para defenderla, puntualizó.
En la segunda década del siglo XX, explicó el
funcionario, el mundo vio el ascenso de formas políticas y filosóficas que
pretendieron destruir la dignidad del individuo y someter su libertad. El
totalitarismo quiso subvertir los valores occidentales y pretendió fundar un
imperio basado en la fuerza, ignorancia y brutalidad.
Austria fue una de sus primeras víctimas. En marzo de
1938 el proyecto expansionista del nazismo atentó contra la existencia de ese
Estado y, sin derecho, lo anexo al “espacio vital alemán”.
Viena, la ciudad natal de Fredrich Katz, era el núcleo
del pensamiento que iba a transformar el siglo XX y el futuro de la humanidad.
Una pléyade de intelectuales construían nuevos parámetros para una realidad
cada vez menos dócil a las antiguas formas de pensar. Sin embargo, vieron
terminadas sus esperanzas por la fuerza desaforada de una dictadura, prosiguió.
La comunidad internacional permaneció impasible y en la
Sociedad de las Naciones una sola voz se alzó para denunciar el crimen. Isidro
Fabela, siguiendo la política exterior de Lázaro Cárdenas, exigió de todos los
gobiernos la defensa de un pueblo cuya desaparición había sido decretada. Lo
hizo con las armas a su alcance: razón, justicia y palabra, resaltó Serrano
Migallón.
Fredrich Katz, heredero y copartícipe de esos hombres que
perseveraron en la inteligencia para mantener viva a su nación, reconoció, se
ha dedicado a recuperar la memoria de la patria que lo adoptó y en la que vivió
sus primeros años: México.
“Sólo con este pasado y con una formación en torno a los
más altos ideales, sólo con los principios que ha defendido, puede comprenderse
que un hombre dedicado al análisis del pasado pueda hacer tanto por el presente
y el futuro de un país”, refirió.
Los mexicanos conocemos más y mejor nuestra historia
gracias a su trabajo. Por ello, “deseamos que con su palabra siga recreando el
pasado de sus dos patrias, las que alguna vez se vieron hermanadas en el
ejercicio más humano: el de la palabra, justicia, verdad y libertad”, finalizó.
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FOTO 01
Fernando Serrano Migallón, director
de la Facultad de Derecho de la UNAM, impuso la Medalla “Isidro Fabela” a
Fredrich Katz en ceremonia solemne efectuada en el aula magna Jacinto Pallares de
esa dependencia.
FOTO 02
El autor de La guerra secreta de
México, Ensayos mexicanos y Pancho Villa, su vida y sus tiempos, Fredrich Katz,
recibió la Medalla “Isidro Fabela” que otorga la Facultad de Derecho de la
UNAM.
FOTO 03
Fredrich Katz consideró un honor especial recibir la Medalla “Isidro Fabela”, no sólo porque “que me la otorgue la FD –refirió– sino la UNAM, con la cual me siento profundamente identificado”.