Boletín UNAM-DGCS-618
Palacio de Minería
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Pies de fotos al
final del boletín
RECIBE GERARDO FERRANDO BRAVO PREMIO NACIONAL DE INGENIERÍA MECÁNICA, ELÉCTRICA Y ELECTRÓNICA
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El director de la Facultad de Ingeniería fue
galardonado por su importante trayectoria académica y profesional
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El rector Juan Ramón de la Fuente dijo que
la UNAM tiene en Ferrando Bravo a un universitario total y completamente
comprometido con sus más altos valores
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El galardonado aseguró que los ingenieros
mexicanos deben trabajar para construir un país donde las necesidades del
crecimiento económico no se contrapongan, castiguen, ni atenten contra las
justas demandas del desarrollo social y equidad en las oportunidades para todos
los mexicanos
El Colegio de Ingenieros
Mecánicos y Electricistas, A. C. (CIME) otorgó el Premio Nacional de Ingeniería
Mecánica, Eléctrica, Electrónica y Ramas Afines, a Gerardo Ferrando Bravo,
director de la Facultad de Ingeniería (FI) de la UNAM, por su importante trayectoria
académica y profesional.
Durante la entrega de esta
distinción, fueron testigos de honor el rector de la Universidad Nacional, Juan
Ramón de la Fuente; el secretario de Energía, Ernesto Martens Rebolledo; el
director general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Jaime
Parada, y los presidentes de las asociaciones de esta rama de la ingeniería.
Durante la ceremonia,
efectuada en el Palacio de Minería, el rector De la Fuente afirmó que la vida
de Gerardo Ferrando ha estado vinculada a la UNAM con eficacia y
responsabilidad, además de que siempre ha respondido a las tareas que la
institución le ha encomendado, porque tiene en él a un universitario total y
completamente comprometido con sus más altos valores.
La lealtad, valentía y decisión
del titular de la FI para defender a la Universidad en los momentos difíciles,
abundó, muestran que ha respondido cabalmente, pues ha sabido estar de su lado
cuando se le ha requerido y ha sorteado circunstancias complejas, siempre con
apego estricto a su marco jurídico y a sus principios fundamentales.
Ante el gremio de ingenieros,
reflexionó sobre las difíciles condiciones en que actualmente se encuentra esa
disciplina en México. Incluso, informó que la UNAM convocó a un grupo
distinguido de especialistas en esta rama para analizar los problemas que “hoy
asfixian en cierta medida al desarrollo de las ingenierías en nuestro país”.
Estos conflictos, expuso,
están inmersos en el panorama general por el que atraviesa la nación. De ahí
que para lograr fortalecer a las ingenierías, fundamentales para la
construcción del México de hoy, es necesario ubicarlas en un contexto más
amplio y retomar todos los caminos del desarrollo.
De la Fuente advirtió que para
que las ingenierías florezcan como antaño, se debe volver a pensar en la ruta
del desarrollo nacional, donde los profesionales del ramo estarán llamados a
jugar un papel fundamental.
Manifestó su preocupación por
la existencia de una situación de desencanto y estancamiento en algunas de las
áreas de esta disciplina, lo cual se refleja en ámbitos como la matrícula de
primer ingreso y en el cierre gradual de las grandes compañías mexicanas.
El rector pidió a los
ingenieros de México no quedarse “cruzados de brazos lamentando la compleja
situación en la que estamos inmersos, sin generar propuestas alternativas”. Es
necesario, reiteró, trabajar en forma conjunta para establecer planteamientos
viables, respaldados por análisis e información objetiva.
En esta labor, externó, se
distingue el papel de la Universidad que, al mismo tiempo de esmerarse en
trabajar con la mayor calidad, es capaz de convocar y poner al servicio de la
sociedad la naturaleza misma del espacio universitario, nuestra independencia
de juicio y autonomía para discernir y proponer.
Luego de que el ex presidente del Colegio de Ingenieros
Mecánicos y Electricistas, Pablo Realpozo del Castillo, leyera la semblanza del
galardonado, Gerardo Ferrando Bravo aseveró que los ingenieros mexicanos deben
trabajar para construir un país donde las necesidades del crecimiento económico
no se contrapongan, castiguen ni atenten contra las justas demandas del
desarrollo social y equidad en las oportunidades para todos.
En los últimos años, indicó,
los ingenieros han expresado su consternación por algunas disposiciones de
carácter financiero y normativo que varios gobiernos aplicaron mediante
acciones y omisiones, cuyos resultados han sido desfavorables para el país en
general y para la ingeniería mexicana en lo particular.
Esta actividad, recalcó, se ha
descapitalizado no sólo en el aspecto financiero, sino en sus recursos humanos
técnicos con formación especializada, quienes deben abandonar posiciones en
empresas nacionales productivas, obligadas a ejecutar recortes y
adelgazamientos extremos.
Expuso que no se han creado
las fuentes de trabajo demandadas por las nuevas generaciones, el crecimiento
económico está muy por debajo de las necesidades reales de desarrollo y aún
cuando hay aspectos externos que afectan a la nación, también existen países
que en medio de la recesión mundial mantienen un desarrollo económico y social
ejemplar.
Al referirse a las medidas
anunciadas por el gobierno federal, Ferrando Bravo destacó las referentes a la
promoción de grandes proyectos de infraestructura; a la iniciativa de buscar
–junto con las empresas mexicanas– las mejores condiciones desde el diseño de
las bases de las licitaciones, a fin de que los nacionales no sean
descalificados desde un inicio, y la comprensión de la necesidad de crear
esquemas financieros que tomen en cuenta la difícil situación por la que
atraviesan estas industrias.
Sin embargo, advirtió, las
iniciativas gubernamentales por sí mismas no resuelven los problemas acumulados
en años de omisiones y dispersión de esfuerzos. Por ello, los sectores que
anhelan trabajar por México, como el de la ingeniería, deben aprovechar esta
situación favorable para coordinar todos los esfuerzos y enfocarse al
fortalecimiento de las empresas mexicanas con base tecnológica.
El titular de la FI puntualizó
que cuando se concilian voluntades, cuando los esfuerzos convergen en un
objetivo común y hay un trabajo sostenido, es posible que como país se aspire a
las mejores condiciones.
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Foto 01
El director de la
Facultad de Ingeniería de la UNAM, Gerardo Ferrando Bravo recibe el Premio
Nacional de Ingeniería Mecánica, Eléctrica, Electrónica y Ramas Afines de manos
del rector Juan Ramón de la Fuente.
Foto 02
Jaime Parada,
director de Conacyt, Gerardo Ferrando Bravo, director de la Facultad de
Ingeniería de la UNAM y Ernesto Martens, secretario de Energía, durante la
entrega del Premio Nacional de Ingeniería Mecánica, Eléctrica, Electrónica y
Ramas Afines al universitario.