14:00 hrs. Octubre 11 de 2004

 

Boletín UNAM-DGCS-726

Ciudad Universitaria

Pie de foto al final del boletín

 

LA UNAM RINDE HOMENAJE A GILBERTO OWEN  EN EL CENTENARIO DE SU NATALICIO

 

 

La UNAM, a través de su Facultad de Filosofía y Letras (FFyL), recuerda a Gilberto Owen en el centenario de su natalicio, con la lectura que de su vida y obra harán profesores, investigadores, escritores y alumnos de diversas instituciones de México y Estados Unidos, afirmó Vicente Quirarte Castañeda, director del Instituto de Investigaciones Bibliográficas (IIB).

 

Al participar en la inauguración del Coloquio Internacional De sed en sed por el delirio. Los cien años de Gilberto Owen (1904-1952), el cual forma parte del homenaje nacional que se le realiza a este célebre autor, el funcionario recordó que en 1953, un año después de su muerte, la Universidad Nacional, fiel a su tradición de retomar a náufragos iluminados, publicó en su imprenta, por primera ocasión, lo que entonces podía rescatarse de la poesía y prosa de este escritor.

 

Ahora, subrayó, de nuevo se le rememora mediante este encuentro, en donde tomarán parte estudiantes de esta Facultad, todos de probada capacidad crítica y entusiasmo generoso.

 

En el Aula Magna “Fray Alonso de la Veracruz” de la FFyL, Vicente Quirarte señaló que la vigencia de un poeta en la memoria depende del tribunal del tiempo, “pero esa frase retórica está construida con base en complejos y numerosos túneles”.

 

Cómo influye en el pensamiento crítico esa pasión que Gilberto Owen y sus cofrades se encargaron de cultivar con ejemplar lucidez. Romántico en sus acciones, en el amor, el viaje y la política, fue clásico y vanguardista en el instante de transformar esos sentimientos y momentos en palabras, mencionó.

 

Fue eminentemente una criatura de creación; por ello, su obra no sólo forma parte del canon de la literatura mexicana sino, lo que es más difícil, de nuestro patrimonio emotivo, destacó.

 

Ante Ambrosio Velasco, director de la FFyL, Vicente Quirarte prosiguió: “Malabarista y renovador del poema en prosa; narrador que se negó a asentar la concreción de los hechos para buscar los misterios del trasmundo. Logró la difícil tarea de escribir poemas de amor que volvieran a contar la historia conocida y reincidente, para decirla como si nadie antes que él la hubiera vivido”.

 

A lo largo de sus 48 años de existencia, tan breve como intensa, se impuso el tono elegido para su obra y, en el resto de sus actos vitales, un acento aparentemente menor de fotografía desenfocada. Por los elementos que nos proporciona, tanto en sus actos como en su escritura, resulta atractivo caer en la tentación de dibujar a un ser perseguido, exclusivamente por los fantasmas tangibles de la bohemia o el artista marginal incapaz de encontrar su sitio, refirió.

 

No obstante, aseveró, Gilberto Owen es más atractivo por sus verdades, por lo que tuvo, hizo y se atrevió a arriesgar. Inteligente y alegre, cultivó la amistad como una religión, tan fuerte como aquella otra: la católica, en la que creció y la cual nutrió poderosamente su poesía.

 

Cuando lo juzgó necesario tuvo la valentía y convicción para intervenir políticamente en asuntos de un país extranjero; consciente de que hacerlo significaba perder los favores de la suave patria y encarnar, por lo tanto, la figura del exiliado, paria y héroe errante, mencionó.

 

No fue un hombre triste, por el contrario, puede afirmarse que cultivó, como pocos de los contemporáneos, la fraternidad duradera, el amor loco, las alegrías febriles y efímeras que el alcohol otorga a sus devotos, subrayó.

 

El conjunto de su escritura es una apuesta por los nuevos caminos trazados por su generación. En ese sentido, era consciente del temor y temblor de su poesía y de que sus lectores estaban por nacer, acotó.

 

En su oportunidad, Axayácatl Campos, coordinador de la licenciatura en Letras Hispánicas, destacó la importancia de que a través de este tipo de homenajes se difunda la obra de personajes como Gilberto Owen.

 

En este sentido, también es importante la participación y asistencia de los alumnos porque ésta es una forma de complementar su formación académica, concluyó.

 

El Coloquio Internacional De sed en sed por el delirio. Los cien años de Gilberto Owen (1904-1952), se efectuará hoy y mañana en el Aula Magna de la FFyL. Entre las conferencias que se presentarán se encuentran: La poesía como carta de identidad; Vanguardia y nacionalismo: La llama fría; Gilberto Owen en las revistas literarias; Un viaje inmóvil y una superficie profunda: el cine mudo en las obras de Gilberto Owen, y Entre el viento y la sombra: el tema de la identidad en Gilberto Owen.

-o0o-

 

 

 

 

PIES DE FOTO

 

 

Foto 1

Ambrosio Velasco y Vicente Quirarte, directores de la FFyL y del IIB de la UNAM, respectivamente, previo a la inauguración del Coloquio Internacional De sed en sed por el delirio. Los cien años de Gilberto Owen (1904-1952).

 

Foto 2

La obra de Gilberto Owen forma parte de nuestro patrimonio emotivo, destacó Vicente Quirarte, director del IIB de la UNAM, durante del Coloquio Internacional De sed en sed por el delirio, en el cual la FFyL rinde homenaje a uno de los más grandes poetas del siglo pasado.