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DESARROLLA LA UNAM UNA LABOR BIBLIOGRÁFICA Y BIBLIOTECOLÓGICA EJEMPLAR: SERRA PUCHE

· La coordinadora de Humanidades afirmó que el papel transformador de los libros debe seguir siendo patrimonio universal

· Presidió el tercer informe de labores de Filiberto Felipe Martínez Arellano al frente del CUIB

· El Centro es la principal entidad académica latinoamericana dedicada al desarrollo de la investigación bibliotecológica, destacó su titular

La UNAM ha desarrollado una labor bibliográfica y bibliotecológica ejemplar, reconocida en todo el mundo, no sólo a favor del libro sino del ámbito ancho y generoso que éste simboliza, afirmó Mari Carmen Serra Puche, coordinadora de Humanidades.

Añadió que corresponde al Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas (CUIB) la alta empresa de defender, desde la trinchera de la reflexión, el papel de los textos y su poder transformador, el cual debe seguir siendo patrimonio universal.

Al presidir el tercer informe de labores de Filiberto Felipe Martínez Arellano al frente de ese Centro, la funcionaria destacó que desde sus páginas se transmiten conocimientos e ideas, emociones y vivencias, que aportan perspectivas siempre nuevas para el mejoramiento de las personas y para el avance de las sociedades.

Debe reiterarse el alto valor de la palabra escrita, que no acaba en el mero ejercicio de la lectura. Mediante ella, aseveró, los textos han conquistado y lo siguen haciendo cada día, la voluntad, asombro y espíritu de quienes se interesan, sumergen y nutren en ellos.

Recordó que no es casual que el crecimiento de las instituciones universitarias vaya de la mano con el florecimiento de ese “humilde” aunque trascendente instrumento, una de las obras más duraderas de la humanidad.

Entendemos la labor del CUIB como una tarea central en el desarrollo, promoción y extensión del conocimiento y la reflexión que tiene lugar en el seno de la Universidad, abundó.

Esa dependencia, añadió, ha logrado forjarse un sitio destacado en el conjunto universitario nacional y extranjero. Al interior de la institución, sus labores encuentran un profundo reflejo en su relación con otras entidades como la Facultad de Filosofía y Letras, el Centro Coordinador y Difusor de Estudios Latinoamericanos; la Coordinación de Humanidades y la Dirección General de Servicios de Cómputo Académico.

También es destacada la importancia del posgrado en Bibliotecología y Estudios de la Información que ahora tiene sedes en Yucatán y San Luis Potosí.

Hablar del CUIB, agregó, implica referirse a su acervo bibliotecario, el cual se erige como el más importante de América Latina en su género. “El incremento de las colecciones, su adecuado manejo y conservación, así como la mejora de los servicios al público, han sido objeto de atención por el Centro”, aseveró.

Finalmente, exhortó a la comunidad a entregar los resultados de las acciones del Centro a la propia casa de estudios y a la sociedad en su conjunto. “Sólo así nuestra Universidad encontrará la vía para hacer de su espíritu un fuerte tronco de frutos abundantes”.

A su vez, Filiberto Felipe Martínez Arellano, al hablar de las acciones realizadas en la dependencia a su cargo durante el período 2003-2004, reiteró que el CUIB es la principal entidad académica latinoamericana dedicada al desarrollo de la investigación bibliotecológica, además de contar con los especialistas y el acervo más importante de la región.

Las funciones de la dependencia contribuyen en gran medida al desarrollo de la disciplina y a la solución de los problemas que en torno al libro, la lectura, las bibliotecas y la información, enfrenta nuestra sociedad, así como a la formación de recursos humanos de alto nivel.

Informó que la planta de investigación del Centro está constituida por 24 integrantes, entre quienes se continuó fomentando y apoyando la actualización y superación académica. De esa forma, 59 por ciento de los investigadores tiene el grado de doctorado; 33 por ciento de maestría y un 8 por ciento de licenciatura.

Uno de sus logros más relevantes, afirmó su director, fue el ingreso de cuatro académicos en el nivel I del Sistema Nacional de Investigadores, así como el cambio al nivel II de dos más, y el registro de un candidato al primer rango. Como resultado, en la actualidad 54 por ciento de la planta pertenece a ese padrón de excelencia.

Además se suman 23 técnicos académicos, quienes constituyen “una pieza importante que apoya en forma sustancial las actividades y proyectos de investigación, gracias a la puntual y eficiente realización de tareas especializadas”, añadió.

Para el desarrollo de sus labores, aclaró Martínez Arellano, el Centro tiene una organización académica en cinco áreas que agrupan las siguientes líneas de investigación: fundamentos de las ciencias bibliotecológicas y de la información; información y sociedad; sistemas de información; análisis y sistematización de la información documental, y tecnología de la información.

El director destacó que entre los proyectos del CUIB se encuentran INFOBILA: Biblioteca Virtual Latinoamericana del Caribe en Bibliotecología y Ciencias de la Información, y Modelo de formación para bibliotecarios de comunidades indígenas, ambos con el apoyo económico parcial de la International Federation of Library Associations.

También se participa en la Red Temática sobre Estudios Métricos de la Información, cuyo objetivo es contribuir al intercambio de conocimientos en esa materia entre universidades españolas y latinoamericanas; y en el proyecto Alfa Revistas, Red Virtual sobre todas las Américas, entre otros.

Por último, invitó a la comunidad del Centro a trabajar para que la dependencia mantenga el liderazgo de la investigación bibliotecológica en el país y la región.

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Foto 1

En presencia de Mari Carmen Serra Puche, coordinadora de Humanidades, Filiberto Felipe Martínez Arellano, director del CUIB, presentó su tercer informe de labores.

Foto 2

El CUIB es la principal entidad académica en América Latina dedicada al desarrollo de la investigación bibliotecológica, además de contar con los especialistas y el acervo más importantes de la región, afirmó su director, Filiberto Felipe Martínez Arellano.