12:00 hrs. Diciembre 1 de 2003

 

Boletín UNAM-DGCS-907

Ciudad Universitaria

Pies de foto al final del boletín

 

GANAN UNIVERSITARIOS OCHO PREMIOS DE LA ACADEMIA NACIONAL DE MEDICINA

 

 

·        Ana María López Colomé participó en dos de los trabajos ganadores

·        Se presentaron los triunfadores en el marco de la ceremonia de clausura del CXL año académico

 

Académicos y alumnos de la UNAM formaron parte de los ocho trabajos ganadores de los premios 2003 que otorgó la Academia Nacional de Medicina (ANM), institución dedicada a promover el estudio, la enseñanza y la investigación en el campo médico.

 

Los universitarios participaron –en algunos casos al lado de especialistas de otras instituciones– en los grupos triunfadores de las distinciones Dr. Eduardo Liceaga, sobre investigación clínica; Dr. Maximiliano Ruiz Castañeda, de investigación básica; y Dr. Everardo Landa, al mejor trabajo de ingreso.

 

También obtuvieron los premios Von Behring-Kitasato, sobre investigación en inmunología; el Conacyt, de investigación clínica; el de la Academia Nacional de Medicina, respecto a biología de la reproducción, y el Salas Peyró, sobre violencia social o intrafamiliar. Además, resultaron triunfadores en el Concurso Nacional de Obras Médicas.

 

 

Los académicos de la Facultad de Medicina (FM) premiados son: Ana María López Colomé –también del Instituto de Fisiología Celular (IFC),  quien   participó   en   dos   de   los   trabajos ganadores–; Julio Sotelo –también del Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIBm)–; Luis Benítez Bribiesca, Luis Manuel Terán, Eduardo César Lazcano Ponce, Alfredo Ulloa Aguirre y Samuel Ponce de León. Además Roberto Kretschmer, miembro de la Junta de Gobierno y Donato Alarcón Segovia, ex miembro de la misma.

 

Otros universitarios premiados son los académicos Arturo Hernández Cruz y Edith López, y la alumna de doctorado Ana Gadea, todos del IFC, entre otros doctorantes, como Dolores Utrera-Barillas.

 

En la Unidad de Congresos del Centro Médico Nacional Siglo XXI, se presentaron los grupos ganadores, en el marco de la ceremonia de clausura del CXL año académico, encabezada por Julio Frenk Mora, secretario de Salud, y Miguel Tanimoto, presidente de la ANM.

 

Rosa María Tarrats, Graciela Ordóñez, Camilo Ríos y Julio Sotelo obtuvieron el Premio Dr. Eduardo Liceaga, sobre investigación clínica, el cual analiza el incremento de la esclerosis múltiple y su incidencia en México durante las últimas dos décadas. Para apoyar este crecimiento se establece una correlación entre el padecimiento en sí, la alimentación del seno materno de los pacientes, y otros dos factores: la varicela y el eczema.

 

De acuerdo con las conclusiones del jurado, los especialistas comentaron la posibilidad de que disminuir la lactancia materna es un factor de riesgo para desarrollar este padecimiento. Se estudió la época de inicio de la enfermedad y ésta coincidió con 10 o 20 años previos a la disminución de esta práctica en el país, principalmente entre los grupos urbanos.

 

El Premio Dr. Maximiliano Ruiz Castañeda, sobre investigación básica, fue obtenido por Ana Gadea, Edith López, Arturo Hernández Cruz y Ana María López Colomé.

 

 

 

Esta última detalló que en este trabajo se analizó el transportador de glicina en la glía de la retina, y se demostró que su actividad se regula por un mecanismo novedoso, no identificado con anterioridad en el sistema nervioso, que involucra la modificación del citoesqueleto celular por calcio y reacciones activadas por el mismo.

 

Estos resultados abren la posibilidad de evitar o disminuir el daño neuronal causado por un exceso de glutamato, por medio de la manipulación de los transportadores de glicina.

 

Abundó que esta sustancia es el neurotransmisor excitador que utilizan las neuronas de la vía principal de la retina, de los fotorreceptores a las células ganglionares.

 

La señal se transmite a través de su interacción con receptores específicos en la membrana de las neuronas; la glicina se une a uno de los tipos de receptor de Glutamato (de NMDA), y aumenta la excitación producida por el Glu. Sin embargo, una concentración extracelular elevada, como la que se alcanza en algunos padecimientos, produce la muerte de las neuronas por sobre-excitación, lo que hace importante el control de dichas concentraciones.

 

Su regulación está a cargo de proteínas transportadoras que remueven al transmisor de la sinapsis una vez que se ha transmitido el mensaje.

 

Jesús Kumate, presidente del jurado de dicho premio, señaló que se trata de una línea de investigación sostenida y el  trabajo es de buena factura sobre la base de un amplio reconocimiento del campo. Plantea explicaciones congruentes ante resultados inesperados, y como toda buena investigación, deja más preguntas que respuestas.

 

El Premio Dr. Everardo Landa, al mejor trabajo de ingreso, fue también para Ana María López Colomé, investigadora del IFC y de la FM, bajo el título “Receptores de glutamato acoplados a la síntesis de óxido nítrico durante el desarrollo de la retina”.

 

 

En esta obra se analiza la síntesis de óxido nítrico en diferentes  etapas del desarrollo embrionario de la retina, y se demuestra  que ésta es mayor durante la etapa plástica en la que se forman las sinapsis, que en el tejido diferenciado.

 

Los resultados permiten postular la intervención de dicho óxido, producido por la estimulación de los receptores de glutamato, en la formación de los circuitos neuronales de la retina durante el proceso de maduración del tejido.

 

El óxido nítrico es un gas identificado recientemente como transmisor en el sistema nervioso. El grupo de trabajo de la académica ha demostrado con anterioridad que el Glu, principal neurotransmisor excitado en la retina de los vertebrados, induce su síntesis, así como el mensajero intracelular GMP cíclico, a través de la activación  de las enzimas que los sintetizan. La producción de estos compuestos modifica la excitabilidad de las neuronas de la retina.

 

Asimismo, el Concurso Nacional de Obras Médicas fue para Luis Benítez Bribiesca, por su libro La formación de un científico. La obra, según el jurado Rubén Argüero Sánchez, es objetiva, didáctica y clara; va a lo esencial y sirve de actualización para aspectos importantes en el campo de la investigación.

 

El Premio Von Behring-Kitasato lo obtuvieron Dolores Utrera-Barillas, Juan Velázquez Rodríguez, Antonio Enciso, Samira Muñoz Cruz, Guadalupe Rico, Everardo Curiel Quesada, Luis Manuel Terán y Roberto Kretschmer.

 

Kaethe Willms, miembro del jurado, explicó que los resultados obtenidos abren nuevas líneas de investigación para indagar sobre añejas preguntas en la amibiasis hepática, como por ejemplo, por qué la respuesta inflamatoria tardía es tan escasa en la infección extra-intestinal de esta parasitosis y si la observación se relaciona de alguna forma con la restitución completa del tejido del hígado después del tratamiento.

 

 

 

También, dijo, se muestra con metodología sofisticada que el pentapéptido amibiano inhibe la expresión de cuando menos tres factores proinflamatorios y un receptor, en un sistema  experimental ensayado en líneas celulares de monocitos humanos.

 

En cuanto al Premio Academia Nacional de Medicina, sobre biología de la reproducción, se entregó a Alfredo Ulloa-Aguirre, del posgrado de la FM, por su excelente producción científica y contribución en este campo.

 

Ulloa-Aguirre se graduó como médico cirujano en la Universidad Nacional. Realizó sus especialidades en medicina interna y posteriormente en biología de la reproducción humana, en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán. Obtuvo, con mención honorífica, el grado de doctor en Ciencias Médicas de la UNAM.

 

Como científico ha desarrollado diversos programas de investigación clínica y biomédica en medicina reproductiva y biología de la reproducción. En el área clínica ha contribuido a la caracterización de los defectos bioquímicos y moleculares de pacientes con problemas en la diferenciación y maduración sexuales.

 

El Premio Salas Peyró, sobre violencia social o intrafamiliar, fue obtenido por Claudia Díaz-Olavarrieta, Charlotte Ellerton, Francisco Paz, Samuel Ponce de León y Donato Alarcón Segovia.

 

Los miembros del jurado señalaron que en un mundo donde la violencia, en cualquiera de sus formas, parece ir en aumento, estas indagaciones sobre la prevalencia del abuso de fuerza entre mil 780 pacientes externos, en una institución de medicina interna de México, es un intento serio para llegar a comprender el carácter del ser humano.

 

La población, dijo, fue analizada con cuidado, el tratamiento estadístico fue impecable y la información abundante.

 

En el trabajo, los autores destacan que los niveles de violencia contra las mujeres en México son comparables a los reportados en otros países.

 

Finalmente, durante la ceremonia se dieron a conocer los nombres de los ganadores del Premio Conacyt, sobre investigación clínica. Éste fue obtenido por Leonor Rivera Rivera, Lazcano Ponce, Salmerón Castro, Salazar Martínez, Castro R., y Hernández Ávila, quienes presentaron el trabajo “Prevalence and determinants of male partner violence against mexican women: a population-based study”.

 

Al clausurar el año académico, el secretario de Salud, Julio Frenk, señaló que estos premios no solamente reconocen el trabajo actual, sino también son un estímulo para las generaciones futuras.

 

Señaló que ha sido un año donde se han realizado reformas trascendentales a la Ley General de Salud, que plantean un esquema innovador, el cual –confió–, en los años por venir aportará mejores opciones de financiamiento, calidad y equidad al sistema de salud.

 

Durante la ceremonia, Miguel Tanimoto señaló que la Academia Nacional de Medicina está consagrada a promover el estudio, la enseñanza y la investigación en el campo de la medicina, cuyos adelantos recoge, analiza y difunde, con el objetivo de actualizar conocimientos y orientar criterios, tanto de los profesionales de la salud como del público en general.

 

Resaltó que la ANM es la institución colegiada más antigua de México. Se fundó el 30 de abril de 1864, por lo que actualmente cumple 140 años de existencia. De los 22 médicos fundadores, la membresía actual es de 604, registrados a julio de 2003.

 

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PIES DE FOTO

 

Foto 1

 

Miguel Tanimoto, presidente de la Academia Nacional de Medicina, señaló que esta agrupación está destinada a promover el estudio, la enseñanza y la investigación en el campo de la medicina.

 

Foto 2

 

La investigadora universitaria Ana María López Colomé obtuvo los premios 2003 Dr. Maximiliano Ruiz Castañeda y Dr. Everardo Landa, que otorga anualmente la Academia Nacional de Medicina.