06:00 hrs. Febrero 17 de 2003

Boletín UNAM-DGCS-120

Ciudad Universitaria

 

 

Pies de fotos al final del boletín

 

MÉXICO, POTENCIA COMERCIAL POR LOS TRATADOS COMERCIALES SUSCRITOS: FERNANDO DE MATEO

 

 

 

Los tratados de libre comercio suscritos por México en años recientes  han hecho que se le considere potencia comercial, afirmó Fernando de Mateo, coordinador general de Negociaciones con Europa de la Secretaría de Economía.

 

Sin embargo, sostuvo, estos convenios son sólo una parte de la política económica y, por lo mismo, no pueden responder a todos los problemas nacionales.

 

Durante su participación en la mesa redonda “¿Mayor competencia o un mercado intercontinental?”, realizada en el marco del Seminario Internacional México-Unión Europea, el funcionario destacó que dichos contratos internacionales son sólo un elemento que contribuye al funcionamiento de la economía del país.

 

En la Unidad de Seminarios Ignacio Chávez de la UNAM, De Mateo dijo que, en cuanto al comercio, la palabra clave para el país es diversificar sus relaciones económicas e inversiones, proceso que se ha acelerado a partir de la firma de dichos convenios.

 

Por ejemplo, refirió, en el caso del Tratado de Libre Comercio Unión Europea-México (TLCUEM), las exportaciones de productos industriales quedaron libres de aranceles, protección tributaria que se conservará hasta el año 2007.

 

Así, a más de dos años del TLCUEM hemos visto resultados interesantes, pues el comercio total aumentó casi 30%; las exportaciones hacia esa región se han incrementado en alrededor del 45%, y de la Unión hacia México crecieron 25%, indicó.

 

Por su parte, Csaba Polyi, consejero de Negocios de la Embajada de Hungría en México, señaló que con una ampliación de la Unión Europea (UE) no cambia su carácter de mercado único, sólo se amplía el escenario y el número de integrantes, lo cual representa más oportunidades comerciales para México.

 

Consideró que los acuerdos y convenios son instrumentos; por ello, depende de los gobiernos, los agentes de comercio y la sociedad civil determinar en qué forma y porcentaje se aprovechan.

 

Reconoció que la mayor dificultad para países como Hungría es la falta de comunicación y difusión de conocimientos sobre la forma en la cual “hacemos negocios y nos podemos acercar a los nichos de mercado”.

 

En este sentido, las naciones con menos recursos “necesitamos mayor proyección cultural en otros países, a fin de mostrar cómo somos, qué consumimos y hacia dónde pensamos desarrollarnos”, puntualizó.

 

En la mesa redonda “Implicaciones económicas y políticas para México”, Fernando Margain, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de la República, expresó que “debemos reconocer y sentirnos orgullosos del legado histórico europeo: la filosofía clásica, la ciencia experimental, el derecho romano, la idea de nación, el humanismo renacentista, la reforma y la contrarreforma; así como los grandes descubrimientos geográficos, la ilustración, la revolución industrial, la conciencia histórica, la libertad política, los derechos humanos fundamentales, el parlamentarismo y, ahora, la posibilidad de consolidarse como un Estado supranacional, baluarte de la paz y la tolerancia”.

 

Agregó que el reto actual para la UE y sus actores políticos es incorporar la gran diversidad de sus diferentes naciones y culturas con el sentido unitario de muchas de sus creencias, valores, ideas e instituciones.

 

Tiene que lograr, abundó, un tipo de unidad supranacional capaz de contener y diluir las tensiones nacionales y nacionalistas de sus países miembros; ello deberá convertirla en una región estabilizadora del orden planetario del nuevo milenio, que ofrezca una cara más humana y justa de la globalización.

 

Margain anotó que a partir de 2004, con el ingreso de nuevos miembros a la Unión Europea, el número y distribución de escaños en el parlamento europeo aumentará.

 

México, subrayó, mantiene una excelente relación parlamentaria institucionalizada con la UE, gracias a la suscripción de la declaración conjunta sobre cooperación y diálogo político de 1998.

 

En años recientes, expuso, los eurolegisladores han realizado giras de trabajo a México y Latinoamérica con el objetivo de acercarse a estos países. Prueba de ello son las cumbres, donde han participado jefes de Estado y gobierno de ambos bloques geográficos, incluyendo representantes de la zona de El Caribe.

 

Con la Unión Europea nos une un interés por acrecentar los intercambios económicos, comerciales y de inversión para crear empleos bien remunerados y una asociación estratégica birregional, la cual permitirá recibir los frutos de la cooperación técnica y material que caracteriza la política comunitaria hacia sus socios, aseveró Fernando Margain.

 

En la región latinoamericana, manifestó, nadie puede negar el impulso que esta relación ha tenido y mantenido en los campos de la democracia participativa y representativa, así como en la protección y promoción de los derechos humanos.

 

Para Antonio Soto Sánchez, observador acreditado por el Partido de la Revolución Democrática para el Consejo de Europa de la Cámara de Senadores, la conformación de la UE y su ampliación, al igual que otros procesos similares o de reconformación regionales, son una expresión tangible del proceso de globalización.

 

Nuestro país, resaltó, ha estado y está vinculado a Europa y a su destino desde muchas perspectivas, por razones de orden histórico así como de una renovada relación política y económica.

 

En su oportunidad, Jaime García Amaral, director general para Europa de la Secretaría de Relaciones Exteriores, destacó que -en general- el nivel del diálogo político con los países de Europa se ha elevado en los últimos años.

 

Con los europeos, enfatizó, compartimos objetivos comunes que pueden ir desde el fortalecimiento de los sistemas democráticos y la prevalencia del Estado de derecho, hasta la difusión de la cultura y el respeto de los derechos básicos. Estas coincidencias, apuntó, se han ido manifestando de manera cada vez más creciente en los foros de carácter universal como las Naciones Unidas.

 

Explicó que en términos de representación diplomática, la presencia de México en la UE es de 23 embajadas y tres consulados generales. En el país, informó, tenemos 23 embajadas residentes de Europa y 13 concurrentes desde Washington y Nueva York. Asimismo, contamos con 27 mecanismos de consulta política -vigentes y activos- para el diálogo bilateral, además de cuatro comisiones binacionales con países miembros de la UE (España, Francia, Italia y Portugal).

 

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Foto 1

 

A poco más de dos años de que entrara en vigor el Tratado de Libre Comercio Unión Europea-México, el comercio total aumentó 30%, informó Fernando de Mateo, coordinador general de Negociaciones con Europa de la Secretaría de Economía, en un seminario sobre el tema organizado por la UNAM.

 

 

Foto 2

 

Para Csaba Polyi, consejero de Negocios de la Embajada de Hungría en México, los acuerdos y convenios comerciales son instrumentos; por ello, depende de los gobiernos y la sociedad civil determinar en qué forma y porcentaje se aprovechan.

 

 

Foto 3

 

El presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de la República, Fernando Margain, consideró que el reto actual para la Unión Europea es incorporar la diversidad  de sus diferentes naciones y culturas con el sentido unitario de muchas de sus creencias, valores, ideas e instituciones.