Boletín UNAM-DGCS-269
Antiguo Colegio de San Ildefonso
Pies de fotos al final del boletín
ANTE LA BARBARIE, LAS UNIVERSIDADES PERMITEN LA COEXISTENCIA ARMÓNICA DE LOS PUEBLOS: DE LA FUENTE
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En ellas, los argumentos y las palabras, no las balas, determinan las
acciones de los individuos y los proyectos de la institución, subrayó el rector
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En sesión solemne, invistió a once profesores e investigadores eméritos
En los actuales
momentos, cuando lamentablemente la brutalidad y la barbarie pretenden dominar
las relaciones internacionales, las universidades representan una aportación
invaluable para la coexistencia armónica de los pueblos, aseguró el rector Juan
Ramón de la Fuente.
Al investir a once
profesores e investigadores eméritos, en sesión solemne, el rector afirmó que,
en las universidades, el diálogo y no la amenaza, los argumentos y no la
fuerza, las palabras y no las balas, determinan las acciones de los individuos
y los proyectos de la institución.
Puntualizó que a lo
largo de años y siglos, en las instituciones de educación superior –las cuales
provienen de una tradición humanista– se han desarrollado avances científicos y
tecnológicos en la búsqueda del ejercicio de la inteligencia que hoy, más que
nunca, debe estar al servicio de la paz, la razón y el entendimiento.
Así, la Universidad,
afirmó el rector, tiene la obligación esencial de sostener los ideales de la
supremacía del espíritu, de la cultura y de la dignidad humana.
Ante el Claustro
Académico, directores de entidades y dependencias universitarias y los
coordinadores de área, destacó que en momentos como el presente, cuando la
fuerza despedida de los poderosos se vuelca sin piedad contra los más débiles,
la comunidad internacional necesita recuperar el camino de la inteligencia para
la resolución de las controversias.
Asimismo, abundó,
requiere recuperar la razón como la única alternativa posible para una
coexistencia pacífica, así como el respeto y la legalidad como la forma de
relación perdurable entre las sociedades y las naciones.
En el Anfiteatro Simón
Bolívar del Antiguo Colegio de San Ildefonso, De la Fuente hizo hincapié en que
la educación y no la guerra, es la gran transformadora de las sociedades y los
individuos, pues es la que nos modifica desde adentro, desde nuestras más
profundas convicciones y creencias.
Quienes forman parte
de una comunidad universitaria, sostuvo, saben que sólo existirá un porvenir
sustentable y decoroso si se eligen, como fundamentos de los proyectos
políticos y las acciones diplomáticas, los principios y los instrumentos más
elevados que ha creado el ser humano para la convivencia.
Al agradecer a los
ilustres universitarios, profesores e investigadores y a los eméritos
investidos, por recordar nuestros más profundos valores desde los distintos
ámbitos del conocimiento, el rector aseveró que a diario enseñan que la
inteligencia es el mejor recurso.
Esta inteligencia,
agregó, es renovable si se sabe valorar y siempre debe estar al servicio de la
evolución y de la convivencia humana, nunca del retroceso, la violencia ni la
invasión del otro o los otros.
En la ceremonia, De la
Fuente reconoció el trabajo de los once eméritos que invistió: Salvador
Armendares Sagrera, Henrique González Casanova, Carlos Larralde Rangel, Rubén
Lisker Yourkowitzky y Álvaro Sánchez González, correspondientes al año 2002.
Mientras que Germinal
Cocho Gil, Néstor de Buen Lozano, Cipriano Gómez Lara, Roberto Meli Piralla,
Flavio Manuel Mena Jara y Gilberto Sotelo Ávila, del 2003.
Dijo que los once
académicos, destacados de las humanidades y las ciencias, tienen una relevante labor en las aulas, los
laboratorios, las bibliotecas y el trabajo de campo.
La Universidad
Nacional, manifestó, sigue siendo el semillero de notables investigadores y
maestros, el espíritu y la esperanza de la nación.
En el horizonte actual,
subrayó, es grande la responsabilidad de la UNAM, pero también debe serlo su
respuesta. Por ello, una vez más esta casa de estudios representa la vanguardia
en la generación y la transmisión de los conocimientos.
La institución
explica, por sí misma, por lo que hace y lo que significa, externó, la
necesidad que existe en México de apoyar en forma decidida a la universidad
pública, la investigación científica y humanística, a la extensión de la
cultura y los valores que emergen de la tolerancia, la pluralidad y el derecho
a disentir.
Recordó cifras
recientes de evaluaciones externas a las que la UNAM se ha sometido: 22
maestrías y 23 doctorados en el Padrón Nacional de Excelencia de Posgrado –once
de ellos de competencia internacional–, lo que reitera su compromiso con la
excelencia y refrenda la ubicación en el lugar de honor de la educación
superior nacional.
Más allá de estos
datos, señaló, la oferta educativa de la Universidad continúa siendo amplia y
disímbola, no se acota a las modas en boga ni se subordina a principios
lucrativos.
La libertad de cátedra
y de investigación, añadió, son y seguirán siendo nuestros valores supremos.
Por su parte, a nombre
de los eméritos investidos, Néstor de Buen, agradeció el reconocimiento y dijo que desde su abuelo para la familia
De Buen “la meta de la vida es la Universidad”.
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FOTO 01
Juan Ramón de la Fuente, rector de la UNAM, al investir a Salvador
Armendares Sagrera, como profesor emérito del Instituto de Investigaciones
Antropológicas, en sesión solemne realizada en el Antiguo Colegio de San
Ildefonso
FOTO 02
Henrique González Casanova, fue investido como profesor emérito de la
Facultad de Ciencias Políticas y Sociales por el rector de la UNAM, Juan Ramón
de la Fuente. La sesión solemne se llevó a cabo en el Antiguo Colegio de San
Ildefonso
FOTO 03
Néstor de Buen Lozano, en el momento en que el rector de la UNAM, Juan
Ramón de la Fuente, lo invistió como profesor emérito de la Facultad de
Derecho, durante la sesión solemne que se efectuó en el Antiguo Colegio de San
Ildefonso
FOTO 04
Acompañado por el presidente de la Junta de Gobierno, Sergio García
Ramírez, el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, presidió la ceremonia
solemne en la que fueron investidos once profesores e investigadores eméritos
FOTO 05
Cuando la barbarie y la brutalidad pretenden dominar las relaciones
internacionales, las universidades representan una aportación invaluable para
la coexistencia armónica de los pueblos, aseveró el rector de la UNAM, Juan
Ramón de la Fuente, al presidir la sesión solemne en la que invistió a once
profesores e investigadores eméritos de la institución
FOTO 06
Los once profesores e Investigadores que minutos después fueron
investidos como eméritos, caminan por los jardines del Antiguo Colegio de San
Ildefonso, rumbo a la sesión solemne. Adelante, la directora del Instituto de
Investigaciones Antropológicas, Mari Carmen Serra Puche
FOTO 07
La barbarie y la brutalidad pretenden dominar las relaciones
internacionales, afirmó el rector Juan Ramón de la Fuente en la sesión solemne
de investidura de once profesores e investigadores de la UNAM.
FOTO 08
En el marco de la sesión solemne de investidura de once profesores e
investigadores eméritos, el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente destacó
el papel de las universidades a favor de la paz.
FOTO 09
El rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, intercambia opiniones con
los presidentes del Patronato y de la Junta de Gobierno de la institución,
Benito Bucay Faradji, y Sergio García Ramírez, respectivamente.