Boletín UNAM-DGCS-164
Ciudad Universitaria
Pies de fotos al final del
boletín
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Los especialistas de la Facultad de
Filosofía y Letras condenaron la actitud del presidente estadounidense George
W. Bush
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Pidieron al gobierno mexicano aplicar la
Constitución, y respeto a la autodeterminación de los pueblos
Profesores eméritos de la
Facultad de Filosofía y Letras (FFyL) de la UNAM pronunciaron su rechazo contundente a la guerra contra Irak,
condenaron la actitud del presidente estadounidense George W. Bush y pidieron
al gobierno mexicano asuma la postura de aplicación de la Constitución y
respeto a la autodeterminación de los pueblos, con lo que acatará la posición
de los habitantes del país.
Sergio Fernández, Juliana González,
Adolfo Sánchez Vázquez, Luis Villoro y Leopoldo Zea, se manifestaron a favor de
la paz mundial real, sin terrorismos ni guerras y exigieron respeto a un
organismo internacional de la magnitud de la Organización de Naciones Unidas
(ONU).
Aseveraron que la actitud del
mandatario del vecino país del norte es por lograr el control tanto del
petróleo en la zona árabe como de la ubicación geopolítica de Irak.
En la mesa redonda “A favor de
la paz en Irak”, que organizó la FFyL, su director Ambrosio Velasco Gómez leyó
el pronunciamiento del profesor emérito Luis Villoro, quien consideró absurdo
pretender el desarme efectivo por medio de la agresión bélica, que sólo
produciría una escalada de la violencia.
Rechazó que Estados Unidos se
erija como juez y guardián de la seguridad internacional, únicamente basado en
su poderío militar y con una actitud de desprecio a los espacios
institucionales internacionales, que son, enfatizó, instancias idóneas para
resolver conflictos entre los Estados en un contexto mundial.
La guerra contra Irak,
resaltó, además de no resolver el problema del desarme en ese país causaría
enormes daños a la población civil inocente. Pero, sobre todo, la intervención
de Estados Unidos en esa y otras naciones exacerbaría los conflictos del mundo
islámico de occidente con altos riesgos de aumento del terrorismo y con
nefastas consecuencias para la convivencia de las diferentes culturas y
pueblos.
La solución a los riesgos que
representa el armamento de Irak, subrayó Luis Villoro, no está en la guerra
sino en el diálogo y el marco jurídico internacional, con el cual todos los
gobiernos y naciones del mundo deben comprometerse a respetar y exigir su cabal
vigencia.
En el Aula Magna de la FFyL,
el profesor emérito Adolfo Sánchez Vázquez, fue tajante al afirmar que el
objetivo de Estados Unidos es la ocupación de Irak que, por su riqueza
fundamental, el petróleo, y su ubicación geopolítica, es clave para el dominio
de la vieja Europa y para cercar en un futuro no lejano a China.
Si se impone el unilateralismo
de la potencia imperial o un falso unilateralismo obtenido bajo presión, alertó,
tendríamos la destrucción de los tribunales y organismos internacionales como
la ONU y la Unión Europea, dado que aún cuando se mantuvieran vigentes estarían
“hechas añicos al dinamitarse su fundamento: el derecho internacional”.
En su lugar, abundo, se
tendría la ley de la selva o el derecho del más fuerte, ejercidos por la
potencia imperial.
No se justifica una guerra de
consecuencias tan espantosas para todos los pueblos y la humanidad, cuando
existen, si se trata de desarmar a Irak, vías pacíficas para lograrlo,
empezando por las inspecciones del Consejo de Seguridad que ya da frutos,
estableció.
Estados Unidos, dijo, rechaza
de antemano cualesquiera que sean los resultados de lo que por vía pacífica se
logre para alcanzar el desarme de Irak.
El dominio mundial que la
guerra contra Irak vendría a beneficiar militar y económicamente a Estados
Unidos, insistió, corresponde en el plano ideológico a la vieja idea que tiene
del destino manifiesto con respecto a los demás pueblos.
Sánchez Vázquez hizo hincapié
en que Bush quiere los votos necesarios para acelerar su “aventura criminal”,
por lo que la posición de México debe ser la de continuar por la vía pacífica,
consagrada en la política exterior de soberanía y autodeterminación de los
pueblos.
Sergio Fernández, también
profesor emérito de la Facultad, expuso que la lucha de Estados Unidos es por
las reservas petroleras árabes, lo cual significa dinero, “el más codiciado y
penetrante deseo que persiguen los yanquis en su actual y atormentada
existencia”.
En sí, advirtió, hay dos
conflictos: el de Bush contra Irak, no el de los estadounidenses en general, y
el de ese país contra su vecino del sur, separado por la frontera más larga y
peligrosa que existe en el planeta.
Bush, resaltó, sólo está
convencido de su propia postura. Está acostumbrado a que Estados Unidos dirija
en todas partes, batuta en mano, la orquesta universal. Pero, preguntamos
porque ellos mismos no se desarman.
A “palos de ciego”, precisó,
el mandatario estadounidense desea la destrucción de Irak, sin conciencia
alguna de que en ello le va la propia destrucción.
A su vez, la profesora emérita
Juliana González Valenzuela puntualizó que el pueblo busca y quiere la paz. En
general, ni la guerra ni la violencia o la pena de muerte se justifican
éticamente.
Menos aún, abundó, esta guerra
con la que se quiere perpetuar el estado de violencia, muerte y dominación;
responde a la doctrina de la catástrofe
previa y a la operación de limpieza completa, y a los ojos del mundo se exhibe
en toda su irracionalidad.
Detalló razones de fondo que
hacen absolutamente inadmisible la guerra contra Irak: la barbarie y el peligro
de la circularidad, pues son manifiestos los horrores del terrorismo.
Sin embargo, aseguró que no se
trata de enfrentar el terror con el terror y la violencia con la violencia,
sino romper con la circularidad y encontrar en otro nivel las formas no
terroristas. Es el imperativo de la ética y la política, de la civilización.
Hussein, advirtió, es un
dictador que tiene a su pueblo sometido y empobrecido. Posee armas químicas y
biológicas y está en disposición de lanzarlas,.
Pero, recalcó Juliana
González, tampoco esto tiene como única opción la guerra, en cambio quienes la
quieren exhiben como motivaciones de fondo un feroz afán de poder y su codicia
por la riqueza petrolera, dando toda clase de muestras de una soberbia
enceguecida por el deseo de dominio y de venganza.
Esta guerra no se justifica
por su unilateralidad, pues sería una afrenta. La ONU nació para evitar que un
solo país decida una guerra por su propia cuenta, sin atender a razones y a la
voluntad colectiva, sin el consenso multilateral. Este es el principal sentido
de unión de los países.
En su momento, el profesor
emérito Leopoldo Zea exigió el desarme no sólo de Irak sino de todos los países
que tienen equipo bélico masivo como Estados Unidos, China, Pakistán e India.
Asimismo, consideró urgente el
respeto a la ONU, organismo que deberá exigir el desarme mundial. Si Estados
Unidos no acata su mandato, deberá quedar fuera de la comunidad internacional.
El filósofo comentó que en la
decisión estadounidense de estallar la guerra contra Irak, hay un tremendo
engaño, porque su pueblo no está de acuerdo.
Expresó que Bush no da ningún
tipo de miedo, a pesar de sus intentos por provocarlo mediante una
“manipulación asquerosa”. Pero, tampoco hay temor por Saddam Hussein, quien es
“un pobre diablo”. Se trata de un “monstruo” creado por el padre del actual
presidente norteamericano, George Bush.
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PIES DE FOTO
FOTO 1
Leopoldo Zea, profesor emérito de la
Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, exigió el desarme tanto de Irak como
de todos los países con armamento masivo como Estados Unidos, China, Pakistán e
India. Participó en la mesa redonda “A favor de la paz en Irak”
FOTO 2
Juliana González, profesora emérita
de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, sostuvo que el pueblo busca y
quiere la paz, pero ni la guerra o la violencia se justifican éticamente, al
participar en la mesa redonda “A favor de la paz en Irak”
FOTO 3
El profesor emérito de la Facultad
de Filosofía y Letras de la UNAM, Adolfo Sánchez Vázquez, participó en la mesa
redonda “A favor de la paz en Irak” en la que aseveró que el objetivo de
Estados Unidos es la ocupación del país del Medio Oriente por su petróleo y
ubicación geopolítica
FOTO 4
El conflicto de George W. Bush no es
el de los estadounidenses, señaló Sergio Fernández, profesor emérito de la
Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, durante su participación en la mesa
redonda “A favor de la paz en Irak”, organizada por esa entidad universitaria
FOTO 5
Profesores eméritos de la Facultad
de Filosofía y Letras de la UNAM se pronunciaron por el no a la guerra contra
Irak, condenaron la actitud del presidente George W. Bush y pidieron al
gobierno mexicano respeto a la autodeterminación de los pueblos