11:00 hrs. Agosto 6 de 2004

 

Boletín UNAM-DGCS-551

Ciudad Universitaria

 

Pie de fotos al final del boletín

 

 

 

LA DEMOCRACIA ES UN PROCESO INTERMINABLE: YVES DUROUX

 

·        El filósofo francés aseguró que la forma moderna de este modelo es una experiencia histórica y no una idea encarnada

·        Resaltó que una de sus críticas esenciales es que descansa en la incompetencia

 

 

La democracia moderna es un proceso interminable en todo el mundo. No está ni inacabada ni es imperfecta, aseguró el filósofo francés Yves Duroux, quien señaló que la forma actual de este modelo es una experiencia histórica y no una idea encarnada, por lo que su trayectoria efectiva ha encontrado obstáculos que le son propios.

 

Al impartir la conferencia La democracia como problematización occidental de la política, en el Salón de Usos Múltiples del Instituto de Investigaciones sociales (IIS) de la UNAM, Yves Duroux dijo que uno de sus principales problemas es la relación entre lo político y lo social.

 

“Si su forma reciente proclama la soberanía del pueblo, y si el Estado libera a la sociedad de los vínculos comunitarios, pronto se hace evidente que el conjunto era desigual y que era necesario buscar en la propiedad el secreto de este desequilibrio”, refirió.

 

Otra cuestión, abundó, es el del saber. Una de sus críticas esenciales es que descansa en la incompetencia.

 

Un tercer punto es la dificultad de las elites. El mecanismo representativo de delegación, consustancial a este modelo, hace aparecer, de manera forzosa, grupos privilegiados. Es decir, el dispositivo produce desigualdad política.

 

Otra duda es la opinión. O bien se considera que es una manipulación por empresarios políticos, o es el área misma de la democracia política. Es en ella donde se constituye finalmente su vitalidad, por lo que es necesario rehabilitarla.

 

Refirió que otro problema es que la excepción es la regla. Esta vía está marcada por principios de funcionamiento, publicidad, discusión, y por otras de carácter temporal, lo que se llama el calendario electoral. Ellas parecen proteger esta actividad, aunque de hecho la bloquean, obstaculizan y adormecen. Por eso, en sus críticos se da mucho valor a la excepción.

 

El académico francés comentó que en la actualidad es la palabra clave del bien político y ha tenido un éxito prodigioso, superior incluso al de las grandes religiones llamadas universales.

 

Por otra parte, Yves Duroux señaló que en los territorios donde estas prácticas parecen bien implantadas hay varias que provocan malestar. Hoy día no se puede separar su acción de la teoría: “No ha existido siempre. Esta experiencia histórica es propiamente occidental, desde su elaboración griega, y su globalización tendencial actual constituye más un enigma que una evidencia”.

 

Este vocablo fue inventado por sus enemigos, puesto que de ella se desprende el vocablo cracia, que en griego significa poder, pero no el normal o benévolo, sino el violento. Por otra parte, el demos es lo incontrolable. Así que fue creada para criticar a ese tipo de régimen.

 

En consecuencia, las grandes revoluciones modernas: la inglesa, francesa y norteamericana –esta última también perteneciente al mismo contexto intelectual y práctico– no se autodenominaron democracias sino repúblicas.

 

Finalmente, este concepto apareció no como característica de un régimen político, sino más bien como una especie de Estado o circunstancia de la sociedad.

 

Su promoción actual provino, sobre todo, para enfrentarla al totalitarismo. De hecho, fue utilizada de forma masiva durante la Guerra Fría como arma de guerra. No obstante, abundó, al parecer no puede prescindir de sus enemigos. Por ello, se inventó un nuevo oponente: el terrorismo.

 

Explicó que toda comunidad combina dos rasgos. En primer lugar la pertenencia del individuo a un conjunto que lo antecede y, como segundo tópico, la naturaleza jerárquica de ese fenómeno. Cada colectividad instituye relaciones de subordinación personal que no hay que analizar como desigualdades, concluyó.

 

–o0o– 


PIES DE FOTO

 

Foto 01

 

El filósofo francés Yves Duroux  aseguró en la UNAM que la democracia moderna es un proceso interminable en todo el mundo. No está ni inacabada ni es imperfecta.

 

 

Foto 02

 

El catedrático francés Yves Duroux dictó en el Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM la conferencia “La democracia como problematización occidental de la política”.