Boletín UNAM-DGCS-660
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Ambrosio Velasco, director de la FFyL, dijo
que la formación de historiador en la UNAM no es parroquial; es decir, no los
hay de CU o del noroeste de la ciudad de México, sino de la Universidad
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Ello habla de un gran esfuerzo por refrendar
la calidad de los profesionales, profesores e investigadores de la UNAM:
Hermelinda Osorio Carranza, titular de la FESA
La Facultad de Filosofía y
Letras (FFyL) de la UNAM entregó el premio Marcos y Celia Maus a las mejores
tesis de licenciatura, maestría y doctorado en Historia, correspondientes a los
años 1999-2000 y 2000-2001, a egresados de esta dependencia y de la Facultad de
Estudios Superiores Acatlán (FESA).
En esta ocasión, para el
periodo 1999-2000 los ganadores fueron: en doctorado, Claudia Canales Ucha
(FFyL); maestría, Rebeca López Mora (FESA) y María José Garrido Asperó (FFyL);
y en licenciatura Rosalba Mejía
Albarrán (FESA). Además, le concedieron mención honorífica a Francisco Peredo
Castro (FFyL).
Asimismo, para el año
2000-2001 los galardonados fueron: en doctorado, María Leticia Pérez Puente
(FFyL); y licenciatura, José de Jesús Guerrero Flores (FESA). Las menciones
honoríficas fueron para: maestría, Olivia Álvarez Macotela (FFyL);
licenciatura, Berenice Bravo Rubio y Marco Antonio Pérez Iturbe (FESA), así
como Adriana Gutiérrez Hernández (FFyL).
En el Aula Magna “Fray Alonso
de la Veracruz”, de la FFyL, el director de esa dependencia, Ambrosio Velasco
Gómez, resaltó el hecho de que entre los premiados no sólo estén los egresados
de esa Facultad, sino también de la FESA.
“Ello demuestra que la
formación de nuestros historiadores no es parroquial; es decir, no los hay de
CU o del noroeste de la ciudad de México, sino de la UNAM. Por ello nos
sentimos complacidos de que se tenga esta hermandad, esta fraternidad en el
cultivo de las humanidades. Lo geográfico no tiene ningún sentido en términos
académicos”, aseveró.
Velasco Gómez felicitó a todos
los premiados, en especial a sus maestros y directores de tesis que, sin lugar
a dudas, tienen un mérito importante; así como a los familiares, padres,
cónyuges y vástagos de los premiados por este logro que honra a cada uno de los
que reciben el galardón, pero también a la carrera de historia y a la
Universidad.
En tanto, Hermelinda Osorio
Carranza, directora de la FESA, destacó la apertura para considerar a todas las
entidades que trabajan en la formación de historiadores. En la UNAM estas dos
entidades colaboran y contribuyen a su generación. Ello habla de un gran
esfuerzo, con lo que logramos refrendar la calidad de los profesionales,
profesores e investigadores que se preparan en las aulas.
Añadió que con el Premio Marcos
y Celia Maus se reconoce uno de los fines en esta casa de estudios:
promover la excelencia académica, fruto
del esfuerzo, entrega y compromiso de toda la comunidad universitario.
También agradeció a quienes
hicieron posible este galardón que reconoce a estos jóvenes historiadores,
inquietos por hacer el análisis de nuestro pasado, pero en la búsqueda de una
mejor vida en el presente y una adecuada construcción hacia el futuro.
Por su parte, la señora
Josefina Maus, representante de esa familia, consideró que los trabajos
ganadores “lejos de ser una repetición de aquellos que los precedieron, son
parte de su versión histórica, porque cada generación tiene derecho a hacer la
suya propia”.
A nombre de los premiados,
María Leticia Pérez calificó como falso que el trabajo académico y en
particular el de la tesis se haga en soledad. Basta con ver los agradecimientos
para constatarlo, en familiares y amigos, maestros, colegas, y aún en aquellos
a quienes historiamos se reconoce al compañero que ha hecho a nuestro lado ese
largo camino.
“Si bien en soledad
escribimos, cuando el trabajo culmina, experimentamos un sentimiento de deuda
con quienes, se lo propusieran o no, estuvieron presentes, ya porque motivaron
nuestro escrito, su memoria nos alentó, sus vidas nos permitieron historiar y
su amistad seguir, o porque sus reflexiones dieron pie a las nuestras”,
reconoció.
Apuntó que la interpretación
que da el historiador sobre el pasado, su selección de lo importante y de lo
significativo responde a las metas de su tiempo y evoluciona conforme van
emergiendo nuevas.
Por último, Andrea Sánchez
Quintanar, coordinadora del Posgrado en Historia, recordó que el Fideicomiso Marcos
y Celia Maus para premiar las mejores tesis de licenciatura, maestría y
doctorado en historia fue creado en 1987.
En aquella época “acogimos con
gran entusiasmo esta propuesta y la generosidad de los señores Maus, que
habiendo tenido hijos estudiando en la Universidad, quisieron donar una
cantidad específica de recursos para beneficio de esta institución”, remembró.
Así, uno de los propósitos del
premio es apoyar a los estudiantes de Historia e impulsar las carreras
académicas de los egresados, para lo cual se consideró la creación de esta
figura, que hasta ahora ha tenido resultados excelentes, finalizó.
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FOTO A 01
Josefina Maus,
Ambrosio Velasco y Hermelinda Osorio durante la entrega del Premio Marcos y
Celia Maus a las mejores tesis de licenciatura, maestría y doctorado.
FOTO A 04
Entrega del
Premio Marcos y Celia Maus a las mejores tesis de licenciatura, maestría y
doctorado, por parte de los titulares de la FFyL y la FESA de la UNAM, además
del Fideicomiso que da nombre al galardón.
FOTO A 08
María Leticia Pérez, a representación de los alumnos de licenciatura, maestría y doctorado que recibieron el Premio Marcos y Celia Maus a las mejores tesis, aseveró que la redacción de estos trabajos fue en comunidad.