14:30 hrs. Noviembre 22 de 2002


Boletín UNAM-DGCS-0960

Ciudad Universitaria

 

 

Pies de fotos al final del boletín

 

ANÓMALO, EL FRÍO QUE SE REGISTRA EN EL TERRITORIO NACIONAL; PODRÍA SER PEOR: ERNESTO JÁUREGUI

 

·        Estadísticamente las temperaturas mínimas se registran a principios de año, afirmó el especialista del Centro de Ciencias de la Atmósfera

·        No es posible predecir qué tanto frío habrá en el invierno pero deben esperarse temperaturas bajas rigurosas cuando lleguen con mayor frecuencia las masas de aire polar y si se presenta el fenómeno de “El Niño”

 

El frío que se registra en el territorio nacional desde hace unos días es anómalo porque estadísticamente las temperaturas más bajas ocurren a principios de año, sobre todo en enero, además de que éste podría ser más crudo si se presenta el fenómeno de “El Niño”, afirmó el doctor Ernesto Jáuregui, investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM.

 

El científico señaló que apenas se inicia la temporada de frío, que comienza con las primeras invasiones de aire polar como la que afecta actualmente al país, por lo cual es probable que se registren temperaturas menores en los próximos meses.

 

Por supuesto, dijo, en el norte del territorio el efecto de las masas de aire frío que bajan desde Canadá y el Polo Norte es más marcado. “Mientras que aquí se registran temperaturas cercanas a los cero grados, allá hay algunas menores a 10 grados, sobre todo en áreas rurales”.

 

Ello se debe fundamentalmente a las bajas temperaturas en sí mismas y a los vientos, que son más intensos en aquella región de México. “Aquí hemos sentido un viento ligero, pero allá el rigor del vendaval es marcado”.

 

Explicó que en años en los cuales se presenta el fenómeno de “El Niño” los inviernos tienden a ser más severos, sobre todo en la altiplanicie de México. “Tenemos noticias de que se está iniciando este fenómeno, lo cual podría reforzar la probabilidad de que la actual temporada de frío sea más rigurosa”.

 

Según las mediciones, que consideran infinidad de variables meteorológicas, “El Niño” está por llegar, pero no se puede predecir su evolución o, incluso, si en efecto se hará presente, ya que los índices que auguran su arribo podrían disminuir.

 

De ocurrir, abundó, no sólo podría haber un invierno más crudo, sino -según los datos estadísticos- sequías a escala regional, aunque áreas como el noroeste del país se beneficiarían con lluvias excepcionales.

 

Precisó que aunque, en sentido estricto, no es posible predecir qué tanto frío habrá en el invierno que está por comenzar, se deben esperar temperaturas más bajas, cuando lleguen con mayor frecuencia las masas de aire polar.

 

El doctor Jáuregui refirió que en la cuenca del Valle de México y en esta ciudad -de donde se cuenta con registros históricos- puede apreciarse que durante el siglo pasado se presentaron varios períodos de frío “riguroso”. El último evento de este tipo fue en la década de 1960, cuando incluso cayó nieve en la metrópoli.

 

A partir de entonces, sólo se han presentado nevadas en las montañas que circundan el Valle de México, pero no en la misma ciudad. Esto último ocurrió, por ejemplo, en cinco ocasiones durante la década de 1980 y dos en la de los noventa.

 

Sin embargo, aclaró el especialista, en la ciudad de México las temperaturas muy bajas, como las registradas a inicios del siglo pasado y en la década de 1920, cuando se llegó hasta menos cuatro grados centígrados, “han desaparecido”.

 

En promedio, dijo, hay una tendencia clara hacia el ascenso de las temperaturas mínimas extremas: ya no bajan de cero grados debido a la urbanización creciente de la ciudad, aunque este año podría ser la excepción.

 

A medida que creció la magnitud de la urbe también subió la temperatura. De ese modo, en el ámbito urbano, los niveles bajos extremos ya no se presentan con tanto rigor como antes. “Eso no quiere decir que no tengamos invasiones de aire frío como la actual, pero no se compara con los extremos que ocurrieron en el pasado”.

 

El científico universitario está documentando los cambios de temperatura debidos a la urbanización en una docena de ciudades grandes de nuestro país como Monterrey, Guadalajara, Toluca y Torreón, en las cuales la tendencia es la misma: incrementos pequeños pero detectables.

 

Este tipo de fenómenos, conocidos como “islas de calor”, son benéficos en el invierno porque reducen el frío; empero, en los meses de marzo a abril incrementan la temperatura.

 

De cualquier manera, las bajas temperaturas ocasionan resfriados y enfermedades de las vías respiratorias, por lo que ante todo es necesario abrigarse, finalizó Jáuregui.

 

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PIES DE FOTO

 

Foto 1

 

Ernesto Jáuregui, del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, aseguró que el frío que se registra en el país desde hace unos días es anómalo porque estadísticamente las temperaturas mínimas ocurren a principio de año.

 

Foto 2

 

Cuando se presenta el fenómeno de “El Niño”, los inviernos tienden a ser más severos, lo cual refuerza la probabilidad de que esta temporada de frío sea más rigurosa, explicó el especialista