Boletín UNAM-DGCS-800
Ciudad Universitaria
QUIEREN SENADORES IMPEDIR DISPOSICIONES QUE AFECTEN A MEXICANOS EN ESTADOS UNIDOS
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Los mexicanos perciben menores ingresos
por su trabajo
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La migración femenina aumentó en la
última década
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Son algunas de las conclusiones
vertidas durante el Seminario “Los Trabajadores Migrantes: Un enfoque desde la
globalización con dimensión social”
Con el fin de impedir la aprobación de disposiciones que afectan a
los mexicanos en Estados Unidos, el Senado mexicano realiza “intensos
cabildeos” para estrechar relaciones con el Congreso norteamericano, informó
Germán Sierra Sánchez, miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores de ese
cuerpo legislativo.
Además, está en proceso de
admisión la iniciativa de ley de protección al migrante, “un beneficio tangible
e inmediato para centralizar y hacer un frente común, mucho más sólido, en la
defensa de nuestros connacionales”, añadió durante el Seminario “Los
Trabajadores Migrantes: Un enfoque desde la globalización con dimensión
social”, efectuado en el Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la
UNAM.
Aseguró que establecer
lineamientos al respecto es una prioridad para este órgano representativo, que
incluye tipificar delitos como tráfico de personas, prostitución y pornografía
infantil en la frontera.
En su oportunidad, Jorge de
Regil, representante patronal de la Organización Internacional de Trabajo en
México y miembro en su Comisión de Ginebra, expresó que son los mismos
empleadores quienes invitan a los compatriotas a emigrar para ofrecer su mano
de obra, necesaria para la organización y reajuste entre ambos países, dando
como ejemplo las remesas enviadas a México, segunda base de la economía
nacional.
Habló del trabajo de
investigación de nacionales en el extranjero, quienes en su mayoría viven
reglamentados y comentó que esto origina “fuga de cerebros”. Destacó que México
tiene un número importante de investigadores, científicos y doctores de varias
materias, en esta situación.
En este contexto, Claudia
Franco Hijuelas, titular de la Unidad de Asuntos Internacionales de la
Secretaría del Trabajo y Previsión Social, se refirió al pretendido control
sobre los emigrantes, a través de un registro continuo para acabar a largo
plazo con este fenómeno.
Aseguró que el terrorismo
implicó un nuevo pretexto para implementar ese tipo de acciones, obligando a
los “polleros” a ampliar su actividad
bajo una organización de tipo mafiosa y como un concepto de gran empresa. Son
estos puntos los que deben ser parte de las nuevas políticas que México debe
tener con respecto a los derechos humanos y laborales de aquellos que deciden
irse a otro país.
Al respecto de la inclusión de
los indocumentados en las previsiones sociales americanas, se refirió a la
doble problemática y tratamiento en ese tema, tanto para los migrantes
indocumentados como para los legalizados, aseguró que ambos deben tener las
mismas prestaciones que los trabajadores nacionales.
Dicha postura es justificada
con el programa de protección social llevada a cabo en Canadá desde el 2001, en
donde ha mostrado un efectivo funcionamiento tanto para la economía del país de
origen como para los emigrantes que prestan servicios; comentó que en fecha
próxima España será otro de los países donde se incluya este plan, sin embargo,
Estados Unidos ha sido tajante en su negativa.
En tanto, Juan Carlos Mendoza
Sánchez, representante del Instituto de los Mexicanos en el Exterior, añadió
que la migración no es un problema sino un fenómeno que debe contemplarse a
largo plazo, y en donde el efecto social debe ser la principal preocupación,
más ahora que los connacionales han trastocado el sector rural y se ha iniciado
una etapa de tránsito profesional.
Sin embargo, debe permitir que
se incorporen a un nuevo esquema institucional las visiones de derecho social y
humano que merecen estos trabajadores y que sean éstas las bases para la
articulación de una agenda compartida entre México y Estados Unidos, finalizó.
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