06:00 hrs. Octubre 3 de 2003

 

Boletín UNAM-DGCS-743

Ciudad Universitaria

 

Pies de fotos al final del boletín

 

MAYOR IMPACTO EN LA SOCIEDAD, RETO ACTUAL DE LA CIENCIA

 

·        Las matemáticas tradicionales están en crisis en todo el mundo y América Latina no puede ser inmune; ha habido una disminución de vocaciones en esta disciplina

·        Existen seis mil estudiantes de la carrera de Física en AL, en donde se gradúan mil al año; en Estados Unidos el número es diez veces mayor

·        El mercado laboral para los biólogos se reduce y limita su ejercicio profesional

 

Las matemáticas tradicionales están en crisis en todo el mundo y América Latina no puede ser inmune; esto se debe, en parte, a una disminución en el número de vocaciones hacia esta disciplina. En Estados Unidos, por ejemplo, el número de estudiantes graduados con dedicación exclusiva en departamentos de matemáticas bajó de 10 mil 121 en 1992 a ocho mil 16 en 1999.

 

Así lo destacó Pablo Jacovkis, de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires, Argentina, durante la presentación del estudio “Las carreras universitarias de ciencias exactas y naturales en América Latina y el Caribe”, efectuado en el marco de la Primera Reunión de la Red de Facultades de Ciencias en América Latina y el Caribe (RedFaC)

 

El investigador argumentó que ese declive podría obedecer a diferentes motivos, como la aparición de la informática como carrera con posibilidades económicas, pues motiva a muchos jóvenes a estudiar computación en lugar de continuar con sus inclinaciones matemáticas.

En segundo lugar, debe considerarse que en la segunda mitad del siglo XX hubo un distanciamiento entre las matemáticas y la física, el fin fue constituir una disciplina más distante de las aplicaciones, dificultando su relación con el mundo real.

 

Como tercer punto, a partir de la influencia de Estados Unidos se está afianzando una cultura de la accountability, o de la responsabilidad en el uso de los recursos asignados; esto provoca que se exija, a veces en forma exagerada, resultados rápidos.

 

Es obvio que la disminución mundial de la matrícula en matemáticas lleva inevitablemente a reducir el presupuesto para estos departamentos, lo cual obliga a replantear el enfoque docente y de investigación en esa materia.

 

La respuesta a esta crisis ha sido en Estados Unidos, una profunda revisión de los programas, intensas discusiones y, entre otras cosas, la creación de los programas de matemática industrial. En América Latina vale la pena mencionar los programas de ingeniería matemática con el mismo objetivo, indicó.

 

Es evidente que estas observaciones también se aplican en América Latina, pero considerando que son sociedades poco industrializadas y con una cultura menos dispuesta a aceptar la importancia de la ciencia y de la tecnología –en particular de las matemáticas–, la situación se agrava.

 

Por su parte Luis Fernando Magaña, investigador del Instituto de Física (IF) de la UNAM, manifestó que gran parte de las carreras en esta materia se encaminan a formar investigadores; sus graduados realizan estudios de doctorado y efectuan investigación en universidades públicas, aunque también –en un porcentaje escaso– en empresas privadas.

 

Afirmó que según estimaciones, el número de estudiantes en la carrera de Física suma no más de ocho mil en toda Latinoamérica, con cerca de mil 500 graduados cada año. Es inevitable comparar a los egresados de esta carrera con los de Estados Unidos, en donde su número es 10 veces mayor. Claramente la brecha es grande.

 

Por ello, es necesario incrementar el número de alumnos inscritos en estas carreras. Para ello puede plantearse dar más opciones profesionales a sus egresados, y no sólo una salida docente o el proseguir un posgrado, apuntó.

 

Con relación a los enfoques dominantes, destacó que más del 80 por ciento de los programas de estudio de las carreras de Física de las universidades latinoamericanas, está enfocado únicamente a la formación de investigadores en esta materia.

 

De este modo, los egresados de la licenciatura están preparados para iniciar cursos superiores, no para una vida profesional, sino como estudiantes graduados. Es mucho menor el número de escuelas dedicadas a formar docentes para la enseñanza de esta ciencia y a formar físicos que puedan insertarse en las industrias para dar apoyo técnico, con el entrenamiento correspondiente.

 

El porcentaje de carreras que ofrecen asignaturas para dar salidas en Física Aplicada o Ingeniería Física constituyen el 20 por ciento del total de las universidades latinoamericanas; es el mismo porcentaje para materias con opción a docencia.

 

Al hablar sobre los fondos para realizar investigación, corroboró que son cada vez más escasos y más difíciles de conseguir. La competencia por los recursos para la investigación es cada vez mayor en todos los países. Los contenidos de esta carrera deberán ser examinados y modificados para adaptarlos a las condiciones actuales.

 

A su vez, Luis Wong, director de Investigación de la Universidad Católica Santa María la Antigua (SMA), Panamá, indicó que en la mayoría de las universidades la licenciatura en Biología es impartida en Facultades de Ciencias Naturales.

 

En algunos casos, esta carrera es impartida directamente por los Departamentos correspondientes. En otros –la minoría de los casos–, existen Facultades de Biología en propiedad, administrándolas por medio de unidades docentes generales u otras estructuras.

 

Con relación a la correspondencia entre medios de investigación y realidad nacional, dijo que casi en la totalidad de los casos, las escuelas o departamentos en esta materia poseen el apoyo de laboratorios, centros e institutos universitarios, para el desarrollo de sus labores de investigación y docencia práctica.

El nivel de estas unidades es dispar, pero en general es catalogado entre excelente y satisfactorio. En gran número de casos se perciben carencias materiales y técnicas, que afectan su actividad.

 

Sobre el destino de los graduados en Biología, apuntó que existen  situaciones disímiles en la región, dependiendo del tipo de gestión gubernamental y de enfoque sobre la formación universitaria y su relevancia social.

 

Por un lado, dijo, en países duramente golpeados por la situación socioeconómica el mercado laboral para los biólogos se reduce, limitando severamente su ejercicio profesional.

 

Por esta razón, los graduados de estas instituciones disminuyen y aprovechan cualquier oportunidad laboral, aún sin relación con sus estudios.

 

Por otro lado, prosiguió, países como Cuba garantizan a sus egresados una plaza de trabajo. Ello es resultado de un proceso de planificación que inicia con la admisión de cada nuevo estudiante a la Facultad correspondiente.

 

Ahí, la matrícula tiene límites cuantitativos, que responden a una proyección nacional de la necesidad de profesionales en ese ramo, establecida por los entes gubernamentales de manera coordinada.

 

En México, los biólogos egresados de la UNAM optan por la investigación académica e industrial, y la enseñanza en diferentes niveles. Muchos de estos graduados prosiguen estudios de posgrado, tanto en el país como en el extranjero, en un número significativo, finalizó.

 

 

 

 

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PIES DE FOTO

 

 

FOTO 1

 

Pablo Jacovkis, de la Universidad de Buenos Aires, Argentina, destacó que las matemáticas están en crisis en todo el mundo y América Latina no puede ser inmune.

 

FOTO 2

 

Luis Fernando Magaña, investigador del Instituto de Física de la UNAM, participó en la Primera Reunión de la Red de Facultades de Ciencias en América Latina y el Caribe.

 

 

FOTO 3

 

Luis Wong, director de Investigación de la Universidad Católica Santa María la Antigua, en Panamá, se refirió al estado de la carrera en Biología en América Latina.