Boletín UNAM-DGCS-810
Ciudad Universitaria
Pies de fotos al
final del boletín
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Lo obtuvieron Leticia Rocha Zavaleta, del Instituto de Investigaciones
Biomédicas de la UNAM, y su equipo de trabajo
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Fue en la categoría de Trabajo de Investigación Científica, Innovación
Tecnológica o Desarrollo Tecnológico Terminado
Leticia Rocha Zavaleta, del Instituto de
Investigaciones Biomédicas (IIBm) de la UNAM y su equipo de trabajo obtuvieron
el Premio Aída Weiss 2003, en la categoría de Trabajo de Investigación
Científica, Innovación Tecnológica o Desarrollo Tecnológico Terminado.
El trabajo ganador, desarrollado en el
Departamento de Biología Molecular y Biotecnología, fue Parental and oral
immunization with a plasmid DNA expressing the human papillomavirus 16-L1 gene
induces systemic and mucosal antibodies and cytotoxic, T lymphocyte response.
Este proyecto busca producir una vacuna contra
el cáncer cérvico-uterino, que sería gestado con las técnicas de la ingeniería
genética. A este respecto, la ganadora señaló que hasta el momento los avances
para alcanzar dicha inmunización son prometedores, aunque debe continuarse con
la experimentación.
En la ceremonia de entrega, René Drucker Colín,
coordinador de la Investigación Científica de la Universidad Nacional, reveló
que en esta ocasión se presentaron al concurso 46 trabajos, cifra “realmente
importante para nuestro país”, pues significa que hay gente con capacidad para
competir por una distinción de esta importancia.
Sin embargo, esta área del conocimiento continúa
sin ser lo suficientemente socorrida. Hay gente que trabaja y hace estudios
sobre el cáncer, grupos muy buenos, pero debe impulsarse este campo de manera
más puntual. Para ello, dijo, necesitaríamos encontrar mecanismos para que los
especialistas se interesen por este tema, de vital importancia para la sociedad
mexicana en su conjunto.
Drucker Colín se congratuló “por aquellos que
ganaron y por la reanudación del premio, que hace cuatro años se interrumpió.
Qué bueno –aseguró– que vuelva a
entregarse, porque estos eventos son importantes para la actividad científica,
pues se reconoce el trabajo competitivo y de calidad”.
Por su parte, Jaime Mas Oliva, coordinador del
Programa Universitario de Investigación en Salud, resaltó que entre las
instituciones participantes se encontraron el Instituto Mexicano del Seguro
Social, el Instituto de Servicios y Seguridad Social para los Trabajadores del
Estado, la Escuela Médico Militar y siete de los institutos nacionales de
salud.
Recalcó, además, que con esta edición del
Premio se inicia una nueva etapa, la cual debe fortalecerse al invitar a
sociedades de lucha contra el cáncer. “Los aspectos sociales de la enfermedad
muchas veces son relegados y este tipo de organismo juega un papel relevante”,
subrayó.
Igualmente, Daniel Weiss, en representación de
su familia, recordó que este premio fue establecido en 1983 en memoria de su
abuela, quien falleció prematuramente por un padecimiento oncológico: “He
crecido con la imagen de una mujer de compromiso, de lucha y familia, quien
inculcó en esta última el espíritu de ayuda, unión y apoyo a la comunidad”.
Refrendó, además, el compromiso de continuar
con el apoyo a los investigadores, organizaciones y estudiosos del cáncer a
través del Programa Aída Weiss. “Estamos seguros que con la participación de la
comunidad científica mexicana y del mundo, esta enfermedad tarde o temprano
será vencida”, aseveró.
A su vez, Miguel Ángel Morales Mendoza,
secretario académico del IIBm, consideró benéficos todos los esfuerzos realizados
en otras dependencias, tanto gubernamentales como privadas, para unir fuerzas y
atacar ese terrible padecimiento.
También expresó que la ganadora, Leticia Rocha,
es una de las investigadoras más jóvenes y talentosas de esta dependencia
universitaria, que cuenta ya con cinco grupos de alto nivel, comprometidos en
la investigación en diversos campos.
En su oportunidad, Rosalinda
Contreras Theurel, directora general del Centro de Investigaciones y de
Servicios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional, informó que
en la dependencia a su cargo se organiza una red de investigadores, destinada a trabajar en el campo
del cáncer cérvico-uterino junto con especialistas de otras instituciones.
Sería la primera vez que en México se establecieran estos importantes vínculos
para fortalecer la investigación oncológica.
Cabe señalar que otros ganadores fueron: en
el rubro de Proyecto de Investigación o Desarrollo Tecnológico, Patricio
Gariglio, del Cinvestav, por el estudio: Sistema modelo para estudiar el
posible efecto protector del receptor a retinoides RXRa y su
relación con HPV en el desarrollo de cáncer cérvico-uterino.
En la categoría de Sociedades de Lucha contra
el Cáncer, el premio fue compartido entre dos participantes: el Grupo de
Recuperación Total RETO y la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer,
IAP.
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PIES DE FOTO
Foto 1
Leticia Rocha,
del Instituto de Investigaciones Biomédicas, recibió de manos del coordinador
de la Investigación Científica de la UNAM, René Drucker, el Premio Aída Weiss
2003, por su proyecto que busca producir una vacuna contra el cáncer
cérvico-uterino
Foto 2
René Drucker,
coordinador de la Investigación Científica (al centro), durante la ceremonia de
entrega del Premio Aída Weiss 2003, opinó que deben encontrarse mecanismos para
que haya más interesados en el estudio del cáncer.
Foto 3
Con ayuda de las
modernas técnicas de ingeniería genética, Leticia Rocha Zavaleta, del Instituto
de Investigaciones Biomédicas de la UNAM, busca desarrollar una vacuna contra
el cáncer cérvico-uterino. “Los avances son prometedores”, aseguró